CINE DE SIEMPRE
He recibido algunas quejas por no otorgarle la importancia que se merecía al fallecimiento del director David Lynch a los 78 años,
Trate de justificar mi postura señalando que no era de mis directores favoritos, pero lo cierto es su obra, aunque escasa, tuvo un impacto universal y bien merece una nota.
Tuvo un inicio deslumbrante, desde su impactante debut independiente con Cabeza borrada en 1976, pasando a la aclamada Hombre elefante, sobre John Merrick, nominada a ocho óscares.
Visionario adelantado a su época tuvo un primer descalabro con Dunas, filmada en México, que con el paso del tiempo se ha convertido en un filme de culto que se puede ver en You tube.
Reivindicado con Tercipelo azul incursionó en la televisión con Twin peaks, actuando incluso en algunos episodios, para luego deslumbrar con Salvaje de corazón , Palma de Oro en Cannes y Por el lado oscuro del camino.
Sorprendió a propios y extraños con Una historia sencilla en la que el anciano granjero Richard Farnsworth recorre el país en una podadora, para reconciliarse con su hermano.
Regresó a su intrincado universo con Mullholland drive e Imperio.
Ganó un óscar honorífico en 2019.
Curiosamente el último recuerdo que tenemos de él, es como actor, interpretando ni más ni menos que al legendario padre del western John Ford, en Los Fabelman de Steven Spielberg, dando consejos a un joven aspirante a director.
Grabó además cuatro discos y se casó cuatro veces.
Sin duda un ícono del cine y las artes.