En el podio de los hombres más ricos del mundo, considerado el inversor más reputado de Wall Street, un ya anciano Warren Buffett pintó ayer una imagen brillante y próspera de la economía estadounidense. El presidente de Berkshire Hathaway aprovechó su carta anual a los accionistas para defender el papel que los inmigrantes han tenido en el “milagroso” desarrollo de EU. La misiva es una crítica a la mano dura de la nueva Casa Blanca contra la inmigración.

“Una palabra resume los logros de nuestro país: milagroso. Desde hace 240 años, un periodo que suma tres veces mis días en la tierra, los americanos han combinado el ingenio humano, el sistema de mercado, una marea de inmigrantes talentosos y ambiciosos, y el imperio de la ley para conseguir una abundancia que está más allá de cualquier sueño de nuestros antepasados”, dijo su misiva.”No necesitas ser economista para ver lo bien que ha funcionado nuestro sistema”, insistió.

Buffett fue muy crítico con la candidatura de Donald Trump y apoyó de forma entusiasta a Hillary Clinton. En uno de los mítines de la demócrata, llegó a atacar con dureza al magnate neoyorquino, retándole a publicar su declaración de la renta -cosa que hacen los candidatos, pero que Trump ha evitado- y afeándole su rifirrafe con la familia de un soldado estadounidense. “¿No tiene usted sentido de la decencia?”, preguntó Buffett, citando la famosa frase del abogado Joe Welch al senador Joseph McCarthy en una audiencia de la caza de brujas, hace medio siglo.