FESTEJARON CON UNA CAMPANA PRESTADA
Como les había comentado, los ladrones se llevaron las campanas de la iglesia de la comunidad de Zozea del municipio de Alfajayucan. Todo el pueblo estaba que se los llevaba la grosería, faltaba unos días para celebrar su feria y a la Virgen de Guadalupe.
Los vecinos estaban como el Monje Loco, nadie sabe, nadie supo quienes eran esos jicotillos que se conejearon las campanas, una de 300 kilos y una chirris de 200 kg; además confirmaron que tenían más de 400 años.
La gente ya no buscaba a los ladrones, si no que le iban acargar el muerto a la policía y al presidente municipal, como responsables de que no cuidan el pueblo. Como les había comentado hablaron con el secretario municipal para que le dijera al alcalde que les recuperara las campanas, porque las querían para el día 11 a la media noche.
Se hizo una sedición y ruido popular y algunos invadieron el palacio municipal, mientras otros cerraron la carretera principal que va al centro y no se quitarían hasta que aparecieran las campanas, al ver que de un momento a otro el pueblo se podía levantar en su contra, al presidente municipal le sudó la cola; habló con los que encabezan el movimiento y les dijo que formaran una comisión para que fueran a buscar el lugar donde fabricaban campanas.
Todos andaban como hormigas, movilizándose de un lado a otro y lograron encontrar donde las hacían; pero les dijo que tenía que ir a ver el lugar para que estuvieran a la medida y le dijeron que allá lo esperaban, fue una gran espera porque parece que el viejo caminaba de rodillas, hasta que por fin llegó.
El vendedor de campanas se entrevistó con las autoridades municipales, y al decirles el valor de las campanas hasta los calzones se les cayeron, estaban más caras que las perlas de la Virgen, el presidente municipal volvió a preocuparse porque si compraba las campanas, no les daría aguinaldo a sus trabajadores y entonces sí le podrían dar en la madre.
La persona que les ofrecía las campanas llevaba una, de su propiedad, dijo que para que la Guadalupana no se quedara sin campana él se las prestaba, le dijeron que no, porque las campanas que se robaron tenían grabada la imagen de la virgen y esa tenía “México, Baja california, junio de 2013”.
El vendedor les dijo que era mientras, o que le dieran un motivo por el cual no la querían, hablándoles con el corazón en la mano sobre el día que se celebraba que era muy importante, casi les rogó que la aceptaran y que después él se comprometía a gravar la imagen de la Virgen y la de Juan Diego con todo y ayate.
Los representantes del comité dijeron que la iban a aceptar, pero no iban a quitar el dedo del renglón hasta que la presidencia repusiera las robadas tal como estaban. Tuvieron una reunión a las 9 de la mañana en el atrio de la iglesia, encabezados por el presidente municipal, Oscar Ángeles García, que se comprometió a apoyar con el dinero de los recursos económicos de manera conjunta con el delegado de la comunidad, Fernando Valle.
El mandatario les dijo que estaba pelón para desbordar un buen de lana y comprar las campanas, les pedía a todos los funcionarios públicos de la alcaldía apoyar con una cooperación para comprar las nuevas. Y así, con una campana prestada, tocaron para llamar a todos los del poblado y en coro cantarle las mañanitas a la virgen.
UN TAXISTA SE ENDROGÓ
Mató a un ciclista, un señor de 65 y más, se lo llevó de corbata, iba al pasito en un triciclo. Sucedió en Santiago Tulantepec, después de que lo atropelló corrió en su taxi como loco, a unas cuadras bajó a una pasajera y se siguió de filo, nadie sabe, nadie supo por dónde escapó.
En la carretera estatal a Tulancingo, cerca del lugar conocido como “El Campamento”, fue escenario de lo que le pasó a un adulto de la tercer edad que en vida se llamó Anastasio Castro Franco, de 65 años de edad, tripulaba su bicicleta cuando de pronto le llegó por la retaguardia un chofer del servicio público de la ruta Santiago-Tulancingo.
El señor sufrió lesiones graves, fracturas mortales; y después de darle el madrazo y pasar por encima de él, se quedó quieto. Al saberlo, las autoridades implementaron un operativo para buscarlo hasta por debajo de las piedras, pero no lo encontraron. Es más, ni sabían a quién buscaban hasta que les dijeron los lugareños que había sido un taxi. Lo aseguró una empleada que iba como pasajera, ella ingresó a la clínica del IMSS para que la atendieran de algunas lesiones y cortadas con vidrio; explicó que salió de la colonia 2 de enero en Santiago Tulantepec, como ya era tarde no se fue en la colectiva, le hizo la parada a un coche de alquiler y le pidió al chofer que la llevara a su trabajo, es empleada de una gasolinera que se encuentra en Tulancingo.
UNA MADRIZA ENTRE VIEJAS
Una fenomenal lucha a calzón quitado sin referee, se aventaron unas viejas que se dieron hasta con la cubeta, fueron a parar ante el Ministerio Público de Tulancingo.
Ivana Córdoba denunció a la cuñada de su suegra, Norma Angélica González, por lesiones y lo que resulte porque de tanto jalón de greñas la dejó pelona. Subiendo y bajando el moco, declaró ante el agente social que en la casa de la abuelita de su esposo, en la calle Mitla de la colonia Guadalupe, luego que terminó de lavar los trastes, dejó basura en el lavadero y cuando la fue a quitar ya no estaba. Al día siguiente se dio cuenta que la basura estaba dentro de la lavadora, la demándate fue a decirle que si sabía quién la había echado, la señora en vez de darle alguna explicación le dijo que era una víbora y de momento se le fue a golpes, patadas y le dio un faul que se revolcaba de dolor, le arañó la cara que la dejó como si se hubiera aventado una madriza con un gato, la sangró de la nariz, le torció la cabeza… A la señora no le importó que su bebé estaba llorando del susto, daba uno gritos que parecía que le estaban apretando el gañote. En la averiguación previa quedó asentado que no es la primera vez que Norma Angélica le da en la madre, cada que la ve la insulta y la reta a que se avienten un cayo; dijo Ivana que esta vez se le pasó la mano. Pidió a las autoridades que se proceda contra la agresora, quien tiene 32 años de edad, está muy gorda, es una salvaje, dijo que la tiró en el suelo y luego se le dejó caer en el estomago, que por un pelito la revienta.
UN TAXISTA RATÓN
Se escapaba con dinero robado un trabajador del volante de Pachuca, le cayó el Chahuistle y se lo llevaron al bote; se les puso al brinco a los uniformados y le dieron de macanazos.
Al recibir un reporte, la Central de Radio de la Secretaría de seguridad por un robo en la colonia el Huixmi, que escapó en su taxi Metropolitano, hechos la mocha de inmediato los azules montaron en su camioneta agarrándose a 20 uñas, no se fueran a caer y dar el mulazo.
Por un tiempo se les había escapado a los gendarmes, que por más que pelaban los ojos no lo miraban, dieron vueltas por distintas calles moviendo la cabeza para todos lados hasta que les dijeron que por la avenida principal del Municipio lo habían visto.
Se les hizo raro pero por las moscas fueron a ver que Pez, y abordaron al conductor frente a una tienda Oxxo, quien se identificó como Maciel Eduardo, de 23 años de edad, estaba borracho. Consultaron por el radio-operador y éste verificó las características del hombre que agarraron con la versión de la víctima.
Daban perfectamente con el mismo ladrón que lo robo y dijo que era su vecino. Por esas señas, el delincuente fue llevado a la comandancia de policía junto con el coche Nissan “Taxi Metropolitano”, con placas de circulación 9974- FUD; encontraron en sus bolsas mil 412 pesos que se había robado, y se quedó en la mazmorra de seguridad.
ESTABA SIN VIDA EN UN CUARTO
Un indigente fue encontrado tieso dentro de un cuarto de madera en la colonia El Paraíso, no tenía ventanas ni puertas y con este frío no aguantó. El personal de la Procuraduría General de Justicia hizo las diligencias de rigor por la mañana del sábado.
Unos de los lugareños de la calle de Ana de La Mancha, hicieron el descubriendo y de inmediato avisaron a la policía, llegaron los uniformados a ver si de veras estaba muerto o los estaba engañando; sí estaba tieso.
Por medio de la voz de los vecinos se supo que ese cuarto fue construido por ellos para meterse a chupar y a dormir, era un grupo de alcohólicos que andaban en el escuadrón de la muerte. En apariencia no presentaba lesiones, las autoridades suponen que fue causa del alcohol. Esto será confirmado o desmentido cuando los médicos entreguen los resultados de la necropsia de ley. Los del Ministerio Público esperaron que acudiera algún familiar del hombre, hasta que llegó su viuda llorando, les dijo que lo había matado el frío, le contestó el agente social que no se preocupara, que ya los agentes investigadores andan tras el asesino.
LAS MAÑANITAS A LA GUADALUPANA
En todos los barrios altos que rodean la ciudad de Pachuca, en las faldas de los cerros, en los callejones y calles, desde hace más de 50 años se hizo tradición poner una capilla con la imagen de la Virgen de Guadalupe; por lo que hicimos un recorrido por todos estos barrios.
En el Atorón, en la calle de Observatorio a la altura del barrio de la Vena de oro, arreglaron con flores de plásticos todo lo largo y ancho, alrededor de la imagen, se juntaron los vecinos, cooperaron para el café, el ponche, alguna que otra chela, llevándoles un trio que cantó las mañanitas, y después comenzó la fiesta con música guapachosa sin importarles el frío.
El barrio de La Palma, se puede decir que fue en ese lugar donde se inició esta tradición y año con año fue creciendo la capilla. Ahí comenzó el baile desde temprano, hubo una pausa a las doce de la noche, cantaron a la guadalupana y después siguió el bailongo hasta que salió el sol.
En el barrio de la Montaña, el Arbolito, en sus callejones lo mismo. En el Porvenir, en la calle de Galeana, el barrio de Españita, El Mosco, El Lucero, Santiago, Cubitos… en fin, la tradición se cumplió como todos los años, hubo de todo, con saldo blanco.
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