SE LLEVARON A SU CACHORRO
Una mujer andaba gritando como la llorona “¡¡Ay, dónde está mi hijo!!” Los perros espantados no dejaban de ladrar, las madres que escuchaban sus lamentos abrazaban a sus hijos y le pedían al todo poderoso que se llevara a la alma en pena.
Era medianoche, el viento soplaba meneando los árboles que formaban figuras fantasmales. La mujer andaba en fondo, despeinada y no dejaba de gritar desesperada, se jalaba los pelos y pedía que la ayudaran a grito abierto.
La gente que la conoce dice que se volvió loca, llora, grita, se araña, se despeina, se tira y se revuelca, y pide que agarren al desgraciado que se llevó a su hijo, tiene 10 meses de edad.
Se acercaron unos gendarmes, la mujer se acercó, ellos le preguntaron qué le pasaba, les dijo que se llama Laura González, vecina del municipio de Santiago Tulantepec, les pidió a los uniformados que agarraran al infeliz que se llama Martín Aguado, es un tipo violento, cada que llegaba borracho a su casa se la sonaba, la humillaba y le daba para sus tunas.
Les comentó a los uniformados que cuando ella estaba embarazada la madreaba, en tal forma que por poco se le sale el hijo, dijo que el año pasado lo conoció, era un hombre mansito, cariñoso, trabajador pero quién sabe qué le picó y dio el cambiazo de un momento a otro.
Se aguanta de las madrizas porque la tiene amenazada de que se la iba echar al plato, eso la hacía temblar; cuando nació su hijo buscó la forma de escapar de ese infierno de vida que llevaba con su viejo, que la traía a patín y madrazo.
Una vez hablaron, se sentaron en una mesa para hacer un diálogo y realizaran un debate, ella soltó todo lo que traía guardado dentro de su corazón y logró domar a la fiera, y este le contestó que no había bronca, que la iba ayudar con una lana para que comiera el niño, también acordaron que él le iba a dar su apellido.
Pero después salió más caro el caldo que las albóndigas, porque no trabajaba, ella tenía que rajarse el lomo porque Martín se la pasaba como don Sebas, un día se llenó de valor, le dijo que buscara trabajo que ya no le alcanzaba el dinero, que ella ganaba para mantenerlo, ya que comía como un pelón de hospicio, le contestó que se esperara unos meses, que el Gobernador había anunciado que habría miles de empleos, pero no hay uno de su categoría.
Diario era la misma canción, la señora parecía disco rayado, diciéndole que trabajara, el maldito aprovechó un descuido para llevarse al niño; eso que les cuento sucedió en el mes de Octubre del año pasado o sea hace 4 meses, lo iba a buscar a donde vive su madre y le rogaba que se lo regresara, el hombre le decía que mañana y mañana, hasta que le llenó el buche de piedritas y le dijo que nunca se lo daría, no la bajaba de una mujer nalga fácil. Sin importarle todo lo que decía, iba diario a pedirle que le diera a su bebé, pero su ex pareja al ver que iba acompañada de toda su familia, salió y les apuntó con una pistola y le gritó que ahora por agitadora no le daba nada.
Para terminar el pleito, la amenazó que mataría a sus hermanos y a sus jefes, se llevaría al niño y que nunca sabría nada de él, la pobre mujer anduvo de mendiga tocando puertas, como lo hacen los candidatos a diputados para que caiga la gente y vote por ellos, hasta que llegó al Ministerio Público de Tulancingo y la mandaron al DIF, de ahí a Protección a Víctimas y luego al Juzgado Segundo Penal, la traían como calzón de mujer mala, y no le arreglaban nada.
Hasta que le dijo a un magistrado que había dicho su viejo que le iba a rajar la madre, fue cuando soltaron una orden de aprehensión contra el sujeto roba chicos, pero hasta la fecha la traen como pelota de pin pon y no lo han podido agarrar, dijo que a lo mejor se hizo amigo de los agentes porque lo han visto platicando con ellos.
La señora ha agotado todos los recurso, inclusive mandó una carta al Gobernador explicándole desde que comenzó su bronca y no ha tenido respuesta, comentó que a los mejor ni la ha leído, espera que alguien la ayude para que recupere a su hijo y no permitan que se burle de las autoridades y de ella, porque cada que la ve le hace violines, la señala y se carcajea.
LE PICARON LA CARA
Unos amigos se les escaparon a sus viejas para irse de parranda sufrieron las de Caín, porque les dieron una madriza que los mandaron al hospital, a uno de ellos lo picaron y dejaron cacarizo.
Los socorristas de la Cruz Roja trasladaron a unos señores que andaban pidiendo auxilio en Tula, Hidalgo. Los llevaron al Hospital, dijo que se llamaba Heriberto Sánchez, le contó al Agente del Ministerio Público que como a las 3 de la mañana salieron como arañas fumigadas de la discoteca, iba con su hermano Fernando y su amigo Bertín, transitaban por el andador turístico Quetzalcóatl, rumbo a sus domicilios, cuatro sujetos que venían en sentido contrario les mentaron la madre, los provocaron a que se aventaron una madriza. Ellos no les hicieron caso, eso los puso furiosos, se les aventaron a golpes, se quitaron los cinturones y les pegaron con la hebilla en las patas y por las nalgas, uno de los broncudos sacó entre sus ropas un cuchillo y le picó la cara varias veces, se tapó con las manos para cubrirse los ojos, le arrebató dos cadenas de orégano que traía en el pescuezo, le quitó su celular y le voló su reloj de pulso, lo tiró al suelo y le metió mano sacándole su cartera donde llevaba dos mil 500 varos, mientras que los otros también surtían a sus acompañantes.
Después de dejarlos medios muertos huyeron entre las calles oscuras, se levantaron y fue cuando pasó una ambulancia, se los llevó porque anduvieron cuadras, pidiendo ayuda, no encontraron a ningún Cuico, como era de madrugada los vecinos en vez de ayudarlos les gritaban “Cállense, borrachos”; despertaron en el nosocomio. Piden a las autoridades que busquen a los que los asaltaron, porque tan solo las pérdidas de él llegan a 40 mil chuchos.
LE DIERON SEIS PUÑALADAS
Felipe León, de 24 años de edad, se le calentó el gañote, se puso a chupar con su mejor amigo, Miguel Ángel, de la misma edad, invitó a Arcelia, de 19 años de edad, que se le quemaban las habas por darle para sus tunas. Se encontraban en la calle de Progreso de Atotonilco de Tula, Hidalgo, después de tomarse un pomo salieron a madrazos, el que pagó el pato fue Felipe a quien le dieron seis puñaladas, la vieja que estaba con ellos fue detenida hasta que quedara librada de la bronca.
En su declaración dijo que Felipe es su vecino, ella le renta la vivienda, estaba muy contento y chupaba como recién nacido, lo mismo que su cuate, se fueron al baño a cambiarle el agua al canario y regresaron medio disgustados, “quién sabe qué les picó se decían salud de mala gana”. Luego se supo que Miguel quiso abrazar a la mujer, le propuso a su amigo que se acostaran y la echaran en medio, eso enojó a León, que se puso como su apellido, le cantó las golondrinas mentándole la madre. Se fue echando chispas, ni adiós les dijo, le siguieron la tos al gato y se quedaron dormidos.
En la madrugada la mujer escuchó que alguien quería entrar a la casa, abrió la puerta, era Miguel Ángel, le puso un madrazo en el hocico que la mandó de nalgas, golpeándose la cabeza en un escalón, vio cómo discutían y se daban en la madre hasta que Miguel Ángel sacó un cuchillo y comenzó a metérselo, ella le gritó que lo dejara, si no le hubiera dado más, se echó a correr. Por lo mientras se llevaron a la muchacha a los separos y levantaron el cuerpo de Felipe León; los ministeriales fueron tras el asesino, pronto lo atraparán porque se llevaron un peine, para peinar toda la zona.
A LA PRIMA SE LE ARRIMA
El albañil Armando Paredes Bardales, de 35 años de edad, está casado con Concepción Hernández, tiene su domicilio en Santa Fe, de la colonia Providencia, de Mineral de la Reforma.
Siempre hacen desmadres, su vieja es muy celosa, por cualquier cosa explota dándole de madrazos, corriéndolo de su casa, achacándole que anda con alguna chancluda. Hace dos meses llegó a su casa una Nahualita, venía del municipio de Tlanchinol, buscando a su primo Armando, le dijo a doña Concha que se llamaba Ignacia Paredes Macias.
La señora la recibió con buenos ojos, sabiendo que le había caído una chacha. Pero Nacha había conseguido trabajo de gatigrafa de planta en una casa del Fraccionamiento San Javier. La indita dio el cambiazo, tiró sus huaraches, se compró zapatos de tacón alto, su morral lo cambio por una bolsa de charol, se mandó peinar a lo moderno, no faltó alguien de sus compañeras que le aconsejó que se comprara una falda corta porque tenía buen chamorro.
El lunes pasado fue a visitar a su primo, cuando la vio se le cayó la baba, y más cuando se agachó que le vio las nalgas, como no estaba su vieja le ofreció una Chela para el calor, la sentó en sus piernas, como cuando era chiquita. En esos momentos entró su mujer y comenzó arder Troya, la prima salió destapada, antes de que le pegara un tejolotazo en la cholla, y a Armando se le apareció el diablo, la señora le puso una madriza que lo dejó con el ojo cerrado, el hocico roto, descalabrado y no le siguió dando porque pensó que estaba muerto. Llegó la ambulancia y se lo llevaron al hospital, donde levantó un acta en contra de su vieja por intento de asesinato.
SE DIERON DE MADRAZOS
Un pleito de vecinos, que estaban muy borrachos, a uno de ellos su vieja lo estaba animando para que hiciera las paces, porque tenía mucho tiempo que se dieron de golpes y se odiaban.
El sábado pasado hubo un baile popular en la colonia La Providencia, Humberto Pérez, de 28 años de edad, dijo ser vecino de la calle de Santa Julia, en el mencionado fraccionamiento, resultó herido de una cuchillada, que por poco le sacan un riñón.
Vamos a ver porqué fue el pleito: se comentó que en días pasados hubo un baile, Humberto fue con su vieja y dos de sus sobrinos. En el lugar encontraron a Iván, que no se caían bien y andaba borracho. Estuvieron chupando tequila con sus familiares, su vieja le dijo que fuera a arreglar la diferencia que había tenido con su vecino. Ante la insistencia de su señora, Humberto llegó de perra flaca, hasta donde estaba Iván empinando el codo con sus amigos y su esposa, iba en son de paz, la vieja de Humberto hablaba con Iván, su señora se le aventó jalándola de las greñas que la dejó tirada.
Al verla Humberto agarró un palo y le dio por el lomo a la mujer, que la hizo brincar como chivo. Iván sacó un cuchillo y se lo enterró a Humberto en las costillas, al ver que se le salían los hígados, Humberto corrió como loco a la casa de sus familiares, donde lo llevaron al Hospital General y le cosieron el agujero.
