La mañana de ayer en Torreón, Coahuila, autoridades gubernamentales realizaron la clausura de un anexo de rehabilitación, que tenía dos meses de funcionamiento, ello por carecer de los permisos, por insalubridad, por tortura y por maltrato.
De ello, Víctor Ramos, director de Prevención Social de Torreón, dio a conocer que el anexo tenía dos meses de funcionamiento, en condiciones deplorables y que aunque estaba abierto, no cuenta con los permisos, además de que al inicio de sus labores no presentaron una un acta constitutiva, pero a ello se le suma que no presentaron las altas en Hacienda.
A las irregularidades para la apertura del anexo, se incluye que carecen del protocolo de Protección Civil, tampoco tienen ningún documento para poder operar.
Durante la supervisión, el funcionario indicó: “Encontramos también, que manifiestan algunos jóvenes que han sido golpeados, castigados y torturados y ello se ha comprobado, ya que en el lugar encontramos elementos como son las esposas, los lugares donde los tenían esposados por largas horas del día”.
Víctor Ramos agregó: “Encontramos también mucho problema, sobre todo en salubridad, las condiciones son deplorables en la cocina, al igual que en los dormitorios y a ello se le suman las condiciones de los sanitarios, totalmente insalubres”.
Al continuar, expresó: “Encontramos también a siete menores, ahorita el tema de los menores pues es un problema. porque pues hay muchos vacíos dentro de la ley, donde no hay albergues para tratarlos a ellos y muchas de las familias se desesperan porque no encuentran donde les puedan dar la ayuda”.
Además se advirtió que en total se trasladaron a 22 internos, pero que a otros la fiscalía se los llevó como testigos, porque traían golpes, cicatrices y moretones y que rendir sus respectivas declaraciones.
A los internos que fueron encontrados, se les trasladó a centros de rehabilitación establecidos y con costos bajos para que sus familias los busquen en estos sitios Y determinen si dejarlos o buscar algún otro sitio.
En lo que respecta a los menores se dijo que fueron entregados a sus familias.
Finalmente, se indicó que debido a los problemas que enfrentan jóvenes y adultos, con adicciones; las familias de los internos buscan ayudarlos y los ingresan en sitios donde les piden cuotas más económicas, pero sin buscar lugares debidamente establecidos y certificados.