A LOS TAXISTAS LES HA IDO COMO EN FERIA
Tantito, porque les han echado la sal los del Tuzobus y ellos mismos se han echado la soga al cuello, porque con la situación en la que se viven, para sacar para el chivo tienen que andar manejando como locos, buscando clientes que luego se los ganan entre ellos, pero hay otros, que se levantan con el pie izquierdo, no les echa la bendición su greñuda vieja, por eso les va mal.
Esta vez, solitos se dieron en toda la madre, en el Boulevard Luis Donaldo Colosio, de Pachuca (tierra de baches y basura) uno de ellos se pasó la luz roja y ocasionó un brutal madrazo, entre otros dos de sus compañeros, las unidades de alquiler resultaron con grandes daños, al mismo tiempo que tres de los pasajeros quedaron lesionados, fueron canalizados en un hospital para ser valorados, el accidente de tránsito fue la mañana del lunes, a la altura de la plaza del Valle.
Un verdadero desmadre se armo en segundos, con los tres taxis metropolitanos que quedaron desmadrados por el choque, los conductores se desconocieron y estaban que se lo llevaba la grosería, y por un pelito se sueltan los madrazos, pensaban y se dijeron entre ambos“con que mamada le vamos a salir al dueño del coche.
Pero lo más perrón eran las lesiones de sus pasajeros, dijeron a los peritos de tránsito, que uno de sus colegas se pasó el alto y no le dio tiempo de frenar, se los llevó de corbata, los uniformados municipales de la policía de tránsito anotaron que los tres estaban involucrados, un Nissan Tsuru, placas de circulación 30-07 FUE, otro 16-87- FUE y el tercero 13- 30 FUE
Los tres son de color verde, con unas letras grandes que dicen Metropolitano, eran manejados por Juan Guillermo de 18 años, Bonifacio de 51 y Esteban de 48, minutos más tarde llegaron las aseguradoras de los taxis, para iniciar los trámites y reportar en la agencia los daños, para concretar los convenios entre los concesionarios.
Pero todo quedó en que se echan la culpa y no saben quién de los tres se pasó el alto, dijeron los peritos en el informe que las placas traen el número y letras que dicen FUE, pero no dicen quien.
Se espera que en la Secretaría de Movilidad y Trasporte de Hidalgo, no se hagan patos y determinen el castigo para los involucrados, así lo dijeron las autoridades, los policías, les preguntaron ¿quién se pasó el alto? y solo se los quedaron mirando, sumiendo el cuello entre los hombros como diciendo “no sé”.
SE AVENTARON UNA BOLA DE MADRAZOS
Andaban mucho pero mucho muy borrachos, no le tenían miedo ni al diablo y se dieron hasta debajo de la lengua, eran dos jóvenes, los que se peleaban a una lucha de muerte, la brutal golpiza fue en el centro Histórico de Pachuca (tierra de baches y basura).
La gente en lugar de despertarlos estaba muy contenta, viéndolos como se rajaban toda la madre y los animaban, para que siguieran hasta el último momento, los dos estaban ensangrentados, desfigurados de la cara con el hocico sangrando, pero ninguno de los dos se daba.
Los que metieron su cuchara, fueron los gendarmes municipales, la gente les decía que no se metieran en lo que no les importa, porque es pleito de hombres, además ellos no tenían velan en el entierro.
Todo esto sucedió en la noche del viernes, en la plaza constitución de esta capital.
Según dijeron en su informe los gendarmes que acudieron a interrumpir una pelea callejera, que los que se estaban dando con la cubeta era dos jóvenes, entre los 18 y 22 años de edad, que estaban desfigurados de la cara, parecían al Monstruo de la laguna Negra, recargados en las jardineras.
Los uniformados los entrevistaron, estaban súper borrachos, les echaron la bronca, de lo enojados que estaban se les trababa la lengua, no pudieron decir como se llamaban y de los madrazos que se habían dado los dos estaban apunta de desmayarse.
Los testigos dijeron que comenzaron a insultar y se dieron de cabezazos, patadas, cachetadas, trompones, se jalaron de las greñas, se cayeron, se pararon y no se daban, ni nadie trataba de meter paz, porque saben que podían sacar más.
Llamaron a unos de los parranderos que andaban con ellos, le contaron a la policía que todos estaba bien, de momento se mentaron la madre y comenzaron agredirse, hasta darse de cabezazos que les provoco que se abrieran la choya, de ahí para el Real nadie los podía separar, la policía entró a calmarlos pero también se llevaron lo suyo los tiraron y les dieron de patadas.
Los patrulleros avisaron por radio que mandaran a dos ambulancias, para que los llevarán por separado, porque si se encontraban se volvían a dar en la madre, llegó la Cruz Roja y protección Civil, pero se la pelaron porque los llevaron al mismo hospital, se tenían que aguantar porque nada más tenemos uno.
NOTAS CHIRRIS
PACHITO “EL CHE”
Pachito “El Che” era chaparrito con cuerpo de perro, su vieja estaba grandota y tenía un genio de poca madre, cuando estaba enojada el chaparrito salía volando de la madriza que le daba.
Sin que la señora lo supiera se metió a una escuela de karate, para estar preparado y aventarse un tiro con su vieja, cargaba una mochila, más grande que él, se veía bien vaciado vestido de karateca, parecía que había hecho su primera comunión.
En los entrenamientos, lo formaban con los niños, le decían el señor Patiño, el único que le guardaba el secreto era su compadre “El Grillo”y un día le preguntó; ¿cómo van esos entrenamientos? Pachito muy contento le contestó “A toda madre, he aprendido a dar la patada al cuajo, el golpe de la grulla, la que me sale muy bien es aventar la patada de mula, esa se la estoy guardando a tu comadre, en unas semanas más voy a estar como charrasca de zapatero, para rajarle el hocico a mi vieja” le dijo “El Grillo” -ten mucho cuidado porque mi comadre, de un chilacatazo te puede volar la cabeza- pasaron los días y un día que su vieja le gritó, Pachito se le puso al brinco ¡A mi no me grites porque van a volar pedazos de vieja! se puso en guardia, movió los dedos y estaba listo para soltar el primer madrazo, su vieja le dio una cachetada que lo mandó de nalgas, lo levantó de las greñas y dándole una patada en la cola lo echó para afuera de su casa.
“Pachito” se dio cuenta que para poder madrear a su vieja le faltaban 30 años más de entrenamiento, por eso fue a demandar a su vieja ante el Ministerio Público, la mandaron traer, la señora aceptó y le preguntó al Agente Social ¿cuál era su Pez? le contestó “pagarle los daños, o de lo contrario se quedaría 36 horas encerrada como castigo, por violar las reglas de Melchor Ocampo, no ha cumplido lo que le leyeron cuando se casaron”.
LE PEGO SU VIEJA
Rafael Hernández, de 48 años de edad, de oficio pintor, pinta con amor, demandó a su ex vieja, Esperanza Armenta, de 38 años, con quien vivió 20 años como el venado, hasta que la cachó con “El Sancho” y la mando de patitas a la calle, la señora, lo apuntó en la lista negra, ayer por la mañana, Rafael estaba muy quitado de la pena pensando en la inmortalidad del cangrejo, parado afuera del Mercado Primero de Mayo, por ahí pasó su ex esposa, quien a todo pulmón le mentó la madre y le dijo que era puñal.
Cuando Rafael le iba a contestar, recibió un golpe con la bolsa de mandado rompiéndole todo el hocico y fracturándole la nariz, dentro de la bolsa llevaba un ladrillo.
Del Madrazo vio chispitas y cayó de nalgas, cuando se levantó vio mucha gente que lo rodeaba, le dio pena y caminó limpiándose la sangre con su chamarra, iba caminando como viejito por la calle de Ocampo, a la altura de la cantina “El Campeón” y sintió otro Madrazo en la cabeza, que le sumió el sombrero hasta las orejas, y cayó al suelo.
La señora Esperanza le dio de patadas y le dijo; “si quieres más me avisas”, no se pudo levantar hasta que llegó la ambulancia de la Cruz Roja, se lo llevaron al Hospital General, para que lo atendieran de sus lesiones, le dijo al Ministerio Público que la que le pegó fue su vieja, que está enojada porque la corrió de su casa y pidió protección, porque dice que lo amenazó que si lo encuentra lo va a volver a madrear.
ALICIA EN EL PAÍS DE LAS QUESADILLAS
Alicia Contreras de 17 años de edad, estudiante muy católica, fue con sus amigas Mayra y Liliana Moral Camacho, a la iglesia de San Cayetano a una misa que se celebraba a la memoria del Papá. Cuando salían muy tristes se les aparecío “La Parca” y otras dos viejas, que las golpearon sin saber el motivo, tratando de esquivar los madrazos Alicia, les dijo que se calmaran, que no la golpearan porque estaba embarazada, que tenía dos meses de retraso.
A “La Parca” le valió madre, le dijo que esos cuentos eran chinos y que si estaba embarazada de una vez le iba a sacar al chamaco, le echo mas ganas a los madrazos, la tiró al suelo, le dio de patadas en la panza.
Alicia defendiendo su embarazo se levantó furiosa, se prensaron como cangrejos, jalándose de las greñas, “La Parca” fue más abusada, le puso un gancho en una de las chichurrias, Alicia la soltó y “La Parca” la volvió agarrar de los pelos, la tiro y de nuevo le dio de patadas, por el lugar pasaron unos amigos de Alicia, las separaron, “La Parca” les dijo de groserías y unas mentadotas de carretonero. Alicia se sintió mal y fue llevada al Seguro Social en estado delicado, levantó un acta en contra de “La Parca” y sus amigochas, que sin motivo se las sonaron y pide castigo para ellas, porque se siente mal y el chamaco se le quiere salir.
MACHETAZO A CABALLO DE ESPADAS
Ángel Campos Hurtado, elemento de la Policía Municipal de la Reforma, denunció el robo que le hicieron a su patrulla, que estaba estacionada en la calle de Venustiano Carranza, en el centro de la ciudad.
Dijo el policía, que entró al mercado Benito Juárez a ver qué encontraba para comer, porque lo habían mandado a una comisión con la panza de farol.
Cuando salieron los ladrones, le habían robado un radio de Banda civil, marca Motorota, que se les facilitó el robo a los ladrones, porque a la patrulla, le falta el vidrio del lado del chofer y lo había reportado a sus superiores, quienes le dijeron que con estos calores que hacen, para qué quería el vidrio,
El policía les dijo que un día le podían robar el radio, uno de sus jefes, le contestó muy burlón ¿quién quieres que se atreva a robar a la policía? pero ya se dieron cuenta que si, los ladrones no respetan a su madre, menos a los policías.
En Pachuca, roban parejo.
El policía, dijo al agente del Ministerio Público que agarren a los ladrones, porque sus superiores lo van a obligar a que pague el radio, vale mucho dinero, cuando lo manden a otra comisión a Pachuca, no se va a bajar de la patrulla, ni para hacer del baño.
