UN BORRACHO MUY NECIO

La señora María Hernández, de 29 años de edad, se presentó al Ministerio Público, estaba como camote de tanto madrazo que le dio su viejo borracho por no hacerle caso. Dijo la mujer que su pareja se puso a chupar con unos vecinos, no soltó la jarra sabiendo que tenían un compromiso con su familia en Tepatepec, y él iba a conducir. Siguió chupando y, horas después, llegó a su casa hasta la madre, en la calle Santa Inés de la colonia La Providencia. La esposa lo vio que apenas se podía sostener, tenía que abrirse de patas, recargado en la pared, para no caer.  

Le dijo que ya se fueran, la señora le contestó que no iba por las condiciones en que se encontraba. Le contestó que borracho maneja mejor, si ella no quería ir, entonces se llevaría a sus hijas. De buena onda su mujer, trató de convencerlo, que mejor al día siguiente irían, el borracho le aventó un madrazo, que si no se agacha le pasa lo que al perico, la agarró de las greñas, la tiró, la arrastró de su recámara hasta la sala, diciéndole que se la iba a llevar a huevo.

María se quiso parar, el borracho la agarró del gañote, pegándole donde le cayeran, la señora se zafó, se echó a correr a su recámara, le dijo su viejo  que por las buenas o por las malas, lo tenía que acompañar, la agarró de golpes con el puño cerrado, en plena cara, que la tumbo, la paró y le dio una patada en las nalgas, y a empujones la subió al coche.

La mujer iba llorando, le dio sus cachetadas, diciéndole que se callara el hocico porque lo distraía, todo el camino la fue cajeteando, llegaron a la casa de sus parientes  y se puso a chupar, se quedó dormido, uno de sus familiares de ella, los regresó a su casa. Al llegar la esposa, fue a poner su demanda, a su regresó ya estaba su viejo, reclamándole por qué lo había dejado, ella le dijo que lo fue a demandar, le dio otra madriza, le volvió a repetir que a él, las autoridades le hacen los mandados y se comen los pilones.

EL HIJO DESOBEDIENTE

José Luis Escamilla le dio en la madre a su hermana, para que todo quedara en familia, Emilia, de los mismos apellidos, de 25 años, que vive en Tierra y Libertad 256 de la colonia Felipe Ángeles, dijo al Ministerio Público que su jefa Noemí Escamilla González le reclamó a su hijo José Luis porque había desvalijado el automóvil que le habían dejado encargado.

José Luis le dijo que lo hizo porque necesitaba una lana, si el dueño del coche le decía algo, lo iba a madrear, y echó mentadas parejas. Su hermana le llamó la atención, que si no le daba vergüenza decir esas groserías delante de su mamá, se tapó las orejas para no escucharla, al salir agarró un teléfono antiguo y lo aventó, haciéndose cachitos.

Su hermana le comentó que ese teléfono era el único recuerdo que les quedaba de su padre. El muchacho se puso como loco, la agarró a patadas, su mamá, doña Noemí se quiso meter a defender a su hija, recibió un aventón, que fue a retachar en la pared, cayendo sentada, su hermana se le aventó jalándolo los pelos, y se armó la bronca donde José Luis, le dio una buena madriza que la dejó toda sangrada y desgreñada.

Todos los vidrios de la casa los rompió, lo mismo que la tubería de gas, aventó el tanque, que se estaba saliendo, la casa podría explotar. Llamaron al 066 y cuando llegó la policía, les dijo que ya conocían al muchacho y no se lo podían llevar porque era la sexta vez que lo detenían y la familia no levantaba el acta y lo dejaba salir.

Uno de los vecinos que tenía su camioneta estacionada en la puerta de donde fue el desmadre, dijo que le causaron daños y protestó ante la autoridad y se lo llevaron, ahí fue donde la hermana aprovechó para que le levantaran el acta, y José Luis se las está viendo negras para salir del botiquín.

SE LLEVARON A SU CACHORRO

Una mujer está desesperada y pide ayuda a las autoridades, pues su ex pareja se robó a su hijo. Llora, grita, se araña, se despeina, se tira y se revuelca, y pide que agarren al desgraciado que se llevó a su bebé, de 10 meses, a la casa de su madre.

Laura González, vecina del municipio de Santiago Tulantepec, subiendo y bajando el moco, sin saber qué hacer, pide que agarren al infeliz, que se llama Martín  Aguado, es un tipo violento, cada que llega borracho a su casa, le pegaba y la humillaba. Comentó que cuando ella estaba embarazada, la madreaba en tal forma, que por poco se le sale el hijo, explicó que en el año de 2010 lo conoció, era un hombre mansito, cariñoso, trabajador, pero quién sabe qué le picó, y dio el cambiazo de un momento a otro.

Se aguanta de las madrizas porque la tiene amenazada de que se la iba echar a la olla;  cuando nació su hijo buscó la forma de escapar de ese infierno en que estaba, una vez hablaron, se sentaron en una mesa para hacer un diálogo y realizaran un debate, ella soltó todo lo que traía guardado dentro de su corazón, que logró domar a la fiera, y este le contestó que no había pez, que la iba ayudar con una lana para que comiera el niño, también acordaron que él le iba a dar su apellido.

Pero después salió más caro el caldo que las albóndigas, porque no trabajaba, ella se tenía que rajar el lomo hasta con horas extras, porque Martín se la pasaba como don Sebas, un día se llenó de valor, le dijo que buscara trabajo, ya no le alcanzaba el dinero que ganaba en mantenerlo, él contestó que se esperara unos meses porque el gobernador anunció que había logrado miles de empleos, pero no hay uno de su categoría, diario era la misma canción, la señora parecía disco rayado, diciéndole que trabajara.

El maldito aprovechó un descuido para llevarse al niño,  sucedió en el mes de agosto, ella dejó pasar el tiempo porque lo iba a buscar a donde vive su madre, le rogaba que se lo regresara, el hombre le decía que mañana y mañana, hasta que le llenó el buche de piedritas y le dijo su ex  que nunca se lo daría, ponía como pretexto que era una nalga fácil. Sin importarle todo lo que decía, iba diario a pedirle que le diera a su bebé, pero su ex pareja al ver que iba acompañada de toda su familia, salió y le grito que por agitadora no le daba nada.

Para terminar el pleito, la amenazó que mataría a sus hermanos y a sus jefes y se llevaría al niño a la Unión Americana, y que nunca sabría nada de él, la pobre mujer anduvo como la llorona, hasta que llego al MP de Tulancingo, donde la mandaron al DIF, de ahí a Protección a Víctimas, luego al Juzgado Segundo Penal, donde soltaron una orden de aprehensión contra el sujeto roba niños, pero hasta la fecha la traen como pelota de pin pon, y no lo han podido agarrar.

SALE HERIDO DE UNA BRONCA

Sangrienta riña se armó el día domingo, por la madrugada, en la pachuqueña colonia La Raza, con un saldo de un joven lesionado con arma blanca, no sabe quién le llegó por la retaguardia a Rubén García, de 21 años de edad, que es el herido.

Se encuentra en el Hospital General sin poder declarar por la madriza que le dieron, en su representación fue su jefa Elia García Tenango, y les contó a las autoridades que a la una y media de la mañana el domingo pasado se encontraba haciendo la meme en la calle de las Huertas 102 del referido lugar, entró su nieto, le dijo que a su tío Rubén le habían dado en toda la madre, estaba lleno de sangre y un brazo lo tenía colgando, la señora se levantó como resorte, muy angustiada llegó al lugar, con un garrote en la mano. 

Había mucha gente de babosa, su hijo sangraba de un brazo. Le contó su nuera Victoria Alonso, que venían llegando de una fiesta, Rubén estaba borracho, no podía caminar, la había tirado dos veces, abordaron un taxi para trasladarse a su casa, en el camino encontraron un grupo de vagos que formaban una aduana, los pararon y le pidieron para las chelas, la pareja, para no tener broncas, se bajó del coche.

Caminaban y se le cansó el caballo a su viejo, se sentó en la banqueta donde estaba otro borrachales, que de momento se le aventó golpeándolo sin darle tiempo de montar en su caballo, sacó un cuchillo y se lo clavó sin piedad, por varias partes, Victoria corrió a pedir ayuda porque a  su marido lo desmadraron y pensó que lo habían dejado muerto.

Se lo llevaron al nosocomio y cuando despertó el lesionado, dijo que no se acuerda de nada, sólo que estaba tomando tequila en la fiesta y cuando se le bajó la peda, estaba en acostado en una cama del hospital, su madre dijo a las autoridades que ella no es tapadera, pero su hijo no se mete con nadie, el único defecto que tiene es que chupa igualito a su padre.

A LA PRIMA SE LE ARRIMA

El albañil Armando Paredes, de 35 años de edad, está casado con Concepción Hernández, tiene su domicilio en Santa Fe de la colonia La Providencia, municipio de Mineral de la Reforma. Siempre hacen sus panchos, su vieja es muy celosa, por cualquier cosa explota dándole de madrazos, corriéndolo de su casa, achacándole que anda con alguna chancluda.

Hace dos meses llegó a su casa una nahualita que venía del municipio de Tlanchinol, buscando a su primo Armando, le dijo a doña Concha que se llamaba Ignacia Paredes. La señora la recibió con buenos ojos, sabiendo que le había caído una chacha. Pero al ver que tenía un gallo, a la muchacha le consiguió trabajo de gatigrafa en una casa del fraccionamiento San Javier.

La indita dio el cambiazo, tiró sus huaraches, se compró zapatos de tacón alto. Su morral lo cambió por una bolsa de charol, se mandó peinar, pintar el cabello a lo moderno, no faltó alguien de sus compañeras que le aconsejó que se comprara una falda corta, porque tenía buen chamorro.

El lunes pasado fue a visitar a su primo, cuando la vio se le cayó la baba, y más cuando se agachó, que le vio las nalgas, como no estaba su vieja, le ofreció una chela para el calor, la sentó en sus piernas como cuando era chiquita.  En esos momentos entró su mujer y comenzó a arder Troya, la prima salió destapada antes de que le pegara un tejolotazo en la cholla, a Armando se le apareció el diablo, la señora le puso una madriza que lo dejó con el ojo cerrado, el hocico roto, descalabrado y no le siguió dando porque pensó que estaba muerto. Llegó la ambulancia y se llevaron al pobre albañil al hospital, donde denunció a su vieja por intento de asesinato.

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