ESTUVIERON EN EL INFIERNO
Tres alegres amigos tuvieron una pesadilla en el fondo del infierno, donde le vieron la cola al diablo; salieron de paseo y se dieron en la madre en su motocicleta. Nadie sabe, nadie supo cómo fue, lo único que nos imaginamos es que le agarró la mano el Chango; como iban montados en su caballo de acero “Bolas”, chocaron con la guarnición. Pero todavía no cantan victoria porque los llevaron muy graves al Hospital General de Pachuca.
Esto sucedió en la autopista México-Pachuca, a la altura de Tlapacoya, los accidentados son una mujer y dos machos, vecinos de Coacalco, Estado de México; viajaban en una motocicleta Yamaha, sin placas de circulación, iban a uno de los balnearios de Ixmiquilpan.
Para su suerte llevaban puesto su casco de bacinica, si no se hubieran abierto la cholla. Según se sabe, por los vecinos y testigos, que viajaban a toda velocidad, el que la manejaba se descontroló y chocó en la parte de una guarnición y los tres tripulantes salieron volando, dando maromas en el aire cayendo de ranazo en el asfalto.
Varios de los automovilistas que se dieron cuenta del madrazo trataron de ayudarlos haciéndolos a un lado de la carretera, pidieron ayuda al 066, eso fue a las 11 de la mañana; pasó una hora y la Cruz Roja no llegaba, hasta que por fin los atendieron, le dieron los primeros auxilios y se los llevaron con el pico colgando a Pachuca, donde quedaron internados para echarles mecánica.
Yaneth Rodríguez Toledo, Gerardo Ordoñez Contreras y Abraham González, dijeron por separado que salieron de su domicilio con el fin de dar un paseo a uno de los balnearios de Ixmiquilpan cuando sucedió las tragedia, que en un cerrar y abrir de ojos tuvieron la pesadilla más grande de su vida, a su alrededor todo estaba oscuro, luego mucha lumbre, que sintieron que se quemaban todo el cuerpo.
“Fue horrible, fue horrible”, pero gracias a Dios están vivos, no dijeron quién era el piloto. Por su parte las autoridades hicieron a un lado lo que quedó de la moto, esperando que pasara el camión de basura.
CAPTURAN A DOS ALMAS EN PENA
Los automovilistas que circulan por la carretera al municipio de Ixmiquilpan, a la altura de la comunidad de Lagunilla, que pertenece a Santiago de Anaya, han visto que por la noche se atraviesan dos sombras, pero no se les ve la cara, ellos sienten miedo y le meten la pata porque se ha corrido la noticia que son dos almas de otro mundo, pero lo que más les cabe de extraño es que andan con pistola en mano y asaltan al que se queda paralizada por el miedo.
Al poner la queja ante la Policía de los municipios y comunidades, mandaron dos camionetas patrullas permanentes para ver qué Pez, si son delincuentes o almas de otro mundo. Los gendarmes sintieron mucho miedo y le pidieron a su comandante que les diera balas de plata para matar a los muertos, pero les contestó que con la situación que estamos viviendo no hay dinero, que antes las usaba El Llanero Solitario y luego la cantante Priscila, pero creo ya no tiene sus balas de plata, pero que a mentadas de madre se ahuyentan los espíritus, les dijo que a las balas que usan en su escopeta con una navaja les hicieran una cruz.
Con mucho miedo los uniformados hacían su recorrido por el lugar donde salían los que andaban penando, y el viernes, que fue una noche sin luna, agarraron a dos sujetos que estaban estacionados a un lado de la carretera dentro de un Volkswagen Sedán en forma muy sospechosa, los gendarmes se persignaron y poco a poco cercaron el coche y al ver que eran dos hombres les dijeron que se bajaran, cuando se estaban desabrochando los pantalones para quitarse los calzones, les dijeron que del automóvil.
Les ordenaron que se recargaran en la patrulla para pasarlos a la báscula, sin dejar de apuntar a los demás. Les dieron una patada en las nalgas para saber si eran de carne y hueso y luego comenzaron a meterles mano desde las patas a la cintura, hasta que sintieron que los dos tenían pistola, se las jalaron para quitárselas y dieron un grito que los espantaron, les dijeron que las armas de fuego las tenían a una lado de la cintura, eran dos fuscas 38 súper, color negro, con cartuchos útiles, y les quitaron pasamontañas hechas con ixtle, que al ponérselas parecían más a un marciano que a un muerto.
Les preguntaron que cómo se llamaban y dijeron que Juan Carlos Cabrera Estévez y Jorge Barrera García. Les preguntaron para qué querían el pasamontaña y no supieron contestar, se quedaron callados, como si les hubiera comido la lengua los ratones. Luego les pidieron que les mostraran el permiso para matar y como tampoco traían, los subieron a madrazos y uno de los uniformados dijo que a lo mejor eran Nahuales, porque cuando le dieron de macanazos en la cabeza les salió espuma por el hocico.
JÓVENES BORRACHOS
Cinco jóvenes, tres hombres y dos greñudas, que se habían pasado de copas, uno de ellos llevaba una pistola de municiones, y como ya no tenían que chupar pensaron en una tienda Oxxo, iban a amagar a los empleados para robarles los pomos.
Pero no contaban con que la policía ya no se duerme, porque ya les aumentaron el sueldo y que los agarran, explicaron los de la gendarmería que por la oscuridad de la noche y en algunos lugares los focos de los postes están fundidos, iban seguros a robar algunos pomos para seguir chupando, pero no falta un soplón que paró a una camioneta patrulla y les dio el pitazo que en una camioneta Chevrolet Bravada, color café, con placas HMN 5212, iban uno ladrones armados. Llevaban el radio a todo volumen en el interior de la unidad, con eso fue suficiente para dar con ellos, cuando los uniformados les cayeron como aboneros en quincena, les pararon el alto, se emparejaron y le dijeron al chofer: “Oríllese a la orilla”, los bajaron con las manos en alto sin dejar de apuntarle con sus carabinas, primero se bajaron dos greñudas y luego los tres hombres, todo iban borrachos.
Cuando los pasaron a la báscula, al chofer le encontraron una pistola tipo escuadra, se la quitaron y se dieron cuenta que era de municiones, dijo que se llamaba Edgar, de 23 años, les explicó que no era de verdad, pero el comandante le dijo que como si lo fuera, porque al sacarla y apuntar a alguien del susto se muere, se les para la molleja.
Los demás se identificaron como Francisco, de 28 años, Daniel, de 23, Evelyn, de 22, y Michael de 23, todos dijeron que vivián en el barrio de las Lajas; al no poder justificar de dónde habían sacado la pistola, los 5 fueron trasladados a la instalaciones de seguridad para meterlos a las galeras de la barandilla.
También solicitaron una grúa para llevarse la camioneta al corralón, les dijo una de las viejas greñudas que no mamen, que apoco era necesario saber donde compraron la pistola de municiones, uno de los uniformados les leyeron sus derechos, que tenían que estar callados porque todo lo que dijeran sería botellita de vinagre.
UN HOMICIDA SE FUGÓ
A unas horas del año nuevo, un recluso del Centro de Reinserción Social del municipio de Apan, sentenciado a 25 años de edad, burló la seguridad y se escapó.
Al parecer el prófugo realizaba labores de limpieza en la parte alta del área de trabajo y aprovechó la oportunidad para desaparecer como conejo de mago del reclusorio, y se escondió en lugares donde no lo encontrarían.
Las autoridades policiacas confirmaron que el sábado 31 de diciembre, a las 7 de la mañana, durante el pase de lista de los internos del cereso del municipio de Apan, los custodios se dieron cuenta de que Jesús Montiel López, de 26 años, había realizado el gran escape.
Al saberlo puso nerviosos a los directivos y jefes de custodios, que les sudó la cola y formaron un operativo de volada en todo el perímetro de las estaciones para localizarlo, pero regresaron con todos los honores porque no lo encontraron.
El reo que se escapó ingresó al Centro de Reinserción el 18 de mayo del 2015, relacionado con el delito de homicidio calificado porque era un tipo de pocas pulgas, y actualmente estaba pagando su condena en la mencionada prisión.
Jesús Montiel se echó al plato a Alberto Ortiz Morales, en Ciudad Sahagún, era originario del estado de Puebla, según los reportes policiales este canijo evadió a la seguridad desde el área de trabajo, aparentemente se brincó la barda y se dio a la fuga lo más pronto posible.
Se movilizó el operativo de búsqueda y localización por parte de todos los cuerpos policiacos de la región, para dar con el paradero y regresarlo inmediatamente a donde debe cumplir su condena de 25 años, más lo que ahora se le acumula por escapar sin avisar.
PILLOS JUVENILES
Dos jóvenes fueron abucheados por los delincuentes porque fracasaron al tratar de robar una casa habitación y les cayó el dueño, quien de volada fue con el chisme a la policía para que los agarraran con las manos en la masa.
Una llamada de emergencia al centro de comando y comunicaciones de Pachuca movilizó a los municipales, para que se trasladaran a la calle de Lomas de Bellavista Pachuca, en el fraccionamiento Residencial Pachuca, porque había un robo en vivo y a todo color.
Al llegar al domicilio los uniformados que iban armados hasta los dientes detuvieron a dos monos, de 17 y 21 años de edad, señalados de entrar a la vivienda de Sergio P. P., de 41 años, para llevarse lo que de valor tenía. El propietario dijo que no hubo forcejeo de chapas ni de ventanas, los sujetos entraron cuando la puerta estaba abierta y de volada guardaron objetos de valor en una mochila para salir como bala, pero estaban siendo vigilados.
Dentro de la mochila los jóvenes ladrones llevaban una computadora Lap top, dos relojes, un destapa botellas, varios cargadores de celular, y un desarmador con que de seguro forzarían las puertas.
Posteriormente el par de posible malhechores, fueron trasladados a la barandilla para ponerlos ante el Ministerio Público que los mandó a encerrar mientras llegaban a poner la denuncia. Finalmente, los reportes reflejaron que los jóvenes asegurados arrojaron en la plataforma México registros por tentativa de robo en una casa habitación, y de un comercio; así que con estos dos fracasos se deberían de dedicar a otra cosa porque para ladrones no sirven.
gatoseco98@ yahoo.com.mx