ESPEJOS DE LA REALIDAD
(NOTA DEL EDITOR: A partir de hoy, y todos los miércoles, Mariana se incorpora a nuestro equipo de colaboradores. Es graduada en Ciencias Políticas y Administración Pública por la UAEH, con experiencia en análisis político y defensa de los derechos humanos. Se desempeña como analista política enfocada a la investigación, y elaboración de recomendaciones para el cambio social. Sea bienvenida a esta, su casa)
Pareciera que la frase “qué calor hace”, es la nueva manera para saludarnos.
Y es que es cierto: durante esta segunda ola de calor se han registrado temperaturas mayores a los 30 grados en el país, y en el estado de Hidalgo, en la Huasteca Hidalguense, han llegado hasta los 45 grados con sensación térmica de 48.
Platicando con mi tía Martha, ella me decía que antes, cuando ella era adolescente, sí hacía calor, pero en sus palabras: “nada que ver que con los calores de ahora; ahora sientes que no puedes ni respirar”.
Las extensiones de edificios, calles y avenidas, conocidas coloquialmente como «junglas de concreto», son el testimonio tangible de nuestro crecimiento urbano desenfrenado.
A inicios del 2023, se registraron en Pachuca de Soto, 400 fraccionamientos, de los cuales solo 40 estaban debidamente recepcionados en el municipio.
Tomemos en cuenta La Bella Airosa, que cuenta con pocas áreas verdes. Dentro de las más conocidas están: Bioparque de Convivencia Pachuca, Jardín de los Niños Héroes, Jardín del Maestro, Parque David Ben Gurión, Parque de la Familia, Parque ecológico Cubitos y Parque Hidalgo (sin tomar en cuenta la Zona de Preservación Ecológica Cerro del Lobo).
Parece inverosímil que en una ciudad como Pachuca de Soto, donde la falta de áreas verdes es evidente, las autoridades municipales no hayan tomado medidas más contundentes para enfrentar este problema creciente. La escasez de parques y zonas naturales en una ciudad densamente poblada como ésta, no solo afecta el bienestar de sus habitantes, sino que también contribuye al aumento de las temperaturas y la contaminación atmosférica.
De acuerdo al estudio titulado The Role of Urban Trees in Reducing Land Surface Temperatures in European Cities, publicado en la revista Nature, los árboles tienen la capacidad de regular el clima, creando espacios de 2 a 4 veces más frescos, que aquellos que no tienen árboles. Y es que, la reforestación, es una de las estrategias más útiles para no solo generar espacios frescos, sino aumentar la biodiversidad, reducir la erosión del suelo y mejorar la calidad del agua. Es decir, la plantación de árboles en áreas urbanas, no solo podría ayudar a reducir el calor sofocante que experimentamos durante los meses de verano, sino que también tendría beneficios adicionales para el medio ambiente y la calidad de vida de los ciudadanos.
Los espacios verdes urbanos, como parques, jardines y áreas naturales protegidas, son necesarios, no solo porque proporcionan hábitats vitales, sino que también ofrecen a las personas la oportunidad de conectarse con la naturaleza y disfrutar de sus beneficios para la salud mental y física.
Estos espacios pueden actuar como pulmones verdes en medio de un entorno urbano contaminado, ayudando a purificar el aire y reducir los niveles de ruido. La falta de áreas verdes en ciudades hidalguenses es un problema urgente que requiere atención y acción inmediatas por parte de las autoridades municipales y la comunidad en general.
La inversión en la creación y mantenimiento de espacios verdes no solo mejorará la calidad de vida de los ciudadanos, sino que también contribuirá a hacer frente al cambio climático y promover un desarrollo urbano más sostenible.
Nos leemos el próximo miércoles.
Correo: Marperzam60@gmail.com
IG: marperzam
X: marperzam