La infección por Salmonella es una enfermedad bacteriana común que afecta el aparato gastrointestinal. Usualmente es ocasionada por la ingesta de alimentos como carne de res, pollo, pescado, chorizo, huevo y algunos vegetales, así como agua contaminados, aunque también puede transmitirse entre personas por vía fecal-oral.
Entre los síntomas más comunes de la infección se encuentran náuseas, vómito, diarrea (puede tener sangre o no), fiebre, dolor abdominal y dolor de cabeza.
En épocas de calor, la descomposición acelerada de los alimentos aumenta el riesgo de aparición de esta enterobacteria, provocando brotes familiares y comunitarios. Por ello, la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), invita a la población en general a seguir estas recomendaciones:
- Enterrar el excremento al defecar al ras del suelo, preferiblemente con cal, y mantener los baños con drenajes limpios.
- Lavarse las manos antes y después de ir al baño.
- Evitar el consumo de pollo crudo o mal cocido. No comprar pollo con coloración verdosa, pegajoso, reseco o con olor desagradable.
- No descongelar carnes a temperatura ambiente; se debe hacer por cocción o en horno de microondas.
- Asegurarse de que la carne esté bien cocida.
- No usar los mismos utensilios para alimentos crudos y cocidos.
- Lavarse las manos con agua y jabón después de tocar carne cruda.
- No lavar el pollo. En caso de hacerlo, evitar salpicar utensilios y otros alimentos; si sucede, lavarlos y desinfectarlos.
- Conservar adecuadamente los alimentos. Almacenar el pollo crudo en refrigeración o congelación.
- Al comprar pollo y derivados, verificar que se encuentren a temperaturas adecuadas de refrigeración.
Es necesario involucrar a todo el núcleo familiar y seres queridos en la adopción de estas medidas, a fin de fortalecer el autocuidado de la salud. Para más información, o ante cualquier síntoma, la población puede acudir a la unidad de salud más cercana.