El narcotraficante Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del cártel de los Zetas, se declaró inocente del delito de narcotráfico al inicio del juicio que realiza en México la Fiscalía General de la República (FGR).
Este proceso sucede tras su deportación desde Estados Unidos, donde antes había reconocido ser culpable por cargos de narcotráfico y otros delitos relacionados.
En la primera audiencia realizada el martes, tras su extradición el domingo, Cárdenas solo escuchó las acusaciones en su contra, sin responder las preguntas de la FGR y se limitó a asegurar su inocencia, según fuentes judiciales citadas por medios nacionales.
La siguiente audiencia se llevará a cabo el próximo domingo 22, donde se espera que el juez resuelva si dicta auto de formal prisión al capo, tras ser recluido en un penal de máxima seguridad en el central estado de México, vecino a la capital del país.
El fundador del hoy extinto Cartel de los Zetas, antes brazo armado del Cartel del Golfo, estuvo 14 años preso en EE.UU. por narcotráfico y delitos contra la salud, donde se declaró culpable de cinco cargos mediante un acuerdo con la Fiscalía, que le retiró otros 12 cargos que le habrían significado una condena a cadena perpetua.