Un Infierno Bonito

SE TROPEZÓ
Una mujer dio el changazo en la Plaza Juárez. Se tropezó y cayó al suelo, nadie pudo ayudarla.

Ella pretendía cruzar la avenida Juárez, cerca de la estación del Tuzobús, donde se fue al valle de las calacas. Todo sucedió al momento en que bajó un escalón grande, medio se tambaleó y se fue en reversa, pegándose en la cholla contra el pavimento. Hubo mucho mirón, pero nadie se atrevió a darle la mano por miedo de que llegaran los gendarmes y les echaran la culpa de que la tiraron.
Poco después llegaron los socorristas de la Cruz Roja para echarle la bendición, porque no podían llevársela. Poco después llegaron los tecolotes y la echaron en una bolsa de plástico y se la llevaron. La mujer, más o menos tenía unos 50 años; vestía pantalón rosa, zapatos negros, cargaba una bolsa de plástico con alimentos.
Antes de que la metieran a una camioneta del Semefo, los policías acordonaron la zona. Los automovilistas se paraban para echarle un ojo y luego se seguían. El maravilloso trasporte del Tuzobus cerró las puertas y luego se peló para que no se la fueran a cargar, porque ya se los tienen fichados, que todavía no cambia la luz de siga y se adelantan. Eso ha pasado, ha habido peatones que  por un pelito se los llevan de corbata. Hasta el momento todo está como el Monje Loco: “Nadie sabe, nadie supo”, quién fue la señora que se fue al valle de las calacas.

YA VEN, LO QUE LES DIJE
Un Tuzobús se le fue encima a un taxi, lo bueno es que sólo hubo cuatro heridos leves. Según dijeron algunos de los mirones, que el taxista corría como piloto de carreras, y le quiso ganar el paso, pero a la mera hora se acalambró y le llegó el madrazo.
Esto sucedió antes de llegar a la estación Bicentenario. Esto ocasionó mucho estorbo, los automovilistas no dejaban de tocar su claxon, hasta que llegaron los policías y les dijeron que se callaran el hocico.
Llegaron los paramédicos con sus ambulancias, a echarles la mano; eran de la Cruz Roja, pero se escucha el rumor de que ahora son del Cruz Azul por orden de Obrador. Se llevaron a los heridos al Hospital General y los choferes que se dieron el madrazo se quedaron a ver cómo se pagaban sus golpes de sus automóviles, olvidándose de los heridos.

LOS PAQUIDERMOS YA NOS TIENEN HASTA LA MADRE
A parte de ser un estorbo, los que los cuidan se quieren pasar de listos. La vez pasada, en la céntrica calle Guerrero de Pachuca, se agarraron a madrazos un cuidador con un chofer. Alegaban porque debería pagar más. El otro le dijo que no mame, que fue unos minutos los que se pasó. Y mientras alegaban llegó una vieja greñuda a ponerle un candado en la llanta del coche, que le dieron un aventón cayendo de nalgas, parando las patas,
Llegaron dos patrullas llenas de cuicos y a punta de macana se lo llevaron al bote. Por eso les dijo que no nada más en la capital minera sino en todos los municipios. Tenemos como ejemplo en el Grito de Independencia. Todo estaba ocupado, fue a las 3 de la tarde. Varios gringos fueron mandados hasta casa los diablos porque todo lo del centro estaba a reventar.
Cerca de la calle de Doria llegó una camioneta gabacha y se estacionó cerca de la farmacia similares. Inmediatamente le llegó un uniformado y le dijo que estaba prohibido estacionarse ahí.
El gabacho le dijo que venía de Chicago. Le contestó el policía que más arriba había un estacionamiento con WC.
Pero vamos a regresarnos y llegar a Tepeji del Río. La regidora por el partido Nueva Alianza, Isela Soria Jasso, expuso a los cuatro vientos, durante la sesión de Cabildo, su total reprobación por las acciones del programa de paquidermos.
Pero la síndica jurídica Erika Pérez Castillo se sintió, pues dijo que le había echado de habladas porque ella había cancelado dos multas mal aplicadas a dos ciudadanos. Isela Soria dijo que uno de los integrantes de la asamblea quería que a huevo, y exigía manoteando, que el personal de Parkimovil le condonara las multas para evadir el pago del servicio.
Le echó una trompetilla y le dijo que los integrantes de la asamblea no tienen esas facultades, o que se sientan muy nalga cumpliendo su labor y promover las leyes.
Dijo que no se salgan del huacal, que solamente una multa ha condonado e intervino para que se bajaran dos multas más a una persona con dificultades diferentes, que de acuerdo con el reglamento ellas no pagan, y que la otra estaba cieguita.
Además, muy enojada, le dijo a su compañera que le explicara “por qué el policía en lugar de quitarle la placa, a pesar que el automovilista llegó corriendo con los pelos parados, para pagar, se había pasado un minuto. El policía se puso necio y le quitó la licencia de manejo, tarjeta de circulación y la placa, yo creo que se pasó de lanza el güey!
La denuncia hecha a un golpeteo político, que se había convertido en un asunto político, que se había convertido en un asunto personal, que se salieran y se rajaran la madre, o que aguantaran vara.
Hasta que Isela Soria solicitara más clara la información para hacer declaraciones ante la presencia de la asamblea. Con esto nos demuestra que todos los que están dentro de los paquidermos están jodidos, pero muchos ya andan haciendo bulla por quitarlos, y esperan con ansia al señor presidente de la República, en diciembre, para que quite a todos los que están ocupando la tierra del pueblo, que es de todos, no nada más de ellos.

FALLECIERON DOS PERSONAS EN TEPEJI DEL RÍO
Uno al parecer se suicidó y el otro se dio en su jefa en una motocicleta. Vamos con éste último. Las autorices competentes, más que en Pachuca, tomaron conocimiento de lo que ocurrió, para que le digan y no le cuenten.
El hombre que les digo falleció el domingo. Uno de los testigos lo vio con esos ojos que se van a comer los gusanos, que corría a toda velocidad, haciendo piruetas, y de momento se le apareció un curva en la carretera y se fue de filo a un voladero, que cayó sobre la banqueta, a unos 20 metros de altura.
Dicen que no pío dijo, y la motocicleta quedó hecha cachitos. Al igual que el que la llevaba.
Del suicida en su domicilio, dijo adiós mundo cruel. En la calle de Paraíso se reportó que se suicidó un joven. Su padre lo encontró colgado, lo regañó y le dijo que se bajara y como no le hacía caso, subió a un árbol y vio que estaba muerto. Todo quedó en suspenso, nadie supo por qué lo hizo. Llamaron a las autoridades para que tomaran parte, y colorín colorado.

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