A través de un ritual ancestral, este viernes se llevó a cabo la ceremonia de colocación de las piedras fundacionales del Museo de la Gastronomía Mexicana en el parque temático Mundo Charro, que se ubicará en el municipio de Singuilucan.
En lugar de una sola piedra, representantes de 22 estados dejaron una piedra marcada simbólicamente, representando la diversidad y riqueza culinaria de cada región.
Al respecto, la secretaria de Turismo de Hidalgo, Elizabeth Quintanar, subrayó la importancia de este sitio para la promoción de la cultura y el turismo del estado:
“Este museo no solo será un espacio de exhibición, sino también un punto de encuentro para que visitantes nacionales e internacionales conozcan y disfruten de los sabores que nos distinguen”, comentó la secretaria.
De igual forma, la servidora pública destacó el papel vital de los pueblos originarios en la conservación de estas tradiciones culinarias: “Este evento es un claro ejemplo de la resistencia de los pueblos originarios, quienes toman los recursos otorgados por la madre naturaleza y, con amor y dedicación, los transforman en alimento. Son ellos quienes nos enseñan el verdadero valor de la gastronomía mexicana”.
Durante este encuentro, se contó con la participación de cocineras tradicionales de Hidalgo y de otras entidades como Chihuahua, Oaxaca, Guerrero, Veracruz, Estado de México, Sinaloa, Ciudad de México, Tabasco, Coahuila y Campeche.
Ahí, las participantes aportaron su experiencia y tradiciones culinarias; y luego de ofrendar a la madre tierra y los cuatro puntos cardinales, cada una dejó una piedra o una ofrenda en el espacio donde se construirá el museo.
Simbolizando de esa manera, la unidad y la diversidad que caracteriza a la gastronomía mexicana. Además, artesanos locales y de los estados mencionados, también tuvieron oportunidad de exhibir su trabajo y aportar con sus obras, al ambiente cultural de la ceremonia, en donde también hubo degustación de los platillos típicos de cada zona.
El Museo de la Gastronomía Mexicana en Singuilucan, busca convertirse en un referente turístico y cultural, a través de la diversidad de sabores, técnicas culinarias y productos locales, al tiempo que impulsa el desarrollo de las comunidades involucradas.