LAGUNA DE VOCES
Lo peor sucederá y no hay remedio. Así está escrito. Llámale destino, designio divino, como quieras, pero todo lo peor que hayas imaginado, se transformará en realidad tarde o temprano, porque así está anotado en los libros que deciden tu pasado, presente y futuro. Así que no hay nada por hacer, y para que tengas una vida menos dolorosa, resignate que no eres personaje alguno en este momento que ni a histórico llega, porque los que son como tú, es decir, mayoría, llevaron al poder a sujetos desquiciados, enfermos de soberbia, que de vez en cuando, Dios suelta para hacer una purga en el planeta entero. Sin ellos estaríamos condenados a que gentes como tú murieran de aburrimiento, de fastidio, en una realidad que no camina hacia ninguna parte, como no sea empezar a querer enamorarse del amor, de ese sentimiento que con bastante regularidad se transforma en el peor enemigo del ser humano, ya ves cómo trataron a mi hijo, muerto y crucificado por una secta de fanáticos que todavía esperan a un Mesías, mientras asesinan y asesinan, porque no perdonan, porque son vengativos, porque mintieron los que dijeron que lo pasado, pasado, es decir las brutalidades del nazi ese y su grupo de locos. Pero hoy son igual a esos que tantas cosas les hicieron, y pusieron a un demente de presidente gringo, un bobalicón que se cree rey, emperador, Sumo Pontífice, todo pues. Y por eso amenaza todos los días, y jura que como ellos ninguno, y hasta leedor de la mente salió el loco. Están condenados a la nada. Lo saben. Lo intuyen. Y así está bien, me dicen los más sinceros, porque se toparon con una transformación que solo transfiguró y desfiguró a los que vivían en la carpa de los payasos, pero hoy mandan, deciden el futuro de toda una nación con base a rencores, a venganzas, a todo eso que se reúne, se atesora, porque nada mantiene la vida con más resistencia que la sed de rabia, de cobrar afrentas, de hundir al que se tiene a la mano. Por eso todo queda igual, o peor, porque la verdadera empatía con las mayorías se pierde cuando se les va hacia abajo, cuando el que cobra la venganza es el único ofendido y así lo entiende, y así lo aplica.
Por eso te digo que lo peor sucederá, sin cambio alguno, sin posibilidad de que el futuro inmediato se transforme en algo menos sombrío y lamentable. Sucederá porque así está decidido y ya.
Ten paciencia. Ten calma. Puede que sobrevivas, puede que no.
Pero así ha sido y será.
Mil gracias, hasta mañana.
@JavierEPeralta