Los Tuzos del Pachuca vivirán un par de semanas complicadas, ya que según el calendario, jugarán cuatro partidos en 11 días, cumpliendo con dos visitas y dos juegos de local. La odisea comenzará el día de mañana, cuando el equipo blanquiazul visite a Querétaro, que en el papel es el partido más a modo que tiene el equipo hidalguense, ya que los Gallos andan de capa caída y solo han rescatado tres puntos en el torneo, sufriendo ya un par de descalabros; situación similar tendrán los Tuzos cuando regresen a casa el sábado para su choque contra Atlas, pues los rojinegros, aunque tienen una mejor defensiva con respecto a Gallos, no han podido ser contundentes adelante, sumando solo dos goles en tres partidos.
El partido más difícil será cuando Pachuca reciba a León (en partido pendiente de la jornada 1) pues de la mano de James, los albiverdes han comenzado una racha positiva, que podría extenderse en caso de derrotar a Chivas hoy.
La segunda visita será al Cruz Azul, que para entonces ya tendrá técnico nuevo, y muchas ganas de competir.
Seguramente veremos rotaciones en el cuadro titular de Almada, como es costumbre en torneos recientes.