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martes, mayo 6, 2025

Tradición, fe y humanidad

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Por 56 años consecutivos, el Viacrucis viviente del Barrio Mágico de El Arbolito, culminó sin incidentes y con la asistencia de cientos de personas que vivieron por más de 5 kilómetros, la Pasión de Cristo.

Esta representación es la más antigua de la capital hidalguense, y para esta edición, el papel de Jesús fue interpretado por Salvador Pichardo Contreras, sobrino del fundador Enrique Pichardo, quien le dio la bendición antes de empezar con la representación.

La interpretación comenzó desde la casa de la cultura y continuó por el Gato Montés, la iglesia de la Asunción de María, los mercados Miguel Hidalgo y Benito Juárez, donde ya esperaban más feligreses para unirse al contingente.

El recorrido siguió por las minas de Real del Monte y San Juan Pachuca, punto en el que mineros esperaban al Cristo minero con estandartes, y ataviados con sus uniformes, cascos y linternas.

También en este lugar, sucedió la primera caída, y momento especial significó el hecho de que fuera un minero quien le ayudara con la cruz durante unos metros, fortaleciendo el origen de la representación.

Representativo es el hecho que durante el recorrido, explicaban cada una de las estaciones, y exhortaban a los espectadores a la reflexión sobre la vida del hijo de Dios, y a conducirse por el buen camino, en donde se privilegien la vida en familia y las enseñanzas que dejó Jesús para la humanidad.

Este hecho fue ejemplificado en algunos pequeños puestos colocados por creyentes que regalaban bolsas o botellas de agua para las personas que integraban el contingente que se dirigía a la mina El Cuixi.

Durante el trayecto, se escuchaban algunas voces, principalmente de pequeños que al observar los golpes que tiraban al nazareno gritaban “ya no le peguen”, y también se pudo notar la integración de nuevas generaciones a la representación, en un símbolo de inculcar una tradición y, principalmente, la fe.

Con la representación de cada una de las estaciones, en calles elevadas y bajo los constantes rayos del sol, el destino final se vislumbró a poco más de 3 horas de haber iniciado el Viacrucis Viviente. 

Era la mina El Cuixi en donde esperaban más espectadores, así como establecimientos que ofertaban diversos alimentos y bebidas para degustar, posterior a la crucifixión y muerte del Nazareno.

El Viacrucis Viviente del Barrio Mágico El Arbolito, estuvo en todo momento resguardado por unidades de seguridad pública municipal, y alrededor de las 15:30 horas terminó sin incidencias.

Esta representación de la Pasión y Muerte de Jesús, agrega un año más a su tradición y fe, sumando más adeptos y fortaleciendo la unidad de la comunidad a través de un ícono de la religión católica.

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