SE ECHAN AL PLATO A UN GERENTE

Le pasó lo que a Rosita Álvarez, nomás tres tiros le dieron. Nadie sabe, nadie supo, es un verdadero misterio. Los policías anda dando de vueltas como quijotes, no saben por dónde comenzar a investigar la muerte de Manuel Vázquez, de 47 años de edad, vecino del fraccionamiento que se encuentra en  Mineral de la Deshonra (perdón) de Mineral de la Reforma, a quien le dieron tres plomazos, uno en la cholla, otro en el tórax, y el último en la barriga, en las instalaciones de la empresa Infra, donde encontraron el cadáver el sábado y se dice que fue como a las 5 de la mañana.

El velador, al ver que todavía estaba vivo, pidió la ayuda a la policía, como a las 5 y media, llegaron los de Protección Civil a la calle Oriente de la Zona Industrial de Tizayuca, pero nada pudieron hacer porque ya había colgado los tenis, se encontraba debajo de la caja de una camioneta Nissan, tipo estaquitas, placas de circulación HJ-00948 que estaba estacionada en el patio de la empresa.

La noticia corrió como reguero de pólvora, llegó su esposa, la señora Blanca García, quien lo identificó, lo miró varias veces y dijo que sí era; les contó a las autoridades que tenía muchos amigos, no tenía enemigos.

Dieron fe del cadáver, lo trasladaron al Servicio Médico Forense (Semefo) y ahora está en su manos de los agentes de la Coordinación de Investigación, que no saben cómo llegar con los mata gerentes, eso se llevará unos meses, porque es el mes patrio, tienen que estar al tiro  en el “Grito” porque está cañón para dar con los asesinos. Todavía están discutiendo que la muerte del gerente pudo haber sido la noche del jueves, o a lo mejor el jueves en la madrugada, todavía no se ponen de acuerdo.

LE QUIEREN QUEMAR SU CASA

La señora Elizabeth Espinosa anda muy espantada, camina mirando para todos lados,  por un pelito de rana se ha salvado de que la lleve de corbata algún taxista, que manejan como locos, esto se debe a que la han amenazado, que le van a poner una bomba, y su casa quede en cenizas, le cobran una deuda que ya pagó desde hace tiempo.

No faltó quien la aconsejara que fuera a poner su queja a las autoridades, en contra de José “J” que este señor en forma gacha, la ha puesto como lazo de cochino, diciendo que había defraudado la confianza de su madre “Irene”  porque no le quiere pagar un préstamo de 20 mil chuchos que le prestó, explicó la señora Elizabeth que  eso es falso, ya le pagó a la señora hasta la risa.

El chango marango, la anda quemando entre sus amistades, poniéndola como droguera. La mujer dice que efectivamente, el 4 de julio del 2014, firmó un documento (pagaré) por la cantidad de 20 mil chuchos que le prestó la señora Irene, que la mujer le tiene una gran confianza, que cuando le entregó el dinero le dijo que no le firmara nada, que su palabra era ley.

Sin embargo ella quiso firmarle para que se hiciera un compromiso legal, desde entonces cada mes le daba mil pesos, en el de diciembre le entregó 5 mil pesos y en julio del 2014, otros 3 mil, después tuvo una bronca que se atrasó, pero meses luego, se puso al corriente.

Antes de las vacaciones de Semana Santa, solicitó un préstamo al banco de 13 mil pesos y le pagó lo que le debía, cubriendo todos los intereses moratorios, en presencia de una vecina de nombre María del Pilar Hernández. Por cierto cuando le entregó el dinero, la señora le dijo, que se los diera después porque había pajaritos en el alambre, ahí estaba su hijo Cuauhtémoc, y no quería que se enterara del préstamo.

La señora Elizabeth dijo que le sorprende la actitud del hijo, que no tiene vela en el entierro, le cobra totalmente la cantidad del pagaré, incluso la amenazó de que si no le paga le va a quemar su casa, y  que a todos los iba a contar que es una vieja tranza que no paga, y lo ha cumplido, porque cada que la ven le cantan la canción “Toma chocolate, paga lo que debes”.

Ella tiene temor porque el señor se ve que quiere cumplir lo que le dice, y tiene miedo de que queme su casa con todo y su familia adentro, en esa colonia no hay  agua para apagarla, dice el director de Caasim que los de las minas se la venden muy cara y de su bolsa tiene que pagar dinero.

MISIÓN CUMPLIDA

Adrián Ricardo Hernández acusó a su vieja de dejarlo hasta sin calzones, todo se llevó, dejó la casa vacía. Comentó que lleva varios años viviendo con su concubina  Adriana Berenice  Trejo, en la calle de Tabachines, colonia Campestre Villas del Álamo.

Tuvieron un disgusto que llegaron a las mentadas de madre, a los jalones de greñas, cachetadas, y sus derivados, la mujer llorando de rabia, le dijo que se iba a llevar todo lo de la casa, y se iba a vivir con su jefa.

Adrián soltó la carcajada, le dijo burlándose: “Llévate todo vieja babosa” la aventó en la cama, y se salió riendo. Adrián estaba seguro que su vieja no sería capaz de llevarse sus cosas, no tenia adónde ir. En la noche, cuando llego de trabajar, sintió un escalofrío y un sudor en la cola, al ver la casa completamente vacía, no le dejó ni la escoba, de pilón se llevó al gato.

Adrián enojado fue a acusarla de robo, porque solo lo dejó con la ropa que traía puesta. En la puerta estaba un recado que decía “Misión Cumplida” y le mentaba la madre.

La buscó en todas partes, en la casa de su madre, y no la encuentra. Les pide a las autoridades que la busquen y la metan al tambo por ladrona. Mientras tendrá que dormir en el suelo como cualquier animal.

LOS LADRONES SE SURTIERON

Amparados por la oscuridad, la falta de vigilancia, y el sueño pesado de los moradores, los ladrones hicieron de las suyas, entraron a una tienda de abarrotes llamada “San Francisco”  llevándose toda la mercancía, aparatos eléctricos, y dinero.

Cerca de la medianoche, a los ladrones les daba miedo entrar a la tienda, por los fuertes ronquidos de los dueños, pensaban que ahí había leones con sus cachorros, y sintieron temor. Pero su profesión como ladrones, les hizo jugársela y abrieron la cortina para que se salieran los leones, pero se dieron cuenta que toda la familia roncaba.  

Se dieron a la tarea de robarles sus cosas, se llevaron una televisión, una báscula, pan, azúcar, frijoles, arroz, en fin toda una despensa en cantidades. Así como entraron a robar se salieron dejando la cortina a la mitad. La señora María Magdalena Cabrera se levantó para despachar, al ver que no había nada  de mercancía fue a hacer formal denuncia, y dijo que la tienda es de su esposo,  se duermen temprano, cierran por dentro y por fuera, que no se explica cómo los robaron, si al menor ruido despiertan; pide que vigilen ese lugar porque hay mucho vago.

LES RASURARON LAS NALGAS

Hemos visto que a mucha gente no le gusta atravesar por los puentes peatonales, y eso ha ocasionado atropellamientos en varios puntos de la ciudad. Una pareja de enamorados acostumbraba caminar pegados como gusanos, la mujer va adelante y él atrás, sin subirse al puente que está a la entrada de la colonia 11 de Julio, y cuando se atravesaron caminado, un coche le rasuró las nalgas al novio, aventándolos contra el muro y cayendo encimados. Juana Hernández, de 19 años, y Jorge Pérez, de 20, del madrazo quedaron desmadrados, pero él no la soltó.

Uno de sus parientes y amigos que vieron lo que pasó, se subieron en una carcacha del tío de Jorge y metiéndole toda la chancla, trataron de alcanzar al coche que los atropelló, que iba rumbo a Tulancingo, les llevaba mucha ventaja, sabían que era un Tsuru blanco. Pasaron como locos por el puente de Pachuquilla, y ahí los siguió una patrulla, que los detuvo en San Juan Tizahuapan.

Le dijeron al policía que iban tras un coche que atropelló a su sobrino y a su novia, pero el patrullero les dijo que no mamaran, si apestaban a puro alcohol, y se los llevó detenidos a Pachuquilla, mientras que la Cruz Roja trasladó a los atropellados al Hospital General donde están delicados, por caminar como tencitos en lugares muy peligrosos.

INVESTIGAN UNA EXPLOSIÓN

 Un supuesto atentado en la colonia Plutarco Elías Calles de Pachuca, en un taller eléctrico. Todo estaba en calma, de vez en cuando se escuchaba el ladrar de los perros, de  los maullidos de los gatos, y luego un silencio total; eran las 4 y media de la mañana, cuando de pronto, se escucho una diabólica explosión, que sacudió a toda la colonia, principalmente la Calle Dos.

Muchas gentes salieron de sus casas, corriendo a esconderse y mirando que no fuera a caerles un poste encima, como le pasó a un obrero en Ampliación Santa Julia y El Palmar. Llegaron los bomberos, Protección Civil, Guardias de Seguridad Nacional (perdón) los gendarmes de la policía municipal, de la estatal, y pusieron alertas a los agentes investigadores, lo mismo que a los soldados, por las moscas.

Pero el que no dejaba de temblar de pies a cabeza, era el señor Luis Antonio López, su vieja le había dado que se comiera un bolillo, y le comentó que no tomara agua porque se podía hacer más panzón que su jefa. Les explicó a las autoridades que estaba soñando con los angelitos cuando de momento, escuchó una fuerte explosión, que a todos los tumbó de la cama; salió a la calle, y vio que de su taller salía mucho humo, como los que echan los camiones del transporte público que no los verifican.

Dijo que los daños, a ojo de buen cubero, serían de más de 50 mil bolas. Después llegó Miguel Muñoz quien le renta el local, y resultó que solamente la que se madreó fue la cortina. Los vecinos se fueron a dormir y sólo se quedaron los del grupo de rescate. Les dijeron que fueran a poner su demanda, que se trataba de un atentado, que pudieron ser algunos de sus clientes que no han quedado satisfechos de su trabajo.

gatoseco98@yahoo.com.mx.