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Hidalgo
domingo, julio 27, 2025

Consumismo

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Memento

“Si vivimos apresuradamente, 

déjanos morir jóvenes”

Run – BTS

Consumismo se forma a partir del verbo consumir y el sufijo -ismo. Consumir proviene del latín consumere, que significa: gastar enteramente, agotar, destruir. Es decir, consumir literalmente significaba tomarlo todo o gastar completamente. 

Por otra parte, ismo, del latín ismus, es un sufijo que indica doctrina, sistema, movimiento o tendencia, y suele implicar una ideología o comportamiento reiterado.

Consumismo significa la tendencia o sistema relacionado con consumir en exceso o de manera constante. En la modernidad tomó una carga ideológica y crítica que describe una actitud o modelo social basado en el consumo compulsivo de bienes y servicios, más allá de las necesidades básicas.

Existe un chiste noventero que habla sobre un eslogan:

  • ¡Este año será el año del consumismo!
  • ¡Sí, con su misma casa, con su mismo auto, con su misma ropa!

Y es que la frase hacía alusión a aquella idea que teníamos, donde comprar más y poseer más significaba tener un nivel de vida mayor. Sin embargo, la situación del país no era nada buena y, por el contrario, la crisis cada vez mayor nos obligaba a disminuir nuestras adquisiciones.

Algunas personas, que vivimos en esa época, aprendimos a administrarnos para las futuras situaciones que pudiéramos enfrentar. Algunas otras, pensamos que tenemos que acabar con lo que podamos como si no hubiera un mañana.

Debido a esa misma situación, hemos aprendido a consumir todo aquello a nuestro alcance, en ocasiones ya sin disfrutarlo. Como si se tratase de un bote de palomitas en el cine: solamente tragamos y digerimos sin degustar, embelesados por la trama. Y en ocasiones, ni en la peli: lo hacemos durante los cortos, y para el inicio ya nos quedamos sin botana.

Y hablando de consumir: vi Superman… y aún me duele la panza del coraje. Desde Superman IV: La búsqueda de la paz, en la que hicieron pedazos a la versión de Christopher Reeve, no había una versión tan deplorable -y eso que vi Superman Returns-.

¿Qué tiene que ver el consumismo con Superman? Quizá no mucho, pero para su “servilleta” significa un mal producto -cinematográficamente hablando- hecho para un sector de la población que está acostumbrado a la sobreestimulación de imágenes, en gran parte ocasionada por la dependencia generada hacia TikTok y los videos cortos.

Una gran mezcla de videos de TikTok, eso parece esta versión de la historia de Kal-El: un tipo treintañero que hace berrinches por una entrevista de su novia, Lois Lane, quien ya no es la periodista a la que nos tenían acostumbrados. Por el contrario, parece pertenecer a esta nueva generación de “reporteros de celular”. Una serie de mini historias con imágenes estimulantes pero carentes de sentido e hilo conductor. Ha dejado de importar contar una historia, porque el mercado ya está acostumbrado a ver una microhistoria y deslizar hacia otra sin digerir el mensaje de lo que hemos visto. Esta película la resumo en una frase: “Es comer malos tacos con una mala salsa”

¿Para esto se deshicieron de mi precioso Henry Cavill? Y no es solo culpa de Hollywood -mentira, sí es culpa de ellos-, pero también de quienes consumimos y elogiamos ese tipo de cine. Y de esta sociedad sobreestimulada que consume de todo.

La conseja de hoy:

Todo es malo en exceso, y el consumismo trata de eso, de acabar con todo lo que esté a nuestro alcance, como estar en un buffet y querer acabar con toda la comida, aunque terminemos sobresaturados. Como diría mi Awe:

“Coman para no tener hambre, no para empacharse. Hay que ser puercos, pero no trompudos.”

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