El Real Madrid, con la duda de Lylian Mbappé, se lanza a por su novena corona mundial, con el reto de ser dominador del historial de la Copa Intercontinental en el regreso de la competición 20 años después, como ya lo es del Mundial de Clubes, con el deseo de poner un broche de oro a un gran 2024, obligado a superar la ilusión de los Tuzos del Pachuca, campeón de la Concacaf, y su meritorio camino hasta la final en Catar.
Cada título mundial es sinónimo de obligación para el Real Madrid, señalado siempre como gran favorito ante cualquier rival. Y lo asume ante Pachuca, que tumbó al campeón de México, Estados Unidos, Brasil y Egipto, el equipo más laureado del Viejo Continente. Tiene en su mano serlo de todo el planeta con la oportunidad de conquistar su cuarta Copa Intercontinental para superar en el historial a Milan, Peñarol, Boca Juniors y Nacional.
Ya domina el del Mundial de Clubes, que estrena formato en 2025, con la oportunidad para el Real Madrid de proclamarse dos veces campeón del mundo en una misma temporada. Cosas del fútbol moderno y de un calendario que asfixia a los grandes y afecta al rendimiento de los jugadores. Cada temporada más partidos y exigencia, menos descanso. Las lesiones se disparan. La brillantez del juego baja.
Por el lado de Pachuca, los dirigidos por el uruguayo Guillermo Almada, su principal fortaleza en la Copa Intercontinental ha sido la defensiva. No han encajado un solo tanto en el torneo y poner freno a la calidad individual del Real Madrid, es su prioridad en la cita en el Lusail Stadium, para la eternidad conocido como el estadio donde Leo Messi tocó el techo en su carrera al proclamarse campeón del mundo con Argentina. El día que Mbappé marcó tres tantos en una final que no sirvieron para vencer.
Si el equipo de Guillermo Almada saldrá con una clara consigna defensiva y la obligación de no perder el orden ni dejar espacios a las estrellas madridistas, en la faceta ofensiva se ampara en la figura del venezolano Salomón Rondón, quien suma 26 goles en el 2024, y el neerlandés-marroquí Oussana-Idrissi, que pasó por el Sevilla.