Grupos que demandaron al Departamento de Seguridad Nacional por el uso excesivo de fuerza en Chicago contra manifestantes y periodistas en la operación migratoria ‘Midway Blitz’ se declararon el martes vencedores contra la Administración de Donald Trump.
La demanda federal fue desestimada voluntariamente, «porque las fuerzas del polémico comandante Gregory Bovino abandonaron la región», informaron en un comunicado los abogados encargados del pleito.
«Ganamos nuestro caso el día que se fueron de la ciudad», declaró David B. Owens, profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad de Washington y director de la Clínica de Derechos Civiles y Justicia.
«Los habitantes de Chicago se enfrentaron a la intimidación y el acoso de la Administración Trump, y les demostraron que se estaban metiendo con la ciudad equivocada», agregó Owens.
«Aceptamos la victoria», dijo por su parte en un comunicado el demandante Chicago Headline Club (CHC), porque se logró «una gran victoria para la libertad de prensa».
«Dado que el ICE y la Patrulla Fronteriza han reducido su presencia por ahora, no vemos la necesidad de continuar la batalla judicial», agregó el colectivo.
La violenta represión de manifestantes con gas lacrimógeno y bombas químicas durante las manifestaciones realizadas en un centro del ICE en Broadview, cerca de Chicago, motivó el 06 de noviembre la demanda y la intervención de una jueza de distrito, que restringió el uso de la fuerza por parte de las tropas federales.
En un dictamen de 233 páginas, la jueza Sara Ellis documentó docenas de incidentes de brutalidad injustificada.


