LE SEGUIMOS LA TOS AL GATO
El lunes pasado les conté que en la calle Fernando Soto 302 de la colonia centro, en Pachuca, una señora llamada Yuridia llamó al 066 y les dijo que adentro de la vecindad estaba un muerto, la policía no le creyó porque llega el 1 de noviembre, pero se presentó a ver qué pez.
A los uniformados se les enchinó el cuero al ver un esqueleto, y le preguntaron a la mujer que si era su familiar o lo conocía, y les respondió que sí, que se llamaba Delfino Rendón Téllez, de 77 años, quien era la pareja de su abuelita, y tenía mucho tiempo de no visitarlo y ahora que fue, así lo encontró.
Los rescatistas y la policía hicieron lo suyo, dijo el MP que determinarían la causa de su muerte pero, a ojo de buen cubero, se vio que era de muerte natural; se lo llevaron, cerraron la casa, y todo quedó en investigación.
Vamos a conocer la segunda parte donde están investigando la muerte del ruquito, dicen los del servicio médico legista que tenía más o menos dos años de muerto. Una vecina reclama el cadáver y ya está viviendo en la casa donde murió Delfino.
Pero vamos de nuez con lo mismo, porque así debe de ser una nota para que no los hagamos bolas. En avanzado estado de descomposición fue encontrado un cadáver que dijo una mujer, que era el novio de su abuelita y tenía el nombre de Delfino Rendón Téllez, estaba en el interior de su domicilio.
El personal de Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado no pudo determinar la causa de su muerte durante las primeras diligencias de ley. Pero hacen las investigaciones para saber si fue muerte natural o se lo echaron al plato.
En apariencia el hombre no tenía familiar alguno, vivía como perrito sin dueño, y se sabe que desde hace dos años los vecinos no lo veían salir de su casa; para que no se les haga bolas el engrudo a los que llevan el caso, la procuraduría ordenó estudios de antropología forense para determinar qué es lo que sucedió al señor.
Sin embargo, llama mucho la atención que de la noche a la mañana aparecieron los familiares. Una vecina de nombre Yuridia Jazmín Acevedo Hernández, quien reclama el cuerpo, es la mujer que avisó a la policía de su muerte, el sábado pasado, y dijo que el señor le andaba dando para sus tunas a su abuelita.
El domingo, o sea al otro día que se lo llevaron, limpió la vivienda y la mandó a pintar y ya vive en ese lugar a pesar de que la Procuraduría General de Justicia mantiene abierta la carpeta de investigación para saber la misteriosa muerte de Delfino Rendón Téllez.
Los vecinos cercanos que lo conocían y sabían cómo vivía, dicen que se les hace muy raro que nunca vieron extraño en la vivienda, mucho menos el mal olor que delatara la presencia de un cadáver en putrefacción. Dijo uno de ellos: “A don Delfino lo dejamos de ver desde hace dos años, pensábamos que se había ido a vivier con algún pariente, por eso no sospechamos nada malo, hasta la mañana del sábado, que notamos el movimiento de patrullas frente a la casa y supimos la noticia”.
Lo único que saben es que vivía solo, que era primo de la esposa de un ex procurador, pero lo que más les intriga es que nunca lo iban a visitar.
Con este caso los agentes y peritos de criminalística nos van a demostrar su capacidad para resolverlo; por lo pronto les digo que no se pierdan el próximo capítulo de la muerte de don Delfino Rendón, porque va a estar de pelos.
UN VIAJE AL FONDO DEL INFIERNO
Dicen que le vieron la cola al diablo. Asaltaron un taxi, en forma de película de acción, que hasta les sudó la cola a los viajeros. El chofer llevaba tres pasajeros y dos más que se subieron y resultaron asaltantes. Cuando le enseñaron la pistola al chofer, abrió la portezuela y se aventó en plena marcha.
Uno de los maleantes logró controlar el coche Nissan verde y blanco, los famosos chapulines metropolitanos. Despojaron de sus pertenecías a los pasajeros, los bajaron y los dejaron abandonados, escapando entre la oscuridad de la noche. Pero vamos a ver qué es lo que pasó.
Las autoridades policíacas de Zacualtipán, a las 8 de la noche tuvieron la noticia de que Anastasio Olvera, de 42 años, quien trabaja como taxista en Pachuca, acababa de ser asaltado por dos malandrines. Explicó el trabajador del volante que acudió a la Huasteca a dejar un servicio y de regreso, tres personas le pidieron que los llevara a Pachuca, pero al llegar a la altura del crucero de Teanguistengo, don personas más le hicieron la parada, se detuvo y les preguntó adónde iban.
“Vamos a Pachuca, ¿cuánto nos cobras?”. Tras ponerse de acuerdo con el precio, lo abordaron y siguieron su camino. Por la comunidad de Piedras Negras, municipio de Zacualtipán, el ruletero fue amagado con una pistola por los dos que iban adelante con él, quienes le ordenaron que se metiera en una terracería.
El chafirete sintió mucho miedo y se jugó el cuero, aventándose del carro, y los delincuentes se siguieron con dirección a Molango llevándose a los tres pasajeros, a quienes despojaron de sus cosas y los bajaron a madrazos, en el crucero de la Plazuela.
Cerca de las 9 de la noche los policías municipales de Zacualtipán sabiendo del asalto, ayudaron a los pasajeros e implantaron un operativo de búsqueda y localización del taxi. Cerca de dos horas después lo encontraron desvalijado, en la comunidad de Atopixco. Dos de los pasajeros, vecinos de Huejutla y Calnali, de 23 y 54 años, respectivamente, presentaron la denuncia; el otro pasajero no cree en milagros de que los agarren y les devuelvan su dinero y sus pertenencias. Se regresó a su tierra a pata, dijo que era lo más seguro. El agente del Ministerio Público de Molango dijo que no descansará hasta que localice a los ladrones.
MUCHOS ROBOS EN SUPER TIENDAS
Una mujer ex presidaria, era la que comandaba la banda de farderas, ladronas de tiendas comerciales del Estado de México y de Hidalgo. Fueron detenidas mediante un operativo, en los momentos en que se carranciaban una computadora de la tienda “Elektra”, en la Plaza Grande Sur, de Mineral de la Reforma.
Una mujer logró darse a la fuga dejando a los uniformados como el chinito milando por dónde se fue. La vieja que agarraron, dijo que se llamaba Daniela Ramírez Ramos, o también podían llamarla Consuelo Trejo Villegas, pero su verdadero nombre de pila es Laura Sánchez Navarro, de 40 años de edad.
Los investigadores buscaron en sus archivos y bancos de datos en el Distrito Federal, Estado de México e Hidalgo, y resultó una pájara pinta con antecedentes penales en todos los estados. Su cómplice se llama Emmanuel Rojas Rodríguez, de 29 años y estaba asegurado dentro de la tienda por vigilantes, pues lo agarraron cuando esperaba que las mujeres salieran con la mercancía robada, con el motor prendido de un taxi Atos con placas del Estado de México.
Pero todo pasó así, los policías recibieron una llamada de parte de la encargada de la tienda, que despertó a los uniformados, les dijo que dentro de la tienda detectaron a una mujer desconectando una computadora que pretendían sacar sin pagar. Fue cuando mandaron a los gendarmes de base y a los tecolotes de la metropolitana, y capturaron a Daniela Ramírez Ramos, mientras que los demás se les escaparon a los gendarmes en sus bigotes.
Los detenidos soltaron la sopa y dijeron que es la primera vez que venían a Pachuca pero como vieron que todo es un desmadre porque están arreglando el centro y hay policías y calles cerradas, mejor se fueron al municipio de Mineral de la Reforma, pues su objetivo era robarse cada uno una computadora, pero les falló, porque una de ellas se tropezó y la tiró, ya que estaba conectada y por jalarla hizo un corto, llamando la atención a todos y cuando quisieron escapar, ya había demasiados cuicos.
POR UN PELITO DE RANA MATA A SU RIVAL
Un chisme terminó en un pleito que por poco termina en tragedia, cuando dos hombres se enfrentaron en una discusión, se insultaron y luego se maldijeron, se la mentaron y salieron a madrazos; uno de ellos sacó una navaja y lastimó a su rival, que está grave.
Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana en pleno centro de la comunidad de Téllez, perteneciente al municipio de Zempoala. Mauricio Abad Elizalde, de 18 años y Leonardo León, de 30, se dieron en la madre resultando Leonardo, que no le sirvió el apellido, con muchos agujeros en el cuerpo. Eso fue por problemas personales que tenían arrastrando desde hace mucho tiempo, hasta que no se enfrentaron cuerpo a cuerpo, pero como el otro estaba más grande, el joven sacó su navaja y lo ensartó. Se lo llevaron, y ahora está lo canijo para que salga porque si se muere, a León le espera una condena por picudo.
NOTAS CHIRRIS
AGARRAN A DOS VENDEDORES DE DROGA
A dos narcomenudistas les dieron para adentro por andar vendiendo la marihuana y cocaína. Carlos Bautista, de 18 años, la vendía a los estudiantes de bachillerato de la colonia 11 de Julio, que se ponían locos bailando y hablando tonterías y luego, muy valientes, se les ponían a los ex mineros, que les daban en la madre. Uno de ellos declaró que es vecino del barrio La Violeta, calle Reforma, en Pachuca; y el otro sonso de nombre Pablo Balam, de 28 años, vecino de Veracruz, donde hacen su nido las olas del mar, traía bolsas con cocaína, 5 gramos de polvo blanco. Quedaron encerrados y dijeron que ese es su negocio, porque no hay trabajo.
VENDÍAN MARIHUANA Y COCAÍNA
No cabe ni la menor duda que en el Estado de Hidalgo existe droga al por mayor, algunos se le han adelantando al ex presidente Fox y la siembran porque es muy productiva y deja muy buenas ganancias a los que la venden. En la zona comercial “Galerías Pachuca” encontraron los gendarmes a dos tipos que vendían marihuana y cocaína. Uno de ellos se llama Prisciliano Eliut Solís Cuna, de 21 años, del municipio de La Estanzuela, municipio de Mineral del Chico, quien dijo ser operador de tráiler, adicto a la marihuana, y que le vendió un buen de droga a Juan Manuel Martínez Martínez, pues ambos son viciosos de profesión, y fueron a dar al bote, uno por vendedor y el otro por fumador. Ellos están muy tranquilos porque aseguraron que pronto los van a sacar.
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