EL PEQUEÑO TIMMY
Nuevamente pediremos una disculpa por adelantada al reino animal, en especial a los insectos denominados “zánganos”, a los mamíferos de cola retorcida “los cuinos” y a todas aquellas especies, criaturas y alimañas que se sientan ofendidas cada vez que algún político hidalguense es comparado con ellos.
Pero es que en verdad, cuando uno cree que ya no hay más, surgen de los cerebros más brillantes y caros del mundo, la estupidez humana en todo su esplendor, diría la maestra Guadalupe Orona de la Antorcha Campesina “esos cerebros son los más valiosos porque están nuevos, nunca han sido usados”, así pasa con algunos perfiles de la polaca hidalguense.
Desde su rincón, Alejandro Canek Vázquez Góngora, delegado en Hidalgo del Infonavit, ha aplaudido con tremendo ahínco la iniciativa que pretende ingresar el diputado federal del PAN (el mismo que se robó una curul indígena y que hasta el momento no ha propuesto ni una sola iniciativa para ese sector de la población) Asael Hernández Cerón, ya que pretende proponer que la pensión alimentaria sea de 3 mil pesos para todas esas personas “que no puedan comprobar ingresos” y con las que busca “que no vayan a prisión”.
Vázquez Góngora, el expriísta, lo aplaude porque ocupó el cargo en el Infonavit en medio de tremendo escándalo por ser un deudor alimentario a pesar de haber estado siempre viviendo del erario público y percibiendo mega sueldazos. Y ni cómo olvidar la vez que en redes sociales la presunta hija de Asael Hernández se la hizo de jamón porque el diputado andaba presumiendo su mega boda en la Riviera Maya (con arroz y mole porque el marisco estaba caro), mientras no había cumplido con sus deberes de padre “abandonador y negligente”.
De verdad que da pena ajena que, el diputado federal que llegó a ocupar una curul por hacerse pasar por indígena, creyera que era buena idea proponer que con 3 mil pesos mensuales se puede mantener a un hijo, y que encima de eso desconozca o marranamente proponga algo que a leguas se ve que es anticonstitucional.
Sin embargo, tampoco se puede esperar mucho del perfil emanado de un partido conservador que se opone al aborto pero tampoco crea condiciones para que en las escuelas se fortalezca la educación sexual y una vez hecho el hijo propone que los padres puedan abandonar a las criaturas con 3 mil pesos al mes, ahora sí como la Bartola, “pagas la renta, la escuela, el internet, la ropa, los zapatos, los útiles y materiales paras las tareas, el desayuno, la comida, la cena, las medicinas cuando se enfermen, el teléfono y la luz…”.
El problema no es sólo la propuesta, sino la gran cantidad de funcionarios públicos que viven en la doble moral, que están amarraditos de “aquellos” para seguir proporcionando su mensualidad, y que de no hacerlo seguramente el escándalo podría acabar con sus carreras de buenos para nada, vividores, chupadores del erario público, perfiles que seguramente en lo oscurito felicitan al panista y esperan que una iniciativa así los beneficie en algún momento.
Cabe destacar que tantas acciones afirmativas en el Congreso Local y Federal, así como en la vida política, sólo obedecen a la negligencia y falsa democracia que se ha vivido en México, en dónde los que están en una curul se dedican a defender temas de interés propio por encima del interés público, por eso no es raro que el diputado Asael esté preocupado por defender a capa y espada a los deudores alimentarios y tan olvidado de los pueblos indígenas, a quienes les arrebató la posibilidad de tener un diputado federal que estuviera velando por los intereses del pueblo indígena y no por ver de qué forma se escabulle de las pensiones alimentarias. No cabe duda que además de zánganos, algunos diputados se destapan como encubridores.