Brasil celebró este jueves con entusiasmo las tres nominaciones de ‘I’m Still Here’ a los Óscar, incluido al de mejor película, la primera vez en la historia que un largometraje de este país compite en la categoría principal.
Políticos, artistas y prensa se lanzaron a aplaudir la producción, que también cosechó nominaciones a mejor película internacional y a mejor actriz para Fernanda Torres, y que cuenta la lucha de la activista Eunice Paiva para saber la verdad sobre el desaparecimiento de su esposo durante la dictadura militar de Brasil (1964-1985).
«¡Viva el cine brasileño!», escribió en redes sociales la Academia Brasileña de Cine, la institución que escogió este largometraje dirigido por Walter Salles para representar al país en los premios, que se otorgarán el 2 de marzo.
El cineasta Kleber Mendonça Filho, uno de los grandes nombres del séptimo arte en Brasil junto al de Salles, calificó el anuncio de «sensacional» y celebró que el mundo vea «historias brasileñas» en la pantalla.
El presidente del país, Luiz Inácio Lula da Silva, por su parte, expresó su «orgullo» por las nominaciones, especialmente la de mejor película.
Aunque muchos daban por hecho que ‘I’m Still Here’ competiría por mejor filme extranjero, su inclusión entre las contendientes para la categoría principal agarró por sorpresa al país.