14.1 C
Hidalgo
domingo, julio 27, 2025

La pasarela de la Comic-Con de San Diego

Más Leídas

Desde los míticos personajes de los universos de Marvel y DC, pasando por los villanos más queridos y el apoyo a la comunidad mexicana en EE.UU., la ciudad californiana de San Diego se ha transformado en una pasarela de libre expresión para los miles de asistentes que visitan la Comic-Con, la feria más importante del mundo sobre la cultura del cómic.

Enfundado en el traje del superhéroe mexicano El Chapulín Colorado, Abel y su hija, encarnada en La Chilindrina, aguardan en las puertas del Centro de Convenciones de la Comic-Con de San Diego para, un año más, ser los primeros en enterarse de las novedades de sus películas y series favoritas.

«Venimos todos los años vestidos así para representar a México», dice Abel a EFE mientras muestra una tira con la bandera mexicana donde tiene colgada su acreditación para disfrutar de este macroevento, que comenzó el jueves y termina mañana.

Padre e hija suelen tener un tercer acompañante, su otro hijo, quien se viste de El Chavo del 8, aunque este año no ha podido asistir.

Unos metros más adelante, Emily pasea con un vestido rosa confeccionado por ella misma con el que se transforma en Glinda, la princesa del mundo de Oz interpretada por Ariana Grande en la gran pantalla en el musical ‘Wicked’.

«Me ha llevado unas dos semanas hacer todo este traje».

 En el vaivén de los centenares de miles de seguidores que pasean de un recinto a otro, los guiños a Marvel son evidentes. A pesar de su ausencia este año en la popular Sala H, la más grande del evento en la que las grandes franquicias aprovechan para anunciar sus novedades estelares, los asistentes no se olvidan de los personajes que saltaron del cómic a la pantalla.

Con el reciente estreno de ‘The Fanstastic Four’, los trajes de la primera familia de superhéroes, así como las capas y las camisetas en honor a Superman, la armadura de Capitán América o de Wonder Woman predominan en el ambiente.

Aunque también hay cabida para los disfraces en grupo con los personajes de Toy Story, o quienes desafían las altas temperaturas de San Diego, limítrofe con el norte de México, vestidos en trajes inflables de conejo o dinosaurio.

Varios Sombrero Loco, Jokers con su sonrisa de villano, brujas de Blancanieves o la señorita Roz, la administradora de cuentas de la fábrica de Monstruos S.A., se abren paso entre la multitud.

Hacer todo este traje «me ha llevado más tiempo del que me imaginé», dijo a EFE la mujer bajo el original disfraz de Roz. Caminando igual que el personaje, presume del nivel de detalle del disfraz mostrando los blanquecinos dientes que ha logrado recrear. Todo hecho a mano.

Las marcas se alían con los cómics

No hace falta estar dentro del Centro de Convenciones para disfrutar de la Comic-Con.

Fuera, las actividades se extienden por el histórico barrio Gaslamp Quarter hasta bien entrada la noche, con concursos, experiencias inmersivas, menúes personalizados o fiestas de karaoke.

La Quinta Avenida, la calle principal de este animado barrio, exhibe en las fachadas de los edificios las series y películas estrellas de los estudios, como ‘The Walking Dead’, ‘Gen V’ o ‘Alien Earth’.

Pero también los vagones de los tranvías que discurren por esta calle promocionan las series del momento, amenizando la espera de los que cruzan de esta avenida para allegarse al Centro de Convenciones, y viceversa.

Algunas marcas aprovechan la enorme exposición que ofrece la convención sobre la cultura del cómic más grande del mundo para publicitar sus productos, alineándose con conocidos personajes.

«Huele como un superhéroe», da la bienvenida el puesto de la marca de higiene masculina Old Spice mientras sumerge a los interesados en una cápsula perfumada con forma de cohete y el logotipo de Superman.

Autor