TEPEAPULCO. – Como una de las tradiciones más arraigadas en el municipio de Tepeapulco, principalmente en Ciudad Sahagún, cientos de feligreses llevan a cabo la procesión anual en honor a la Virgen de Guadalupe.
Esta procesión representa ya una tradición de 65 años, realizándose por las principales calles de Ciudad Sahagún, donde cientos de trabajadores de diversas industrias instaladas en la ciudad caminan con imágenes de la Virgen de Guadalupe para agradecer la creación de fuentes de empleo.
Cabe recordar que esta procesión anual comenzó en 1959, cuando los trabajadores de la empresa Diesel Nacional (DINA) realizaron las primeras peregrinaciones en honor a la Virgen de Guadalupe. Hoy en día, se unen diferentes empresas del municipio, además de comerciantes y familias que acompañan el recorrido por las calles de esta ciudad industrial.
Los organizadores de la procesión católica, en la que en esta ocasión se unieron alrededor de 130 imágenes, las cuales caminaron en carros alegóricos acompañadas de músicos de diversos géneros, destacan la importancia de este evento.
A pesar de los fuertes vientos y las temperaturas que oscilaron entre los 10 grados centígrados antes del inicio de la procesión, que reunió más de 130 imágenes de la Virgen de Guadalupe, muchas de ellas ubicadas en el interior de diversos talleres de las empresas, la población, como cada año, se unió para llevar a cabo este ya tradicional desfile anual.
Al dar inicio a esta procesión, que recorrió las calles de Ciudad Sahagún con al menos 130 imágenes de la Virgen de Guadalupe, los diferentes contingentes recordaron el origen de estas festividades, que comenzaron como un agradecimiento por la fuente de empleo que, con el tiempo, ha generado el sustento de cientos de familias, no solo del municipio, sino también de diversas regiones del estado y de estados circunvecinos, quienes durante seis décadas han encontrado trabajo en esta ciudad.
Este desfile, conmemorativo de la aparición de la Virgen de Guadalupe, recorre año con año las principales calles de Ciudad Sahagún, uniendo a cientos de trabajadores, obreros, empleados y sus familias para celebrar uno de los festejos más destacados de este municipio.
Esta es una de las tradiciones más arraigadas de la cultura popular mexicana, celebrada incluso por católicos y no católicos, ya que su imagen va más allá de un símbolo religioso. Con el paso de los años, se ha transformado en un símbolo nacional, un estandarte que nos convoca a la unidad y que se ha introducido profundamente en la historia y cultura de México.