El capo mexicano Ismael ‘El Mayo’ Zambada, que se declaró culpable de dos cargos de narcotráfico, lavado de dinero y uso de armas en un tribunal de Nueva York, pidió que cese la violencia en Sinaloa.
«Mi cliente hace un pedido a la población de Sinaloa para que mantenga la calma, actúe con moderación y evite la violencia», afirmó el abogado de Zambada, Frank Pérez, en un comunicado difundido a la conclusión de la audiencia donde el cofundador del Cártel de Sinaloa aceptó su culpabilidad.
Tras la entrega de El Mayo a las autoridades estadounidenses en julio del año pasado, se desató una guerra a sangre y fuego en su estado natal, Sinaloa.
Los enfrentamientos los protagonizan la facción de los Mayitos -liderada por su hijo Ismael Zambada Sicairos, conocido como Mayito Flaco- y la de los Chapitos -comandada por Iván Archivaldo Guzmán y Jesús Alfredo Guzmán, vástagos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán-.
El Mayo, en palabras de su abogado, considera que «su comunidad» debe «mirar hacia la paz y la estabilidad para el futuro del estado» de Sinaloa.
«El derramamiento de sangre no sirve para nada, solo profundiza las heridas y prolonga el sufrimiento», según Zambada.
El cerebro del Cártel de Sinaloa quedó detenido en julio del año pasado tras aterrizar en el aeropuerto de Santa Teresa (Nuevo México, EE.UU.) en una avioneta junto a Joaquín Guzmán López, uno de los hijos de El Chapo, quien, según El Mayo, le tendió una trampa para llevarlo a Estados Unidos y entregarlo a las autoridades.
Zambada, que fue mano derecha de El Chapo desde 1989, permanece bajo custodia en Nueva York.