El diputado federal Ricardo Crespo Arroyo convocó a una conferencia de prensa para «puntualizar y dar su justa dimensión al tema» y descartar un conflicto de intereses en el contrato que el INFONAVIT otorgó a la constructora de sus hermanos, la cual fue constituida por el esfuerzo de su padre, ya fallecido.
«En cuarenta años yo no he formado parte de ella de ninguna manera, no tengo acciones y yo no defino los contratos del INFONAVIT ni tengo relación con el gobierno federal», sentenció.
Aseguró que sus hermanos, Arturo y Gibrán, se han hecho cargo de su patrimonio y decidieron participar en la licitación del contrato, el cual les fue otorgado tras cumplir con los requerimientos exigidos por el mencionado instituto. «Si el tema se conoce, es precisamente porque es público, no se esconde nada», afirmó.
«En este momento, mi labor es legislar, pero toda mi vida la he dedicado al servicio público», declaró. Y agregó que sus hermanos, Arturo (arquitecto) y Gibrán (abogado), tienen el derecho a trabajar «por su futuro, a ampliar sus posibilidades, siempre dentro del marco legal, como lo ha advertido, incluso, la presidenta Claudia Sheinbaum».
En este contexto, recordó que son precisamente las políticas de transparencia de la presidenta Sheinbaum las que permitieron localizar el contrato en la propia página de INFONAVIT, pues insistió en que nada se esconde y la prueba es que los datos que circulan en medios y redes son, precisamente, los localizados en ese sitio.
Finalmente, estuvo de acuerdo con el anuncio de la Primera Mandataria en el sentido de someter a revisión, nuevamente, el caso y determinar la existencia o no de un conflicto de intereses.
