Los líderes republicanos en el Congreso de Estados Unidos acusaron este miércoles a la campaña demócrata de usar al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para influir en la campaña electoral en favor de la vicepresidenta, Kamala Harris.
El motivo de la denuncia reside en la visita este pasado domingo de Zelenski a una fábrica que produce municiones para las Fuerzas Armadas ucranianas en Pensilvania (Estados Unidos), acompañado del gobernador de ese estado, el demócrata Josh Shapiro.
En una misiva dirigida al propio Zelenski, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, lo acusó de haber «abandonado» su objetivo de no intervenir en la campaña estadounidense con esta visita.
«El recorrido fue claramente un evento de campaña partidista diseñado para ayudar a los demócratas y es evidentemente una interferencia electoral», aseguró Johnson, que pidió al líder ucraniano que cese a su embajadora en Estados Unidos por haber organizado la visita.
«La fábrica estaba en un estado disputado políticamente, liderado por una importante figura política que actúa como portavoz de Kamala Harris (Shapiro), y no incluyó a ningún republicano porque, a propósito, no se invitó a republicanos», añadió Johnson.
El líder republicano envió la carta en la víspera de que Zelenski visite, este jueves, la Casa Blanca y el Congreso.
Además de la misiva, el presidente del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, James Comer, anunció la apertura de una investigación por el uso de fondos públicos en ese viaje.
«El Gobierno de Joe Biden y Kamala Harris transportó (a Zelenski) en un vuelo financiado por los contribuyentes estadounidenses a Pensilvania, un estado clave para la campaña de Harris», aseguró en un comunicado.
Comer coincidió con su jefe con que el motivo del viaje de Zelenski a Pensilvania fue «hacer campaña a favor de la vicepresidenta, Kamala Harris, de cara a las elecciones presidenciales de 2024».
«Si la Administración de Biden-Harris intentó usar a un líder extranjero para beneficiar la campaña de la vicepresidenta, esto constituye un abuso de poder y mal uso de los fondos de los contribuyentes», añadió.
Mientras los demócratas han mostrado su intención de mantener el apoyo financiero y militar a Kiev en su guerra contra Rusia, un importante número de republicanos cuestiona que Washington deba seguir sosteniendo económicamente a Ucrania.
