Pulso del Mezquital
El PT se ha convertido más que en un partido, en una agencia de colocación para aquellos políticos, cuyos antecedentes son motivo del estigma y la exclusión social, pues mientras el ciudadano promedio no les tendría confianza para dejar cerca su cartera, los este instituto político, se les ha convertido en un motivo de orgullo, por tener entre sus filas a los transgresores de la ley, que de vivir en una democracia de medio cachete, andarían con la cola entre las patas.
Imagínense, que en el tiempo de las mujeres, justamente cuando la crisis de feminicidios, desapariciones y la violencia remarcada hacia este sector, el PT postuló como candidato a presidente municipal por Tasquillo, a un agresor confeso y grabado en video, de quien es la madre de su hijo.
Resulta que el año pasado, el hoy candidato, perdió la paciencia y agarró como pera loca a la cabeza de una mujer. Resultó, que la víctima, era su expareja, quien acudió a buscar ayuda de la autoridad para exigirle el pago de la manutención de su hijo.
Según dijo en su momento, su reacción fue porque no se privilegió el diálogo, es decir, que la señora en vez de buscarlo y echarse una plática, de inmediato fue a las autoridades y conociendo cómo son de chismosos los funcionarios, pues se corría el riesgo de que se regara el chisme. Obviamente se regó, pues la agresión quedó grabada en un video, que salió más allá de nuestras fronteras.
Cuando creímos que no solo iría a prisión, sino al basurero de nuestra memoria, sucede que el PT lo desempolvó y lo puso en marcha nuevamente, para convertirlo en su candidato a presidente municipal. Obviamente, como sucede en estas cosas, el PT se ha puesto en su calidad de víctima, para decir que sus candidatos sí robaron, pero poquito.
Quizá no hemos leído las letras chiquitas de los estatutos, pero seguramente ahí se debe explicar del por qué necesariamente el requisito para ser militante y sobretodo, candidato, es tener antecedentes penales, sospechas de actos de corrupción, carpetas de investigación en curso, o simplemente que los bigotes nos huelan a pólvora.
Elegir una autoridad o un representante popular, debería hacerse como cuando uno compra un automóvil usado, revisar desde el motor, qué fallas trae, porque nadie vende un coche por bueno. Y es que existen carros que ya pasan aceite, andan sacando humo azul, traen fallas de origen, lo mismo pasa con los candidatos que están en la contienda.
Entonces con esta analogía, así de manera minuciosa deberíamos analizar a los candidatos, su pasado, su presente, su patrimonio, sus intereses y desde luego sus propuestas, porque si traen fallas de origen y aún así los elige, después no se quede con que los deje a pie porque lejos de resolver un problema sucede que hay que invertirle más dinero y les recuerdo que una vez adquirido ya no hay devolución.
En corto:
- Continúan las diferencias en el municipio de Actopan por la llegada de la presidenta municipal suplente, María del Socorro Apatiga.
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