El Lille selló su clasificación directa para los octavos de final de la Liga de Campeones tras firmar una gran goleada frente al Feyenoord (6-1), que sucumbió ante las ganas del conjunto francés con un toque de mala suerte tras marcarse dos goles en propia meta y otro de rebote.
Antes del pitido inicial, ambos equipos tenían opciones de conseguir entrar entre los ocho mejores. No era ninguna locura, pero tenían que ganar y esperar algunos otros resultados. Tanto franceses como neerlandeses, tenían trece puntos, los mismos que el Leverkusen, octavo y dos posiciones por debajo.
El claroscuro de “Santi” Giménez
El mexicano marcó por tercera ocasión consecutiva en Champions, pero debió abandonar el terreno de juego debido a una lesión y, por ello, no pudo hacer nada para evitar la goleada de su equipo, que ahora jugará el repechaje de la competición.