LOS UNIFORMADOS ATRAPARON A DOS

Ratones de los grandes, en el municipio de Tulancingo, Hidalgo, se robaron una camioneta Nissan X-Trail el sábado por la mañana, con lujo de violencia en la colonia Las Glorias.

Pero los mendigos no contaban con que la policía se ha coordinado para hacer sus operativos y les han dado resultado. Los hechos causaron miedo y terror en la calle del fraccionamiento Las Glorias, cuando dos tipos de cuidado llegaron muy nalgas en la calle de Ricardo Garibay.

El dueño del inmueble, identificado con  las iniciales E.A.S., le dijo a los policías que de momento vio llegar a unos sujetos en un coche color rojo. Dos de ellos se bajaron y fueron a tocar su puerta, cuando salió le enseñaron la pistola y le dijeron que les diera de volada las llaves del Nissan Bora, con placas de circulación HNG-1102, con miedo a que se lo echaran al plato se las entregó. Los pistoleros las recibieron caminando hacia atrás, sin quitarle los ojos de encima, y se pelaron de casquete.

Otros dos que iban en un Volkswagen con placas del estado de Veracruz, siguieron al coche robado, el dueño del Nissan sacó su celular y llamó a la gendarmería, ellos se encargaron de avisar a sus compañeros de los municipios cercanos, incluyendo a los de Pachuca.

Cada una de las corporaciones puso sus operativos y en menos que canta un gallo detectaron al Nissan Bora, en la autopista de Tulancingo- Pachuca. Desde ese momento se inició una espectacular persecución de pelos, y valieron madre los ladrones porque los pescaron; a los otros dos que iban en el Volkswagen sepa la bola por dónde se fueron, porque no les vieron la cola.

A los que agarraron se llaman Ismael C.R. y Jacobo V.G., de 23 y 26 años de edad, respectivamente, uno de ellos tiene su domicilio en Palma Sola de Poza Rica, Veracruz, y el otro mono vive en la colonia Villas del Álamo, en Pachuca. Comentaron los gendarmes que se los achicalaron en el municipio de Epazoyucan, después de que le dieron un golpe al Bora.

El delegado de la policía estatal de Tulancingo, dijo que a los emputados, (perdón) que los imputados, también se les puede llamar así porque estaban enojados, los regresaron y los pusieron a disposición de la Procuraduría de Justicia. Por su parte el Director de Seguridad Pública de Tulancingo dijo que habían realizado un operativo de localización y búsqueda.

También comentó que habían encontrado el coche abandonado en donde iban los otros dos ladrones, pero que no hay Pez porque les llevarán un mariachi a los detenidos para que canten dónde los pueden agarrar.

MATÓ A SU YEGUA

Juan Hinojosa, de 40 años, que vive en la colonia La Cruz de San Bartolo, llorando a lágrima viva buscaba por todas partes de la colonia, en el cerro, a su yegua roja cruzada de cuatro millas con corriente de patas blancas, de 12 años de edad, valuada en 20 mil pesos.

Una señora le dijo que Pedro, un viejo maldito que ni a su vieja respeta, le había dado en la madre a balazos. Le dijo que la yegua salió del corral del viejo a todo galope y cayó muerta a media calle, que ella escuchó los balazos, eran como las 11 de la mañana. El mismo viejo mata yeguas llamó a la Presidencia Municipal, les dijo que había un animal muerto a media calle,  estaba estorbando a la gente y a los coches.

Llegó el carro de la basura creyendo encontrar a un perro muerto,  al ver a la yegua se iban a retirar, el viejo les dio para los “Chescos” y entre mucha gente la subieron al camión y se la llevaron al tiradero municipal del Huixmi. Suspirando por su yegua, echando chispas llegó a la calle de Michoacán de la colonia Venustiano Carranza, donde vive el matón. 

Tiene un terreno junto al suyo, le reclamó en buena onda que si su animal se metió a su corral y le causó daños, le hubiera dicho y con gusto se los pagaba. Pedro Gutiérrez se hizo el sorprendido, dándole el pésame a su vecino diciéndole palabras de consolación porque lo vio deprimido y pensó que a lo mejor se suicidaba. Juan le dijo que le hablara con la verdad porque le había dicho un pajarito lo que había pasado con todo detalle.

Pedro cambio de actitud y le contestó que él tenía la culpa, porque le dijo mil veces que no quería que se metiera su animal a sus propiedades, que había tenido una bronca en su casa con su vieja y se fue a su terreno súper enojado y al ver la yegua le disparó  para asustarla pero sin querer le atinó. Juan le dijo que lo iba a demandar y que se atuviera a las consecuencias, que el día que lo viera en su terreno le iba a dar un balazo a media madre. Pedro le dijo que dónde estaba el cuerpo del delito, que cuál yegua.

SU PRETENDIENTE LE PEGÓ

Margarita Sánchez, de 37 años de edad, fue a poner su demanda al Ministerio Público, llevaba sus cachetes como los de Kiko de tantas cachetadas guajoloteras que le dio. “El pifas” le pegó porque la anda enamorando, pero ella no le atora.

Dijo que en la colonia Ampliación Santa Julia, como a las 4 de la tarde, ella pasó por un taller de Hojalatería. Al verla salió corriendo Eduardo Olvera  López, a quien le dicen “El pifas”, le dijo que la quería mucho, que no lo despreciara, que él es un hombre muy cumplido y trabajador, que si anda borracho es por ella que la sueña, que su recuerdo no lo deja en paz.

Margarita le dio un aventón cuando la quería abrazar, se fue de nalgas que hasta las patas paró.

La alcanzó y le dijo que por favor fuera su novia que se lo suplicaba. Margarita le dijo que eso se lo dijera en su juicio y que además era casado. “El pifas” le dijo que sí era casado pero no estaba capado, que a todos los hombres les tocan 7 mujeres y un maricón.

La mujer siguió su camino pero el hojalatero no se daba por vencido, sacó una cerveza y le dijo que le tomara para brindar que ya eran novios. La agarró de las manos parando la trompa para que le diera un beso, Margarita le dijo que lo iba acusar con su mujer, que la anda molestando. Esas amenazas le cayeron al “Pifas” como patada de mula en el hígado, y le dijo que a él ninguna vieja lo desprecia, y le dio de cachetadas una tras otra hasta llegar como a 20.  Margarita  lloró y gritó y le dijo que lo iba a demandar. “El pifas” le dijo que le valían madre las autoridades, y le dio una patada en la cola. Dijo Margarita que hace unos meses tuvo una operación muy delicada, y con los jalones que le dio el “Pifas” se siente mal. Pide al agente social que lo castiguen y que le digan que ya no la moleste.

ENCONTRARON A UNA MUJER MUERTA

Pero todo es un misterio, como decía el monje loco “nadie sabe nadie supo, quien robo a la Conasupo”. La bronca es de que a la policía se le está haciendo bolas el engrudo, porque el cuerpo de la mujer encontrada ya se estaba echado a perder.

Pero vamos con la Nota. Los vecinos encontraron un cuerpo sin vida de una joven mujer, en un departamento del fraccionamiento Quma, de la población de Atotonilco de Tula, la tarde del viernes. Todo lo que van a leer da comienzo el día que les dije, como a las 7 y feria de la noche, se dieron cuenta por el olor fétido que salía del fraccionamiento.

Avisaron a los uniformados, quienes salieron rápido montados como changos en su camioneta patrulla, al mando del comandante Huele moles, y llegaron al edificio 101, departamento 01, que se encuentra entre Río San Marino esquina Primera de Tibet, en Torcaza Alta, en el fraccionamiento Quma.

Los vecinos recibieron un olor de la patada, que los hizo cantar la guácara, pensaron que a lo mejor era un viejito que no se bañaba o se le había muerto el perro. Por ese motivo mandaron al comandante huele moles.

Por un testigo protegido se supo que en esa casa vivía una joven empleada de una tienda y no la habían visto salir desde el martes pasado. También la habían ido a buscar sus patrones porque no había ido a trabajar. Estaban como jicotes dando vueltas los uniformados del poblado de Atotonilco de Tula, muy nerviosos porque no parecía el agente del Ministerio Público, los agentes de criminalística, los agentes investigadores, protección Civil, y los Bomberos.

Sacaron  el cuerpo de la mujer desconocida, de una edad aproximada de 35 años de edad, se desconocen las causas de su muerte, por lo que se practicará la necropsia de ley, ahora serán las autoridades del municipio de Tula, Hidalgo, quienes se harán cargo de saber qué es lo que pasó, de qué murió, por qué pasó.

ROBAN UNA IGLESIA EN EPAZOYUCAN

La madrugada del sábado se realizó el robo, dijeron los vecinos que sospechan que fueron los hijos del diablo, porque se llevaron las limosnas y candelabros antiguos. Pero según se ha corrido la noticia como reguero de pólvora que los sujetos más sospechosos son los de la comunidad de Xochihuacan.

Estos mendigos rompieron los vidrios de las ventanas y se sabe que dejaron rastros de sangre en el templo.

Se cometió el robo en la iglesia de la colonia Nueva Esperanza, en el interior del culto de honor a la Virgen de la Esperanza, que generalmente abre sus puertas los domingos para las misas y el resto de la semana permanece cerrada, pero diario por las tardes imparten el catecismo.

De acuerdo con los vecinos, la inseguridad sigue en aumento en Xochiatipan, por lo que por eso dicen las malas lenguas que son los de allá. La mañana del sábado descubrieron el robo y dieron parte los pobladores a la policía y estaban que se los llevaba Pifas, que cómo es posible que roben a la iglesia y les exigieron dar lo más pronto posible con los ladrones, porque si no ellos lo harán y si los agarran les van a dar castigos como en la Santa Inquisición.

Dijo el comisionado del poblado que en este año llevan varios robos en iglesias  en Tasquillo, Alfajayucan, y ahora en Epazoyucan. También en el año anterior no se salvaron las iglesias de San Salvador y Zempoala.

UN MOTOCICLISTA SE DIO EN LA MADRE

Derrapó su caballo de acero y por un pelito no lo cuenta. Dicen los que lo vieron que corría a todo lo que daba la máquina, por el boulevard Nuevo Hidalgo. Al tomar las curvas a la estación de servicio de la gasolinera de Villas de Pachuca, como al medio día, le ganó el peso y “Bolas” derrapó golpeándose la cabeza, que sonó a bote viejo, y parte del cuerpo, por un pelito y se lo lleva la calaca. Fue necesario que interviniera el grupo de rescate encabezados por los Bomberos; lo encontraron tirado mirando al cielo y su motocicleta Italika, sin placas, color naranja con negro, quedó hecha pedazos.

gatoseco98@yahoo.com.mx.