UN ADULTO RESPONSABLE
Estaba viendo el especial de un comediante en el que decía que en realidad no hay héroes, simplemente hay gente que hace lo que debe según las circunstancias. Para mí, no tiene razón, porque yo sí he visto a héroes y muchas veces, a veces hasta en mi propio hogar.
La gente que se levanta temprano para hacer funcionar a su estado: los granjeros, conductores, médicos, preparadores de desayunos, padres de familia, entre muchos otros, sobre todo cuando ni siquiera tienen la obligación de hacerlo y deciden que sí, porque otras personas dependen de ellos.
Después cuento a l@s que estiran el poco dinero que reciben (de jef@s explotadores) y lo convierten en grandes inversiones, comida, pasajes y hasta gustitos, tanto para ellos como para sus hijos.
También están aquellos que están siempre dispuestos a ayudar con una moneda: para el señor que ya adoptó una esquina como su lugar para pedir; al joven que “perdió” el dinero del pasaje; a la “señito” que vende sus verduras y aunque a veces ni se lleven el producto, siempre le dejan un apoyo.
Los héroes están entre nosotros y se hacen pasar por amigos que prestan dinero, aunque al final no se los devuelvan; por personas que no son tu familia pero te quieren como tal y (más importante aún) te lo demuestran; por profesores que creyeron en tu potencial y te apoyaron en los momentos más oscuros, hasta que tú mismo te diste cuenta de tu potencial y hasta dónde podías llegar.
Los profesionales que van más allá de lo estrictamente laboral y te preguntan “¿cómo va todo?”. De igual forma debemos mencionar a las personas que te enseñan sin cobrar: a cantar, a practicar un deporte, a tocar un instrumento, a manejar, a cuidar las finanzas.
Estoy seguro de que quienes se merecen más que nadie un lugar en el cielo de los héroes, son aquellos que te escucharon mil y una vez hablar de lo mismo (aún sin llegar nunca a algún lado) y siempre prestaron oído.
Están aquellos que sí tienen superpoderes, el de la paciencia, por ejemplo, para atender a la gente grande o para los que no saben por cuál picante los mandaron o cuál es la diferencia entre perejil y cilantro.
Los que tienen el poder de los “Resolvedores” y jamás se les cierra el mundo, siempre encuentran una solución de todo y parece que tienen un gadget para cada situación.
Y aunque son menos reconocidos, hay héroes que suelen ser el “alivio cómico” en la vida de los demás y se dedican a hacer reír, aunque muchas veces por dentro sepan que se los está llevando el tren…
Es mentira lo que decía aquel comediante, de cuyo nombre sí me acuerdo, pero no menciono acá para no quemarlo más de lo que ya está. Los héroes sí existen y están en cada una de las personas que por impulso, costumbre o estilo de vida, dejan de lado sus propias necesidades, aunque sea por un momento, para estar al pendiente de los demás.
La vida es muy corta como para ser huraño, y si vas a hacer un favor, aunque al final no te lo agradezcan, ganas experiencia para ser amable en los momentos correctos y dejar que la gente sufra en otros tantos. Porque también hay que decirlo, a veces ayudar solo sirve para hacer inútiles a los demás.
Nota: Gracias a los héroes sin capa que hacen nuestra vida un poquito más fácil, y si tienes a tu favorito, házselo saber, ya que mañana podría ser muy tarde.