SIGUEN LOS ABUSOS DE AUTORIDAD

Dos agentes de la Coordinación de Investigación, comisionados en Tulancingo, fueron denunciados, aunque muchas veces dicen que ellos no fueron, a nosotros nos piden que lo  publiquemos, y salen los de la Procuraduría General de Justicia diciendo que no fue cierto, y los asegunda la Comisión de los Derechos Humanos, y por quejarse, salen de Guatemala y entran a Guatepeor, es su palabra contra la de ellos.

Esta vez fueron denunciados por abuso de autoridad y los delitos que resulten en agravio del profesionista de la Delegación de Ixtacalco del Distrito Federal, Luis Alberto Trujillo García y Eduardo Yáñez Cervantes Chávez, y consta en la averiguación previa 1838- 2015, lo agredieron frente a sus hijos y en las oficinas públicas, junto a Eduardo Peralta, de 35 años de edad.

Los tres agentes de la llamada policía ministerial, no conformes con su mal proceder, todavía pusieron a disposición a la procuraduría de justicia a la víctima como presunto responsable de ultrajes a la autoridad, y lo mantuvieron esposado por muchas horas.

Después de que determinaron que hubo un delito, le pusieron una caución de 10 mil pesos, el agraviado decidió interponer  la denuncia en contra de los servidores públicos, identificados, esta es la explicación que da públicamente.

Dijo que el 13 de diciembre pasado manejaba su Nissan Tsuro, modelo 2014, acompañado de su tres menores hijos, procedentes del Distrito Federal, iban a Cuautepec, donde visitarían a sus familiares.

Por el rancho El Gallito de Singuilucan, estaba un retén de agentes y policías, le pidieron que se detuviera porque le iban hacer una revisión a su coche, luego le dijeron  que no había Pez, en ese momento llegaron los agentes, vestidos de negro, como si hubieran ido a un velorio, y uno de ellos gritando, les dijo que ese automóvil tenía reporte de robo.

Sorprendido Peralta, tuvo que acompañarlos, junto con sus chavos, a las oficinas de la policía que están  junto al Ministerio Público. Estando ahí Luis Alberto Trujillo, el agente le pidió las llaves, el profesionista se opuso,  le dijeron que quedaba detenido.

El agente se molestó por la negativa, se puso negro, y comenzó a echar madres, se le aventó como luchador rudo a Eduardo Peralta, y después de revisarle las bolsas, lo agredió junto con Eduardo Yhave cervantes, otro agente, lo tiraron al suelo. Los hijos del profesionista y varias personas que estaban  en las oficinas publicas, se dieron cuenta de la agresión  y cómo le quitaron las llaves del automóvil.

Lo remetieron a un separo, lo mantuvieron esposado por algunas horas, hasta que llego el papá del agraviado. Los Agentes lo pusieron a disposición del Ministerio Público, por ultrajes a la autoridad y le pidieron de multa 10 mil pesos para que saliera del bote.

Hasta el primer mes de este año, Eduardo Peralta quedo absuelto de toda culpa, y decidió acusar el abuso de autoridad en contra de Luis Alberto Trujillo, que era el jefe de los delincuentes (perdón) que era el jefe del grupo de la Cooperación, también pidió que se ejerza acción penal, conforme a derecho, en contra de Eduardo Yhave Cervantes, el profesionista dijo que  cuando sucedieron los hechos delictuosos el comandante era Vicente Monroy Ballesteros.

SE CAYÓ UN  PASTOR Y NI ADIÓS DIJO

Realizaba varios trabajos en Tezontepec de Aldama, porque por esos lugares no dan tarjeta para el hambre, y después de trabajar su jornada en el campo, salía a pastorear sus borregos, eran las 3 de la tarde del día jueves, cuando se le ocurrió subirse a una barda de mas de metro y medio de alto, para vigilar a su animales, porque sabe que por hay andan varios partidos políticos llevándose los animales.

Cuando estaba arriba, se puso la mano en la frente para cubrirse el sol, se descontroló y se vino abajo, de pura cholla, como no pasan vecinos por ese lugar, ahí se quedo tirado, una persona del pueblo lo vio y avisó a la policía, nos omitimos el nombre porque le pueden echar la culpa, dijo que se llamaba el muerto Silvino Ruiz Álvarez.

El personal que recibió la llamada dio la voz de alarma, y salieron dos  camionetas patrullas, llenas de cuicos, a ver qué Pez. Los elementos de la policía municipal de Tezontepec llegaron a la comunidad de Atengo, que pertenece a ese municipio, encontraron  a un muerto de avanzada edad, vestía camisa, chaleco gris, y pantalón de mezclilla azul, a un  lado estaba su sombrero de palma.

Los uniformados solicitaron la presencia del Ministerio Público del municipio de Tula de Allende, Hidalgo, horas después llegó con sus agentes de criminalística de campo y los elementos de la Coordinación de Investigación grupo Tula, dio el banderazo, y comenzaron a levantar el cadáver para su traslado al Semefo y practicarle la necropsia de ley, les dijeron que murió del madrazo que se dio en el coco, porque se le sumió la cabeza.

Por ahí estaba un campesino que le rezo y le puso una imagen de la Virgen de Guadalupe, le preguntaron que si lo conocía, dijo que no, él vive en Tula, como lo dejó el camión, tuvo que aventársela a pata rodeando el cerro, al cadáver se lo llevaron al anfiteatro, se espera que algún familiar llegue a  reclamarlo, por las moscas contaron los borregos.

UNA FAMILA QUEDÓ INTOXICADA

Se echó en el pelo una sustancia para darle en la madre al piojo, pero no nos referimos al entrenador de la Selección Mexicana,  sino a los piojos de de veras, pero vamos a ver la nota, donde se dicen que la familia se contagio de piojos, y quién sabe qué tanto se echaron con el riesgo de quedar pelones, y obtuvieron una gran intoxicación en la cholla.

Los 5 integrantes de la familia llegaron a la Cruz Roja de Tulancingo, Hidalgo, a solicitar la atención medica, que al parecer varios de los parientes estaba piojosos y se contagiaron de inmediato, les echaron una sustancia sin decirles qué era.

Más tarde se metieron a bañar, algunos integrantes de la familia perdieron el conocimiento, y de inmediato los llevaron otra vez a la Cruz Roja, por fortuna todo quedó en susto, y no ameritaron o no quisieron que se quedaran para no contagiar a los internos, al personal de la institución, o a los paramédicos. Porque si no podrían ser una epidemia de piojos.

Aunque hay que hacer caso de las palabras del presidente Peña, que una vez dijo en los Pinos, cuando regresó la selección de Brasil, que todos los mexicanos deberán sentirse orgullos de tener un  piojo. La jefa de enfermeras, que es una señora bastante grande pero se las sabe de todas, les dio un remedio casero para evitar que se sigan llevando de piojos, y este es el remedio.

“Cuando haga mucho calor, pongan a los que están piojosos en los rayos del sol, después compren una botella de bebida, un ron o brandy o de jodido una tequila, úntenselo en la cabeza al que tenga esos bichos, como si la  lavara, que el alcohol penetre en todo el cuero cabelludo, después ya cuando estén sudando, échenles un  puño de arena, y verán cómo se termina ellos solos, al sentir el calor del sol, los piojos toman el licor y se emborrachan, luego se pelean entre ellos, y con la arena se agarran a pedradas, hasta que se matan”.

LES CAYERON EN LA MERA MOVIDA

Los uniformados tiene la misión de ir por todos los ordeñadores y de un solo madrazo terminar con ellos, en los municipios han hecho rondines de día y noche, y les ha dado frutos, porque los caen en la maroma, o dejan abandonados los camiones, esta ves les cayeron como aboneros en quincena a tres que robaban de un ducto clandestino, que no les dieron  chance de montar en su caballo para pelarse.

Uno estaba agarrando la maguara, otro estaba llenando los contenedores, ya una camioneta estaba llena y llegaron los uniformados, con agentes, y con todo, se los llevaron a la mazmorras, con dos mil 100 litros de gasolina y dos camionetas, pero vamos a ver la nota, para que estemos enterados cómo fue y dónde paso lo que están leyendo.

Los uniformados que daban una revisión por el rumbo del municipio de Cuautepec, detectaron unas camionetas en un camino de terracería que comunica a las comunidades de Alhuajoyucan y Santa Elena Paliesca.

Una vez que se dieron cuenta de que se trataba que en las dos camionetas tipo Pick up estaban cargadas de varios contenedores, y de volada montaron un operativo, que les rindió frutos, se informó al comandante Gasolinas el aseguramiento de una unidad Chevrolet Pick up, de color negro, con placas de circulación HJ-4950 con un contenedor de 200  litros cargado a la mitad, y otro contenedor cargado con mil litros, lleno a su capacidad.

Estaba dentro de la camioneta Ford Pick up, color verde, placas de circulación HJ-63917 se encontraron  dos contenedores con  mil litros cada uno, se encontraba uno lleno y el otro a la mitad, por lo tanto se aseguraron  los camiones y la gasolina y tres ladrones de hidrocarburos, que no se dicen sus nombres porque pueden ser inocentes. (Por qué no los dejan libres). Todo quedó ante el Ministerio Público, que se encargará de otorgarles la ley de Herodes, por riñones.

ASALTAN TERMINAL FUTURA

Un solitario ladrón, que no necesitaba vejigas para nadar, armó una tremenda movilización de patrullas de Pachuca y del Estado, luego de atracar la terminal o paradero de autobuses de la línea Futura que ofrece el servicio al Distrito Federal, que se encuentra en el boulevard Felipe Ángeles, frente a la plaza de toros Vicente Segura, en la capital de la novia del Viento.

No fue para menos, porque una mujer de 27 años de edad, que la despojaron de dos mil pesos en efectivo, gritaba a todo pulmón, la gente pensó que estaba pariendo chayotes. Llamó por teléfono a los uniformados, al 066, pidió muy nerviosa, el apoyo de la gendarmería de Osorio, les dijo que asaltaban en ese momento a un autobús, cuando en realidad fue únicamente a ella, que atendía la caja y vendía los boletos. La alerta del asalto se corrió de boca en boca y se dijo que era una banda armada hasta los dientes, en menos que canta un gallo, todas las unidades de la gendarmería, incluyendo agentes investigadores y de criminalística de campo.

Eran las 8 de la mañana, llegaron a la terminal, los uniformados se bajaron de a pedal y se pusieron en varias direcciones, con su escopeta lista para soltar el plomazo, nada que hace que luego los metan a la cárcel por matar algún delincuente. La víctima, una mujer que tenía los ojos de cuyo de tanto llorar, y se quejaba que le dolía el esternón  porque el bandido le dio una aventón para robarle el dinero, que se torció.

Los uniformados la calmaron, le dijeron que no se espantara, que ellos estaban para protegerla, que hablara y les contara cómo había estado el rollo, para ellos tomar el asunto en sus manos.

Les contó que todo trascurría con mucha calma y  siempre está muy segura, porque a unos metros se encuentra la Procuraduría General de Justicia en el Estado, y en los estacionamientos hay mucho uniformado, por eso nunca ha tenido miedo. Pero esta vez entró un tipo chaparro, con una chamarra azul y pantalón de mezclilla, de un momento a otro le llegó por la retaguardia, dándole un  madrazo en la espalda, y la empujó con todas sus fuerzas, que la tumbó al suelo, el ladrón agarró los billetes, que en total fueron dos mil pesos, de la caja registradora y la tumbó, el se echó a correr, pero no supo por dónde.

Dijo que la disculparan, pero por el susto, el miedo, los nervios, la angustia, la desesperación, al tener la comunicación del 066, a la operadora se le trabo la traba, y en lugar de decir que a ella la habían asaltado, dijo que estaban asaltado un autobús de la línea Futura, por eso llegaron tantas patrullas al lugar.

La presencia causó una movilización de uniformados, lo mismo que de curiosos y mirones, porque llegaron motociclistas, patrulleros, 12 camionetas, coches de agentes, y hasta un grupo de bicicleteros de la policía municipal, después cada chango a su mecate, los uniformados implantaron un operativo “Cero” que llegaron poco después, con cero detenidos. La mujer tranquila, les dijo que al menos eso les sirvió de práctica para que siempre estén abusados y no se duerman.

LO ASALTARON AL BAJAR DE UN AUTOBÚS ADO

Mal comienza la semana para el que ahorcan el lunes, y una marga experiencia le tocó a un vecino del Estado de México al llegar a Tulancingo, parece que le estaban esperando y fue asaltado por dos tipos con pistola en mano.

Francisco de Jesús Aguilar, de 28 años de edad, estaba triste y pálido, muy asustado, amarillo como chale, con los pelos parados, y les conto a los uniformados, que vivió una pesadilla del fondo del infierno donde le vio las nalgas al diablo. Dijo que apenas iba a poner un pie en el suelo, para bajarse del autobús frente a la conocida tienda La Preferida que se en contra en la bajada de la muerte, cuando fue sorprendido.

Afirmó que alrededor de la 9 de la noche fue a Tulancingo a visitar unos parientes, al tocar tierra lo esperan dos delincuentes que le pusieron la pistola en los costados y se lo llevaron frente a una gasolinera, les preguntó que si así le daban la bienvenida a los visitantes, les dijeron que sí, que se trataba  de un asalto, que se cayera cadáver con todo lo que tenía o lo dejan frío de un  plomazo que le iban a dar en la chirimoya.

Les iba a preguntar algo, pero le dieron una madrazo en el hocico y le quitaron su celular, su reloj de pulso y su cartera, que llevaba 700 pesos, su credencial de elector y su licencia de manejo.

Con el botín en su poder, los dos asaltantes se echaron a correr,  dijo que como él estaba tirado y sangrando de un ojo, no intentó corretearlos en la calle, por esos lugares no encontró ni a un policía para remedio y caminó mirando para todos lados, hasta que llegó a la casa de su parientes, como iba todo madreado no lo dejan entrar, pensado en era  un teporocho de los de la colonia.

Pero al identificarlo y ver cómo lo habían dejado, como al monstruo de la laguna negra, de volada lo llevaron a un hospital para que recibiera atención, le dijeron sus parientes que por qué no llamó a la policía, dijo que le robaron su celular y no se sabe el número.

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