Un juez de la Corte Suprema de Brasil anuló este lunes un caso de financiación electoral irregular que afectó al actual vicepresidente del país, Geraldo Alckmin, durante su etapa como gobernador del estado de São Paulo.
El magistrado José Antonio Dias Toffoli constató que las pruebas utilizadas en dicha causa civil «ya habían sido declaradas como nulas» por el Supremo, que es la máxima instancia judicial del país.
El proceso, impulsado por el Ministerio Público de São Paulo, investigaba la supuesta financiación irregular por parte del grupo Odebrecht -hoy Novonor- para la campaña electoral de 2014, año en el que Alckmin fue reelegido gobernador de São Paulo.
La acusación defendía que la campaña de Alckmin recibió, a través de un intermediario, 8,3 millones de reales (1,5 millones de dólares / 1,3 millones de euros al cambio de hoy) que no declaró a las autoridades electorales.
Para Dias Toffoli, «no hay pruebas que justifiquen la continuidad del caso» en la 13ª Corte Civil de la Justicia de São Paulo.
«Las pruebas del caso se obtuvieron a partir de material de Odebrecht que ya había sido invalidado por el Supremo y que sirvió de base para una causa penal sobre los mismos hechos que había sido archivada por orden de la Corte», indicó el juez, uno de los once que integran el plenario del tribunal.
De esta forma, Dias Toffoli, quien ya ha anulado diversas piezas judiciales que afectaban a otros investigados por corrupción, «ordenó el sobreseimiento de la acción de improbidad administrativa contra todos los demandados, incluido Alckmin».
Alckmin, un político conservador que ayudó a fundar el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), fue un histórico adversario del actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva, con el que, sin embargo, decidió aliarse en las elecciones de 2022 para derrotar al líder ultraderechista Jair Bolsonaro.
Médico de profesión y en el mundo de la política desde la década de los 70, Alckmin, además de ser el vicepresidente del país, es también el actual ministro de Industria y Comercio.
