LO ENCONTRARON MUERTO

Según la policía dijo que lo asfixiaron, un compañero de trabajo encontró su cuerpo, era un hombre de 53 años de edad, parece que se lo echaron al plato en su domicilio que se encuentra en el circuito San Antonio de la colonia Parque Urbano en las inmediaciones de Santa Matilde y San Antonio el Desmonte, al sur de Pachuca.

Su cadáver fue encontrado en la planta baja de su casa, estaba sentado y atado con las manos hacia atrás con visibles huellas de que le apretaron el gañote. Un compañero de trabajo fue a buscarlo a su cantón porque tenía varios días de no presentarse en su chamba y decidió ir a ver qué Pez, pensó que a lo mejor estaba enfermo.

La víctima, José Campuzano Lugo, se desempeñaba como jefe administrativo de una empresa inmobiliaria que se llama “Encabeza”, y sus superiores mandaron a que lo buscara su  compañero de nombre Marco, estuvo tocando la puerta por vario tiempo y como no le abrían se asomó por una rendija de la ventana, estuvo un buen de tiempo y decidió brincarse para quitar el velo del misterio.

Llegó a la puerta trasera y más le llamó la atención porque su automóvil estaba estacionado en la cochera, por poco se desmaya al verlo sentado, atado y sin vida. Salió como entró y fue a avisar a sus patrones, que al verlo espantado le dijeron que se comiera un bolillo y no tomara agua, porque se volvía panzón como sus hermanas, que ellos se hacían cargo de avisar a las autoridades.

Eran las 11 de la mañana cuando en el número 066 se alertó diciendo que habían encontrado a una persona muerta en su domicilio, en menos que canta un gallo llegaron al departamento donde tuvieron que romper las chapas (porque estaba cerrada como la puerta negra), de una habitación donde guardaba la herramienta en la vivienda de la calle de Circuito San Antonio, Fraccionamiento Parque Urbano cerca del boulevard Las Torres.

Al lugar llegaron ambulancias de Bomberos de Pachuca y de Mineral de la Reforma, los socorristas al revisar el cuerpo dijeron que por lo menos llevaba 24 horas de haber fallecido. Comentaron que había muerto de asfixia, pero en la necropsia de ley se sabrá la verdad.

Al domicilio llegó la señora María Gabriel, quien se identificó como la esposa de la víctima, les dijo a los agentes que se habían separado por unos meses pero todavía no estaban divorciados. No pudieron dar mayores datos de lo que pasó, a otros de sus familiares los citaron a declarar ante el Ministerio Público, que por cierto tardó en llegar más de 90 minutos, dijo que había viajado en el Tuzobús, por eso fue la tardanza. El cadáver del señor José Campuzano fue llevado al servicio médico forense, donde se le practicó la necropsia. Hasta el cierre de esta nota todavía no se tenían los resultados.

ESTÁ NECIO EN QUE LA QUIERE MATAR

Rosario Vázquez Hernández, ama de casa muy sufridora que recibía tres madrizas al día por su borracho viejo, que ya no la quiere, anda de sancho y tiene casa chica. La señora con los ojos de cotorra y toda hinchada de la cara como teporocha por los madrazos que le acomodaron, se dirigió a demandar a su viejo  para que lo metieran al bote por pegalón. Quedó asentado en la demanda que desde ese mismo minuto Juan González quedaba expulsado de esa casa y tenía que ponerse a mano con una pensión para que comieran sus hijos.

Pero el día de ayer por la mañana, Juanito salió de la cárcel y lo primero que hizo fue visitar a su vieja por rajona. La señora al verlo se espantó, gritó tan fuerte que hasta el niño se cayó de la cama, con el puño cerrado la correteó, la alcanzó y le dio  uno en el lomo que sonó como tambora.

La señora se encerró en el baño, al ver que su viejo quería abrir a patadas se quiso brincar por la ventana, se agarró el vestido que le estorbaba y se iba a deslizar, se le atoró una de las correas de su zapatilla en el pasador, quedando colgada de una pata, el vestido le cubría la cara. Ahí fue donde su viejo se aprovechó sonándole con un palo como a la piñata, la señora Rosario gritó  tan fuerte que sus vecinos se asomaron y al ver que estaba colgada y que la estaban sonando llamaron a la Policía Municipal.

Al ver a los cuicos Juan y otros cuates que llevaba se echaron a correr, mientras los policías desatoraron a la señora cayendo de cabeza, que se hizo un chipote del tamaño de un limón. Brincando como chapulín se la llevaron al Ministerio Público donde dijo que su viejo la quiere matar, que le dijo que le iba apretar el gañote, llevaba a otros cuates para desaparecerla, pide que lo vuelvan a encerrar porque conociéndolo sí es capaz de darle chicharrón.

SE ESTAMPÓ EN UN POSTE DE LUZ

Los vecinos de la colonia Santa Catarina iban hacer un reclamo enérgico, porque se había adelantado el apagón que está programado para el 31 de diciembre, el fin de este año que nos ha tenido varias sorpresas. Como había mucha gente les tuvieron que explicar que el apagón no es de luz sino de imágenes de televisión.

El comándate pistolas les explicó en el lugar que los dejaron a oscuras porque un coche le dio en la madre a un poste, que por un pelito lo tumba pero los cables hicieron corto circuito. El automóvil compacto Seat Toledo modelo 2015, color rojo, se subió al camellón central del Boulevard de Santa Catarina, circulaba como piloto de la formula uno con dirección a Actopan, era exactamente la una de la madrugada del miércoles pasado cuando de pronto le agarró la mano el chango y madres, se estampó contra el poste de concreto de la Comisión Federal de Electricidad, por fortuna se activó la bolsa de aire la cual salvó la vida del conductor, José Luis Cruz López de 27 años de edad. No faltó alguno de los automovilistas que dieron parte a las autoridades policiacas por el 066.

De volada se presentó el cuerpo de Bomberos junto con un batallón de uniformados en el boulevard de Santa Catarina a la altura de los órganos, lamentaron mucho el accidente, no por el chofer sino que el coche estaba nuevecito. Rápidamente desconectaron el acumulador del automóvil placas HNS-1621, así como le prestaron ayuda para salir al conductor que al ver su coche se jalaba los pelos.

Como no le pasó nada más que el susto se lo llevaron ante el Ministerio Público para que les contara lo que le pasó, y el automóvil al corralón. Se quedó encerrado hasta que se deslinden las responsabilidades y pague, aparte de la multa, el poste de luz y los daños que ocasionó a los vecinos que dejó sin luz,  y que en coro dijeron: “Con el apagón, que cosa sucede, que cosa sucede con el apagón”.

SE SALIÓ SIN PAGAR DE UNA ESTÉTICA

La señora Vanesa Hernández Pérez es la dueña de un salón de belleza en la colonia Plutarco Elías Calles, dijo al Ministerio Público que llegó a su estética una mujer de unos 30 años para que la dejara bella como una estrella, pues iba a ir a un evento partidista y quería dejar a los presentes con el hocico abierto.

Comenzaron a arreglarle sus pelos, le hicieron un corte, se lo enchinaron, le hicieron rayitos, le arreglaron las pestañas, le quitaron las chinguiñas, le sacaron la cerilla, le adelgazaron las cejas, le arreglaron las unas de las manos y de las patas, le maquillaron la cara,  y a cada momento les decía que la estaban dejando más bella de lo que estaba.

Entre pláticas les dijo que se llamaba Lucero Espinosa Ceferino, que le andaba tirando el calzón a un diputado, que cada que la ve le cierra un ojo, así se pasaron siete largas horas arreglándola. Cuando terminaron les dijo que la aguantaran un raund, mientras se iba a tomar un refresco y caminaba un poco porque ya se le habían dormido las nalgas, y esperaba que pasaran por ella.

La señora Vanesa sudó la gota gorda y le iba a cobrar por el trabajo 2 mil 150 pesos, Lucero salió del salón caminando graciosamente como yegua fina y se metió a un changarrito, en un descuido patas para que las quiero, se le perdió de vista a la dueña del salón, no le vio ni el polvo, al ver que se tardaba fue a buscarla para que le pagara y ya había volado la paloma. Vanesa se regresó echando chispas al no encontrarla en la tienda, la vieja se le fue sin pagar; barriendo los pelos que le había cortado y echando una que otra madre, movía la cabeza y en voz baja le mentaba la madre, se daba de topes en la pared y dijo que eso le pasaba por confiada, que para la otra va a cobrar por adelantado, para no trabajar gratis.

OTRO QUE CAE A MANOS DE VIVIDORES

Sergio Vázquez Ángel de 27 años de edad, vecino de Tecomatlán, Hidalgo, pasaba por la Presidencia Municipal como a las 3 de la tarde para tomar su camión de la Central Camionera. Se quedó de baboso a ver a un señor que sudaba al bajar unas cajas de zapatos de una camioneta, le preguntó que si se quería ganar una lana que le ayudara.

Sergio se puso en friega loca dejando su petaca a un lado, de momento el señor de la camioneta sacó su celular y habló en voz alta “¿Cómo estas vieja? ¡Bien! Quiero que me mandes 25 mil pesos, pero a la voz de ya, ¿Cómo que no tienes con quien? ¡Chin! ¿Ahora cómo le hacemos? Me está ayudando un señor, ¡Déjame decirle a ver si quiere ir!”,  cerró su celular, como Sergio tiene cara de nahual le dijo que si sabía donde estaba la cantina de los 3 Reyes, Sergio le dijo que sí, le explicó que le iba a dar 500  pesos pero que fuera por el dinero a la calle de Morelos 1250, que allá en la puerta lo iba a estar esperando una vieja grandota y le iba a dar 25 mil pesos.

El hombre aceptó, le dijo que sí, entonces el señor le comunicó que no era desconfianza pero para que no se fuera a ir con el dinero le dejara sus cosas, le dejó su maleta y 2 mil 600 pesos. Trotando se fue a recoger el dinero, llegó a la dirección donde le dijo y no encontró a ninguna vieja, tocó puerta por puerta preguntando quién le iba a dar dinero, algunos le dijeron que le iban a dar en la madre, que se pusiera a trabajar. Regresó y ya no encontró ni la camioneta ni las cajas de zapatos, pidió ayuda al policía de la Presidencia Municipal, que le dijo que fuera a poner su queja al Ministerio Público, Sergio le pidió para el camión pero el policía le enseñó las bolsas vacías y le dijo “mira, ya es tarde y no me ha caído nada”.

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