El Real Madrid conquistó su cuarta Copa Intercontinental, primer club del mundo en conseguirlo, exhibiendo la fortaleza ofensiva de su tridente, con la inspiración de Vinícius como factor desequilibrante ante la lucha del Pachuca, el día que Carlo Ancelotti se convirtió en el técnico más laureado de la historia del club blanco.
Sin necesidad de exhibir un fútbol brillante, casi sin tener que apretar el acelerador, el Real Madrid impuso la lógica futbolística y despertó de su sueño a Pachuca ante la gran distancia de potencial entre los dos equipos. La primera conquista del mundo en una temporada en la que podrá hacerlo hasta en dos ocasiones. Un título que llega en un momento perfecto para silenciar la crítica a Carlo Ancelotti, cuya cita con la historia muestra la dimensión de su figura.
Con el orgullo exhibido en todo su camino hasta la final, Pachuca saltó al partido de sus vidas sobrado de voluntad. Mordió arriba y logró desfigurar al Real Madrid en un arranque irregular. Repleto de imprecisiones en el pase, con dudas, pérdidas en campo propio y sin encontrar a sus jugadores de arriba. ‘Carletto’ fue con todo. Con su once más ofensivo. Mbappé tenía una cuenta pendiente con el Lusail Stadium y debía saldarla.
Al minuto 37’ llegó la anotación de Mbappén, en una magnífica jugada precedida por Vinicius Jr. En la parte complementaria, al 53” el brasileño Rodrygo sacó un espectacular disparo para colocar el 2-0. En tanto, Vinicius Jr sepultó a los Tuzos desde los once pasos al 84”.