LA MADREÓ SU SUEGRA Y LA CORRIERON

María Cornejo Jiménez de 25 años de edad, llorando como Magdalena, fue a poner una queja ante el Ministerio Público en contra de su suegra y su viejo, que le echaron montón y la agarraron a madrazos; le quitaron a su hijo, la cargaron entre madre e hijo y la aventaron a la calle, que rodó por la banqueta y atrancaron la puerta.

Dijo al agente social que ella es de Tezontepec de Aldama, que trabajaba en un taller de costura y junto con otras amigas pagaban un departamento en la calle de Hidalgo en Pachuca. En una fiesta conoció a Israel Chávez, que con mentiras y cariños se le fue metiendo en el corazón. Se hicieron muy buenos amigos y a través del tiempo se casaron, pero como no tenía en qué caerse muerto su marido, la llevó a vivir a la casa de su mamita, Jerusalén Chávez.

La señora era viuda y vivía en el callejón de Zarco en el barrio de Puerto Rico, era una mujer chaparra, gorda, panzona y chismosa, algunas de las vecinas a sus espaldas le decían “La Alacrana”, porque tenía el veneno en la cola. Desde el principio se dio cuenta que ella le caía a la vieja como mentada de madre y comenzó a hacerle la vida de cuadritos. Le contaba a su hijo las veces que salía y entraba, y le decía que ya tenía amigos en el barrio.

Así pasó el tiempo, tuvieron un niño. La madre, cuando llegaba su hijo le decía que su mujer no le ayudaba para nada, se la pasaba acostada con la criatura y que no barría, sacudía ni trapeaba, y exigía que le diera de comer.

Cuando su marido Israel le llamó la atención, tuvieron un fuerte problema porque le dijo que era al revés, ella se la pasaba desde la mañana en friega loca y la vieja estaba de comadre con las vecinas, y cuando iba a llegar volvía a limpiar para que su hijo viera cómo trabajaba. Le pedía que le dieran permiso de regresar a su trabajo y buscaran una casita para vivir felices. Pero él le contestaba que no podía dejar a su mamá, en el lecho de muerte le prometió a su padre cuidarla, y que no le faltaría nada.

La pobre de María lloraba que las lágrimas se bebían, pero tenía que aguantar vara. Dice un dicho que al que madruga Dios le ayuda, pero en esta ocasión le fue muy mal a María, a las 6 de la mañana ya estaba en el lavadero, escuchó el chillido de su chamaco, fue a darle su chichi pero no sabía que el que se va a la villa pierde su silla. Cuando regresó, en su lugar ya estaba lavando su suegra, Jerusalén Chávez Islas, le había aventado su ropa al suelo, y se la quedaba mirando, lista para soltarle un soplamocos en caso de que protestara.

María la levantó y le dijo que ella estaba lavando, que nada más fue a darle de comer a su bebé, su suegra ni la peló, por el contrario, meneaba las manos y las nalgas al lavar y la salpicaba de agua. Comenzaron a discutir diciéndose de cosas, sacándose sus trapitos al sol, que por poco se desgreñan.

La señora María estaba como agua para pelar pollos, estaba a punto de darle un madrazo a su gorda suegra, pero la salvó la campana porque en ese momento llegó su hijo, Israel Chávez. Su mamita le dio la queja, que su vieja le había faltado al respeto, le echó de su cosecha diciéndole que le mentó la madre y le había dicho “Bola de Cebo”.

Israel metió a su esposa de las greñas a su casa, le llamó la atención dándole sus cachetadas, le gritó que a su suegra la había de respetar como si fuera una segunda madre, la señora entre chillidos dijo “mejor burro”. Su viejo se calentó y le dio un chilacatazo en la nariz, que se la sangró, salio llorando al patio, se acercó a los lavaderos y al ver que su suegra se carcajeaba, le dio una cachetada que le volteó la cabeza, la vieja se fue para atrás y cayó de nalgas levantando las patas.

Fue cuando Israel tomó cartas en el asunto, la volvió a meter a su casa, le dijo que recogiera sus cosas y al escuincle, la iba a llevar a la casa de sus padres, como le hicieron a Martina. María le explicó que la que comenzó la camorra fue su madre, que es una chismosa, que le va a pasar lo que a Pinocho por mentirosa, pero en lugar de crecerle la nariz le va crecer el hocico.

Israel le acomodó otros madrazos, le dijo que ya no recogiera nada, que se fuera así como estaba y la sacó a patadas. La señora se salió llorando, les mentó la madre, les dijo que ella se va para su pueblo en Tezontepec de Aldama, que a su señor y a la vieja de su madre los va apuntar en la lista de los mendigos, y se salió acariciando a su chiquito.

Pide a las autoridades que por ningún motivo quiere que su esposo se acerque a ella o al niño, que ella se encargará de que no le falte nada, y que le digan que se quede a jugar como lo hacen los gatos chiquitos, con la cola de su madre.

COMENZÓ CON UNA RIÑA Y HUBO UN MUERTO

Cuando estaba escribiendo una nota se me enchinó el cuero, porque aparentemente mataron a golpes a un tipo en el interior de una habitación, la cual tienen como bodega. Según dicen las malas lenguas que esto ocurrió en la madrugada del lunes, en la avenida central de la colonia Minerva del municipio de Mineral de la Reforma.

Los vecinos encontraron un cuerpo ensangrentado que parecía que lo habían pintado de rojo, y tenía las patas de fuera con el zaguán abierto. Dieron parte a las autoridades, que no se tardaron en llegar y acordonaron la zona, los socorristas de la Cruz Roja, así como los uniformados estatales, fueron los primeros en llegar a ver qué pez.

Poco después llegó el agente del Ministerio Público con los peritos de criminalística y sus agentes investigadores, realizaron las diligencias de rigor. El sitio del crimen estaba cerca de un internet y un taller mecánico con el nombre de Díaz; se dijo que el muerto iba vestido con pantalón de mezclilla color gris, playera amarilla y tenis color blanco.

Dijeron los especialistas en estos biznes que se lo echaron al plato a golpes, principalmente en la cabeza, dijo uno de los curiosos que ese lugar lo utilizaban como punto para reuniones y chupar bebidas espirituosas, y también consumían drogas. Dentro del cuarto había un sillón viejo con mucha basura y grafiteado.

Esto dio a suponer que a lo mejor se aventaron un cayo todos contra todos, y al final al que le tocó bailar con la más fea fue Sergio Escárcega Bautista. Lo anterior no fue confirmado porque hasta la tarde del miércoles no se había presentado ningún familiar a reclamar el cuerpo.

A las autoridades se les hizo bolas el engrudo, es un misterio, nadie sabe nadie supo. Por las moscas se dio inicio a la carpeta de investigación, andan preguntando a los vecinos cómo fue el hecho, que si los conocían, y si se juntaban, por qué no avisaron a la policía. Esperemos el desenlace de este capitulo y ojalá pronto resuelvan esta bronca, aunque está pelón.

UNA PARRANDA LARGA TERMINÓ EN LA BARANDILLA

Unos borrachos automovilistas tuvieron un impresionante accidente en el cruce de los bulevares Panorámico y Everardo Márquez en Pachuca, terminaron en el Hospital General, y uno de ellos en las mazmorras.

Se dice que corrían a toda velocidad, sin ninguna precaución y como iban alcoholizados les agarró la mano el chango, y se fueron a estrellar contra un poste de señalamientos tipo bandera cerca de las 7 de la noche del lunes pasado. Llegaron los de protección civil, Cruz Roja, junto con sus hermanos de la policía municipal y le dieron los primeros auxilios al conductor que fue el más amolado, se llama José Espinosa Mejía y a su compañero de parranda, Faustino Herrera Cruz, de 52 y 53 años de edad respectivamente.

Hubo una aclaración para no hacernos bolas, Faustino fue el que quedó herido y se lo llevaron al Hospital General, mientras que al conductor se lo llevaron a la barandilla, porque se encontraba hasta las chanclas, y el coche fue remolcado al corralón.

SE METIÓ A UNA CASA QUE NO ERA SUYA

Un borracho que se pasó la noche del grito chupando, fue descubierto en el interior de una vivienda que no era suya, alarmado el propietario del inmueble pidió auxilio a la policía y lograron detenerlo, resultó ser un ratero, porque con esta son tres veces que se mete a robar, y cuando lo descubren se hace el loco.

Hugo Cabrera Mejía de 25 años de edad, es el presunto ladrón que fue puesto a disposición del Ministerio Público de Molango, los uniformados fueron alertados que un desconocido se metió en una vivienda en la calle de Francisco I. Madero del barrio de Santa Cruz, en ese municipio.

Los uniformados llegaron al lugar con su carabina bajo el brazo, con el dedo en el gatillo, listos para jalarlo y darle en la madre al cacomiztle, los esperaba en la puerta el dueño del hogar allanado. Dijo que el borracho rompió el vidrio de la ventana, lo sorprendieron cuando agarraba una televisión y se la quitaron a madrazos, dijo el señor que seguido se mete y cuando lo descubren dice que va a ver la comedia “La vecina”, y que se sigue con “A que no me dejas”. Los gendarmes se lo llevaron, no quería salirse, le dijeron que ahora en las galeras gracias a los de la Comisión de los Derechos humanos los detenidos tienen televisión y un horno para hacer palomitas.

YA NO QUISO ESTAR EN ESTA VIDA Y SE MATÓ

Esto que les cuento sucedió en Zapotlan de Juárez Hidalgo. Cuando les avisaron a los uniformados que una persona se había dado un escopetazo, llegaron acompañados de los socorristas de la Cruz Roja, quienes al revisarlo dijeron que todavía tenía signos vitales, rápidamente se lo llevaron al ISSSTE pero falleció en el camino.

Dijeron sus familiares que el suicida cumplió su cometido. El domingo en la tarde, eran como las 6 cuando dieron aviso a las autoridades y a los cuerpos de socorro de San Pedro Huequilpan, reportaron una detonación de un arma de fuego en un domicilio, rápidamente se presentaron los de Protección Civil para ver si eran cohetes y decomisarlos.

Pero encontraron tirado a Fráncico Manuel Montaño de 25 años de edad, al parecer se había quitado la vida. En las investigaciones dijeron que para lograr su fin agarró una escopeta calibre 7.47, la colocó en su cabeza y jaló el gatillo. Al sitio acudieron el agente del Ministerio Público con toda su gente, peritos en criminalística, agentes de la coordinación de investigación, uniformados de la municipal, estatal, protección civil, los bomberos y mucha gente que se les pegó a ver qué es lo que había sucedido.

Cuando quisieron hacer las investigaciones, todos hablaban al mismo tiempo que no se les entendía ni madre, y para evitar broncas los representantes sociales decidieron entregar el cuerpo a sus familiares, y con toda la gente que estaba ahí que lo velaran.

gatoseco98@yahoo.com.mx