Houston se impone 107-115 en San Francisco con un VanVleet estelar y define el pase en casa este domingo.
Los Houston Rockets lograron este viernes una victoria clave en San Francisco por 107-115 ante los Golden State Warriors, con lo que empataron 3-3 su serie de primera ronda en la Conferencia Oeste y forzaron el séptimo juego, que se disputará el domingo en el Toyota Center de Houston.
Fred VanVleet fue la figura del encuentro con 29 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias, liderando a un equipo que mostró solidez en defensa y efectividad en ataque para mantenerse con vida en la serie. El base canadiense ha sido decisivo en los últimos tres partidos, sumando 80 puntos en ese lapso.
“Sabíamos que no teníamos margen de error. Jugamos con intensidad y carácter. Ahora todo está en nuestras manos”, declaró VanVleet al término del encuentro.
Los Rockets dominaron en aspectos clave como los rebotes (62-51), los robos (12-6) y cometieron menos pérdidas de balón (11 frente a 16 de Golden State), lo que fue determinante ante unos Warriors erráticos desde el perímetro y con bajo acierto general (41,1 % en tiros de campo y 30,6 % en triples).
Alperen Sengun aportó un doble-doble con 21 puntos y 14 rebotes, mientras que Steven Adams sumó 17 unidades, consolidando una defensa que dejó a los Warriors con solo 21 puntos en el primer cuarto.
Pese a un intento de reacción liderado por Stephen Curry en el segundo cuarto, con un parcial de 11-0 que igualó momentáneamente el marcador, los Rockets mantuvieron la ventaja al descanso (48-53) y nunca soltaron el control del partido.
“El último cuarto fue clave. Salimos agresivos y eso marcó la diferencia”, dijo el entrenador de Houston, Ime Udoka, al destacar el parcial de 0-6 en menos de un minuto que obligó a Steve Kerr a pedir tiempo muerto.
Los Warriors, que llegaron a estar arriba 3-1 en la serie, se mostraron superados emocionalmente tras un triple de VanVleet que dio +12 a los Rockets a 6:47 del final. La frustración se apoderó del equipo local, que firmó un pobre 3 de 19 en tiros de campo en ese último cuarto.
“Nos faltó energía y puntería. Eso nos mató”, reconoció Stephen Curry, quien terminó con 29 puntos, pero con un 39,1 % de efectividad (9 de 23 en tiros de campo).
El ganador del séptimo juego se enfrentará a los Minnesota Timberwolves, que eliminaron a los Lakers 4-1. Houston, con la ventaja de campo y el impulso anímico de haber remontado una serie adversa, se perfila ahora como el favorito para avanzar.
