El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y el canciller de México, Juan Ramón de la Fuente, mantuvieron una llamada telefónica en la que hablaron sobre los vuelos de deportación de migrantes y el control del tráfico de fentanilo, informó el pasado jueves el Departamento de Estado.
En la llamada, que se llevó a cabo el pasado miércoles, los dos diplomáticos abordaron «acciones conjuntas para asegurar la frontera entre Estados Unidos y México, desmantelar los carteles y detener el tráfico de fentanilo y armas», detalló el departamento en un comunicado.
Rubio le expresó a De la Fuente su «aprecio por los recientes esfuerzos de México para frenar la migración ilegal», principalmente el despliegue de 10 mil tropas de la Guardia Nacional mexicana en la frontera con Estados Unidos.
También destacó la recepción en el sur de México de vuelos de migrantes indocumentados deportados de Estados Unidos.