La selección brasileña femenina de balonmano se despidió del sueño de las medallas tras caer este martes por un contundente 32-15 ante Dinamarca en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de París.
Un encuentro el que el conjunto sudamericano nunca pudo oponer la más mínima resistencia al equipo noruego, como reflejó el claro 10-4 que figuraba en el marcador a favor de las europeas a los diecisiete minutos de la primera parte.
Resultado que convirtió el resto del encuentro en un mero trámite que sólo sirvió para que el seleccionador noruega dosificara los esfuerzos de sus jugadoras pensando ya en el duelo de semifinales el que las nórdicas se medirán con Dinamarca que este martes se impuso por 29-25 a Países Bajos.
