La entrada del grupo Velocity Sport Limited (VSL), de matriz inglesa y participado por accionistas norteamericanos, en Rastar, de capital chino y máximo accionista del RCD Espanyol, consolida el último ‘holding’ estratégico hasta ahora de la Liga española, una competición que cuenta con inversiones de EEUU, México, Argentina, Israel, México, o Singapur en primera división y que despierta idéntico interés de fondos extranjeros en la Liga Hypermotion.
Sólo el Real Madrid, FC Barcelona, Athletic Club y CA Osasuna no son Sociedad Anónima Deportiva (SAD) y continúan bajo la propiedad de sus socios.
Sin embargo, grupos empresariales foráneos tratan de consolidarse con proyectos que, en ocasiones, se convierten en multipropiedades con presencia en el accionariado de equipos de otras ligas y países. El último en incorporarse a esta fórmula ha sido el Espanyol. A falta de un traspaso oficial debido a la falta de algunos detalles administrativos, el empresario Alan Pace ha liderado la integración en el Espanyol de Velocity Sport Limited, que ya contaba con el Burnley FC inglés en su cartera.
El Girona tiene en su accionista mayoritario, con un 47% , al City Group, un grupo empresarial que también posee la propiedad de clubes como el Manchester City, el New York City, el Melbourne City, el Yokohama Marinos o el Montevideo City, desde el 23 de agosto de 2017.
El empresario boliviano-estadounidense Marcelo Claure adquirió el 35% de las acciones en agosto de 2020, mientras que, Pere Guardiola, hermano del actual entrenador del Manchester City, Pep Guardiola, es el presidente del Consejo de Administración y posee un 16% de las acciones del club.
La relación del Girona con el Manchester City tuvo que enfriarse el último curso por la coincidencia en la Liga de Campeones debido a las regulaciones de la UEFA, pero el club catalán confía que esta temporada ya podrá volver a contar con jugadores cedidos del club inglés y a beneficiarse de una red con más de diez clubes de todo el mundo. Por ejemplo, el patrocinador principal del equipo es, desde esta temporada, Etihad Airways, como en el caso del City.
El tercer ascendido y último en llegar a Primera, el Real Oviedo, pertenece en la actualidad al Grupo Pachuca, un conglomerado mexicano que también está al mando de los Tuzos de Pachucay y el Club León, en México, y del Everton de Viña del Mar, en Chile. Pachuca aterrizó en la capital del Principado en julio de 2022, cuando el grupo que preside Jesús Martínez compró más de la mitad de las acciones del Grupo Carso del empresario mexicano Carlos Slim, máximo accionista de la entidad carbayona desde 2012.
De esta forma, y tras varias ampliaciones de capital realizadas a lo largo de estos años, el Grupo Pachuca cuenta actualmente con el 60% de las acciones del Real Oviedo, mientras que el Grupo Carso mantiene un 15% y el resto se reparte entre accionistas minoritarios.
En la Comunidad Valenciana, el Valencia CF, es desde 2014 propiedad de la empresa Meriton Holdings, bajo el mando del empresario singapurense Peter Lim, quien se hizo con la mayoría accionarial tras un complejo y cuestionado proceso de compra en el que acabó por adjudicarle el paquete accionarial de la Fundació VCF, que era del 70,06% del total, por 94 millones, más otros seis para la citada fundación.
Desde entonces, diversas operaciones financieras han llevado a Lim a hacerse con cerca del 92% del accionariado del club y, por primera vez, el pasado mes de diciembre, la entonces presidenta Layhoon Chan aseguró que, si llegara una oferta atractiva, Lim la estudiaría, aunque señaló que no tenía ninguna prisa por vender. En abril situó a su hijo Kiat Lim como presidente del consejo de administración. El paso de los años y los malos resultados deportivos y económicos han aumentado de manera notable la oposición social a la gestión de Lim, con multitudinarias manifestaciones en su contra e incluso varios ‘vaciados’ del estadio de Mestalla.
El Villarreal, otro de los equipos que se han convertido en uno de los clásicos del fútbol español en los últimos años, se sitúa en una estabilidad accionarial desde 1997, año en el que el empresario valenciano Fernando Roig compró la mayoría accionarial del club, cuando estaba en primera división. En estos casi treinta años y a través de sus éxitos deportivos, el cuadro castellonense ha conseguido mantener un modelo económico estable, con la novedad de la inclusión de Fernando Roig Negueroles, uno de los hijos de Roig, que también participa en la dirección del club.
Uno de los recién ascendidos, el Elche CF, es propiedad del empresario argentino Christian Bragarnik, quien compró la entidad al expresidente José Sepulcre, en diciembre de 2019, tras hacerse con el 70% de los valores por un desembolso cercano a los 20 millones de euros. Desde entonces, este propietario y agente futbolístico ha ido aumentando la mayoría accionarial, próxima ya al 99%, al igual que su implicación en el equipo.
En el Levante UD, actual consejero delegado, Pepe Danvila, es el accionista de referencia en la entidad, propietario de, aproximadamente, un 38% de ellas. Danvila, que asumió la dirección en septiembre de 2023, ante la falta de liquidez del club, ha invertido desde entonces 31 millones de euros en el equipo, siendo, además, el tercer gran acreedor del club, ya que el Levante le adeuda unos 17 millones de euros a su sociedad, Bizas Capital. La Fundación del Levante, integrada por distintos patronos y en la que están representados los peñistas y los veteranos, entre otros, aglutina poco más del 30% de los títulos, dejando el resto de participación en manos de pequeños accionistas.