Jordi Fernández, entrenador de los Brooklyn Nets, llevó este miércoles a una escuela de Nueva York la fiesta de Sant Jordi.
Public School 01, The Bergen School en Brooklyn fue el lugar al que acudió el técnico español para «enseñar a los niños los orígenes de la festividad y su significado dentro de la cultura catalana», dijeron los Nets en un comunicado.
Fernández fue con su esposa Kelsey y sus dos hijos, leyó a los alumnos y también les explicó la tradición de regalar rosas y libros de Sant Jordi.
El técnico de Badalona debutó esta temporada al frente de los Nets y se convirtió en el primer entrenador nacido en España en tomar las riendas de una franquicia de la NBA.
Desembarcó en unos Nets en un profundo proceso de reconstrucción y que terminaron duodécimos en el Este con un balance de 26-56 fuera del ‘playoff’.
Pero el catalán, pese a tener recursos muy limitados y a que a la franquicia le ‘convenía’ perder para subir en el draft, brilló en su primer año en un banquillo de la NBA, fue capaz de establecer un espíritu competitivo y muy luchador en su conjunto y también contribuyó decisivamente al desarrollo de los jóvenes talentos de la plantilla.