ASALTARON UN RANCHO

En las áridas regiones del Altiplano, cuatro sujetos armados, robaron a un conocido rancho en Apan, Hidalgo, se llevaron un gran botín, llegó la policía y como en las películas, se montaron en su camioneta patrulla y corrieron atrás de ellos, a toda velocidad, un policía quedó herido. La gente que estuvo presente dijo que fue un verdadero desmadre, los asaltados comentaron que tuvieron una pesadilla en el fondo del infierno, los automovilistas se hacían a un lado para que no se los llevaran de corbata, y los policías se agachaban para que no les pasara lo que al perico.

Esta es la nota para que usted viva con nosotros la gran aventura, ojala y no se le suba la adrenalina y así no pregunte quién gano, si los buenos o los malos. Cuatro sujetos armados hasta los dientes, se metieron como en su casa y se llevaron una gran cantidad de dinero del rancho de la comunidad Lázaro Cárdenas del municipio de Apan, Hidalgo la tierra del tlanchicotón, se movilizaron diferentes corporaciones policiacas, como la del Estado de Tlaxcala, además dejaron mucho terror y sangre.

Uno de los uniformados de Almoloya quedó herido de gravedad, al volcarse una de las patrullas que iban tras los ladrones, sólo sintió el madrazo, por un pelito lo apachurra. Para no hacérsela de tos, la cuarteta de ladrones logró hacer maniobras y escapar con rumbo desconocido en una camioneta Windstar que habían despojado a una familia en la carretera, se la quitaron con violencia, y estaba temerosa y abandonada, a cambio les dejaron un coche Chevrolet tipo Malibú azul, con placas del Estado de México, el que habían utilizado para el asalto.

De acuerdo con los primeros reportes oficiales de la policía, se sabe que el día viernes, como a las 3 de la tarde, cuatros sujetos que iban armados entraron de puntitas, pistola en mano y amagaron al encargado, que ni tiempo tuvo de gritar. Se apoderaron de mucha lana que estaba destinada para comprar materiales de construcción. Una vez consumado el objetivo, los ladones abordaron el Malibú y salieron huyendo rumbo a Almoloya.

En esos momentos el encargado del rancho, estaba muy asustado, pidió apoyo a la policía, al enterarse cómo estaba la movida, salen como alma que se lleva el diablo para atrapar a los delincuentes, olfateándolos para no perder el rastro. En el trayecto se les unen elementos de las diferentes corporaciones del Altiplano, y corrieron como pilotos de la fórmula uno, metiéndole la pata a sus patrullas, con el fin de alcanzarlos.

Al dar la vuelta en una curva, una camioneta de la policía municipal se voltea y quedó un uniformado herido, estaba inconsciente pero nunca soltó su carabina.

Lo trasladaron al Hospital de Apan, antes de que se lo llevara la calaca. Se suben a otra patrulla y continúa la persecución, los fugitivos se internaron en la zona límite entre Hidalgo y Tlaxcala. Los uniformados se unen al grupo, según su operativo, los maleantes al sentir que les pisaban los talones, dejan su coche viejo, les cayó como anillo al dedo una familia. Lo pararon y los bajan a madrazos, se llevan la unidad. Como la camioneta era nueva los deja atrás. Haciendo que los uniformados los pierdan de vista, encuentran cuatro caminos, mientras cambian impresiones para llegar a un acuerdo, cuál de los cuatro será el mejor, los asaltantes se les escapan. Los uniformados se regresan cada chango a su mecate para dar la noticia de que se les escaparon.

ASALTABA CON UNA PISTOLA DE JUGUETE

La gendarmería capturó a una vieja greñuda y tres delincuentes después de que asaltaron una gasera que se encuentra en Santa María Asunción del municipio de Tulancingo, Hidalgo, los uniformados le metieron la mano a una mujer (perdón) los uniformados les echaron el guante a una mujer y dos de sus compinches que usaban una pistola de juguete.

Los hechos ocurrieron la tarde del jueves en la empresa “Regio Gas” que se encuentra en el barrio San Ángel, cerca de donde pasa la carretera federal México- Tuxpan. Los primeros reportes oficiales indicaron que en la planta estaba el encargado cuando llegaron los maleantes como si fueran clientes, de momento uno de los ladrones sacó una pistola y le apuntó al trabajador ordenándole que se metiera al coche y que se callara el hocico o lo rellenaban de plomo.

Se quedó a cuidarlo mientras sus cómplices se daban el lujo de llevarse más de 4 mil pesos de las ventas del día y dos celulares y se fugaron, los bandidos no contaron con que la víctima se había escapado y pidió ayuda a los de la policía municipal de Tulancingo.

Los uniformados llegaron en el momento en que se iban y los atraparon cuando a uno de ellos le sacó una pistola, se la quitaron y al ver que era de juguete, le dieron un soplamocos por querer engañarlos. Los ladrones se llaman Denis Maribel García Contreras, Ángel Omar Duque Juárez, José Lino Arrellano Pérez y César Blanco Cruz, de 22, 20, 44 y 47 años.

La mujer está bien buena, dijo está domiciliada en la Delegación de Ixtapalapa en el Distrito Federal y los otros dos changos marangos son originarios de Tampico, Tamaulipas.

Traían a un menor para despistar a la policía, pero el encargado del negocio del gas los reconoció y los señaló sin titubeos. Haciéndoles una revisión les encontraron el botín que habían logrado, y les pidieron su permiso para cargar armas exclusivas para los chavitos, contestándole que no mamen. Los cuatro quedaron a deposición del Ministerio Público leyéndoles un pasaje de la Biblia para que se portaran bien y decirles que por qué los iban a encerrar. Argumentó uno de ellos que se las pasaran, apenas se están juntando como banda de asaltantes y andan haciendo la roncha para comprar armas de a de veras.

DOS DELINCUETES ASALTABAN ENAMORADOS

Se les acabó su minita de oro cuando los atraparon los lugareños, que primero les dieron en la madre por mañosos, y después los entregaron a la policía, a veces cuando encontraban alguna pareja y no tenían qué robarles se querían cobrar a lo chino con la mujer. Dos individuos asaltaron e intentaron matar a unos novios en los Mirasoles de Singuilucan.

Fueron localizados, detenidos por los habitantes del poblado, las víctimas, de las que nos reservamos sus nombres, acudieron al Ministerio Público de Tulancingo, temblando como gelatina, para denunciar a los desgraciados. El agraviado regresó al poblado y con el apoyo del delegado pudo reunir a vecinos que a caballo iniciaron el operativo “Cuaco” y con muchas ganas buscaban a los delincuentes.

Su localización y búsqueda tuvo éxito cuando encontraron por el monte a uno de ellos, llevaba la escopeta que usaron para apantallar a la pareja, y lo detuvieron, llamaron a los investigadores, que fueran y se los entregaran porque también agarraron al otro que estaba como el Tigre de Santa Julia.

Se llaman Alejandro Téllez Galvan y Míster Téllez López, de 24 y 22 años de edad, que viven en los Mirasoles, son los responsables de robar por asalto, intento de homicidio, ultraje, ambos fueron llevados a la comandancia de policía, donde quisieron cohechar a los uniformados, les daban 10 mil pesos para que los dejaran libres, a los uniformados no los tentó el diablo y se los llevaron.

En ese mismo día y a la misma hora, pero en otra parte, otros novios fueron asaltados en bosque. De momento fueron sorprendidos por dos sujetos, uno llevaba un pasamontañas y el otro, una escopeta. Con amenazas de dejarlos agujerados, les quitaron su dinero y sus celulares y otros objetos de valor y querían sobrepasarse con la mujer.

Uno de los maleantes estaba a punto de dejarla en traje de rana, le había roto el vestido, en los jaloneos se dio cuenta que la escopeta no tenía cartuchos, y le dijo a su novio. Los dos les hicieron frente a los asaltantes, estaban tan furiosos que lograron hacer correr los ladrones, que se llevaron el botín, los nerviosos regresaron a su domicilio. Decidieron interponer la denuncia penal y el hombre con ayuda de los vecinos, anduvieron buscando a los maleantes, de esta manera ellos aclararon el robo con violencia y los intentos de homicidio y violación, los policías municipales apoyaron a las víctimas, pero por más que le hicieron no los encontraron.

Les dijeron que le echaran ganas, el caso será continuado y seguirán buscándolos hasta debajo de las piedras, porque a estos mendigos cuando los capturen irán con todo para que se pasen un temporada, en la sombra a pan y agua, y aunque no sea cierto, les van a cargar la violación para que en el bote los encierren en la celda de los presos que no tienen derecho a visita conyugal.

EN UN JUEGO DE FUTBOL SE PELEARON

Los jugadores del equipo de futbol ITESM (No sé que quiera decir, pero ustedes sigan leyendo) es del Estado y jugaron en la cancha de la Martinica que se encuentra en San Nicolás El Chico, con el equipo de Tulancingo. Se soltó una bola de madrazos, patadas rasguños y manazos, no faltaban las mentadas de madre, y algunos fueron fauliados. Reportaron a varios lesionados.

Pero vamos a la nota: Una fenomenal riña terminó con un partido de futbol entre espectadores, jugadores, ambas porras, árbitros, mujeres, hombres, niños y niñas. Ana Perla Ortega Sánchez y Jaime Islas Roble acudieron ante el personal del Ministerio Público de Tulancingo para denunciar las lesiones, amenazas y todo lo que resulte, dijeron que el culpable se llama Rubén Ayala, “¿Será El Ratón?”, quién sabe, así como a los jugadores, porristas, espectadores del equipo que estaban calientitos y la hicieron gacha.

En un escrito precisaron que el partido correspondió a fase estatal Benito Juárez, que es la Liga Hidalguense sub 17 y comenzó a la salida de la cancha, y un viejo del equipo de ITESM ofendió con palabras a un jugador del equipo de Tulancingo.

El futbolista hidalguense le respondió de igual manera, y le dio un manotazo que le brotó la saliva, pero sin alcanzarlo, el porrista lo sigue en toda la cancha hasta agredirlo, y se armó la cámara húngara, Jaime Islas, profesor y entrenador del equipo de Tulancingo, intervino para calmar los ánimos, pero fue mandado al suelo por uno de los integrantes contrarios, cayendo levantado las patas, luego le dio una patada con todas sus ganas, que sonó a bote viejo en el riñón, fue tan duro el patín, que orinó sangre.

Cuando Ana Perla intervino porque entre tres estaban madreando a uno de su hijos, también se la llevaron al baile, la tiraron de un jalón de greñas y le dieron caballo, ella identificó a no de los jugadores del equipo ITESM de apellido Romo. La víctima aseguró que a su cachorro le aplicaron la llave china y otro llegándole por la retaguardia, le dio un tope en la cola que lo aventó y cayó de pura cholla, que se les sumió y no pudo pararse, que identificó a los que traían los números 8 y 43 del equipo contrario.

Rubén Ayala participó en la madriza y les hicieron muchas ofensas al decirles que son Nacos, que están jodidos, rancheros, nahuales, patas rajadas y pobres.

Cuando se retiraba, un padre de familia de ITESM que estaba borracho, les gritó que los iba a cargar el Payaso a todos los de la escuadra de Tulancingo. Por los acontecimientos, Islas y Ortega decidieron interponer la denuncia penal y que se proceda legalmente contra todos los que iniciaron la pelea y los que también le entraron a los catorrazos, porque para la otra que vengan los van a estar esperando todos los de la colonia y antes de que inicie el juego les van a dar en la madre.

AL MAL PASO HAY QUE DARLE GERBER

Una mujer de nombre Leocadia Ríos y su hijo de 10 años caminaban por una vereda, se le terminó el camino y se fue al fondo de una barranca de 13 metros de altura, donde quedo muerta, fue rescatada 12 horas después.

Fue horrible, fue horrible, la muerte que encontró la mujer al caer a la barranca en un río, cuando caminaba con su hijo de 10 años, por la oscuridad de una noche, rumbo a la casa de sus padres, en la sierra hidalguense, el niño al ver que su jefa había desaparecido, venció el miedo de que le saliera algún coyote o el coco, y siguió su camino él solo, entre veredas, más de 3 horas, hasta que poco antes de las 12 de la noche encontró un lugar donde pidió ayuda, avisándoles del accidente que había sufrido su mamá. Esta tragedia ocurrió en el lugar conocido como Malila, entre las comunidades Noloalco y Coatitlamixtla, municipio de Zacualtipán.

La infortunada Leocadia Ríos Yáñez, de 49 años de edad, según dio a conocer su inconsolable hijo Jorge Ramos Ríos, que lo trajo de la ciudad de México donde tenían su domicilio. La intención era que ella visitara a sus padres, con sus abuelos y demás familiares que viven en la comunidad que ya les dije. Relató que llegaron al municipio de Zacualtipán, bajaron del autobús comenzado a caminar rumbo a su destino, pero los sorprendió al noche, se explicó que madre e hijo tomaron la vereda del camino para cortar distancia, de pronto Leocadia se tropezó cayéndose al fondo de una barranca, se golpeó muy fuerte en diferentes partes del cuerpo, terminó dentro del río.

Le gritaba con todas sus ganas a su mamá, y al ver que no le contestaba, trató de bajar por ella entre la maleza, pero el miedo por lo peligroso y difícil del terreno, lo obligó a que se regresara al camino. Se aventó tres horas a golpe de calcetín para llegar a un poblado, pidió ayuda, ahí se comunicaron con la comandancia de policía de Xochicoatlán.

Se iniciaron las labores de localización en la madrugada, pero la mujer no fue encontrada por la oscuridad, hasta las 8 horas del día siguiente, vecinos autoridades, policías estatales y municipales, paramédicos, Protección civil lograron dar con el cadáver de la mujer, que estaba sobre unas rocas.

Se pidió la intervención del Ministerio Público de Molango, quien acudió las diligencias de rigor y dio inicio a la averiguación previa. Se dijo que por las condiciones del río, fue muy difícil y prolongado rescatar el cuerpo de la mujer, al que le hicieron la necropsia de ley para identificar las causas de su muerte.

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