SU VIEJO LA QUIERE MANDAR A LA HOGUERA
La señora Laura Rendón, de 38 años de edad, llora como la zarzamora porque su viejo borracho la quiere matar, ha intentado quemarla viva, ella lo ha denunciado dos veces, pero no le hacen caso las autoridades, su viejo cuando llega a su casa, se burla, le enseña un garrafón de gasolina y un cerillo, ella lleva noches con el ojo pelón, para que no la vaya a dejar como carbón, el que está bailando en la tablita es su hijo de 9 años, porque su padre lo quiere rostizar.
Guillermo Escalante es su condenado viejo que cada que quiere la agarra a madrazos, ella recuerda que desde años ha sufrido mucho, padece artritis degenerativa, sus manos están engarruñadas como si anduviera echando cremas, un día su señor, se metió a su cuarto muy mansito y salió con los ojos rojos como de cuyo, poniéndose como el hombre verde, la agarró del pescuezo apretándole el gañote, ella se le escapó, corrió a esconderse debajo de la cama,
La encontró sacándola de su escondite, la arrastró de las greñas, que se las arrancó, dejándole partes pelonas, fue cuando se dio cuenta que su marido le entraba a la “coca”, lo fue a denunciar a Protección a Víctimas, pero le dijeron “tiene que traer testigos”.
Desde esa fecha la agarró de barco, y le dice mentiras a las autoridades, que le contó un pajarito, como el que le habló a Maduro, que ella le anda poniendo con otro guey, que le juega chueco, la han visto y se lo dicen en su cara para que no se haga la santa. Comentó la señora que un día llegó a su casa sin dejar de echar madre, al verla le aventó gasolina y muy enojado,
le prendió fuego.
Sus ropas comenzaron a arder, rápidamente se las quitó para que la lumbre no le llegara al cuero, quedando en traje de rana. Por el susto le anda fallando la molleja, ya no quiere vivir con él, lo fue a demandar con el subdirector de averiguaciones previas, quien ordenó que la pasaran a Atención a Víctimas pero las viejas le dijeron “tiene que traer testigos”
Esa bronca que tiene con su viejo vicioso ha aumentado, la tiene amenazada, diciéndole que si lo deja se la van a pagar sus carnalas, se las va a quemar. La señora tiene miedo de que su viejo loco cumpla sus amenazas, pide que lo encierren, no dio su dirección porque si se entera la mata.
Sólo se lo dijo al MP para que le caigan en la maroma y se lo empinen, le quiten esos instintos que tiene de convertirla en chicharrón. Dice la señora que no le va a quedar otra que juntarse con un bombero que desde hace tiempo le anda echando los perros.
DOS VIEJAS LE DIERON SUS REVOLCADA A UNA JOVEN
Mónica Elizalde, de 21 años de edad, quedó toda desmadrada, con la cara rasguñada, parecía mapa, parce que se había aventado una madriza con un gato, aparte le faltaban mechones de pelos, que se los arrancaron y quedó con un chipote en la frente, que quedó como el hombre elefante, lo chistoso del asunto es que las que se la sonaron no las conoce, ni las quiere ver, no vaya ser el diablo y le partan otra vez la madre.
Le contó al agente del Ministerio Público de la PGJEH, que como a las 9 de la noche caminaba muy contenta, echando nalgazo, del brazo de su novio José Hernández, en la calle Julián Villagrán, junto a la parada de los camiones, del templo metodista en Pachuca, la acompañaba su prima Lucero Hernández Bautista, de momento se le atravesaron dos viejas, una le puso una cachetada, mientras que la otra la jaló de las greñas, la tumbó, todo fue tan rápido que el novio y la prima se quedaron sin hacer nada, una de las mujeres se le monto y la otra le rasguñaba la cara, le dio de golpes con el puño cerrado en la barriga, que le sacó el aire.
La otra vieja parecía luchadora ruda, le picó los ojos y le dio una mordida en el brazo. Le estaban dando de patadas, cuando su galán entró al rescate aventando a las mujeres. Estaban como gallito de pelea las viejas, por pegarle a la mujer, se lo llevaron de corbata, cayendo encima de él, diciéndole a Mónica: “te vas a acordar de nosotras” Le dieron un caballazo, que cayó de nalgas, se quedó sentada, sobándose porque se pegó en el filo de la banqueta, enojado el novio, comenzó a aventar de madrazos a lo loco, fue cuando las mujeres, furiosas se retiraron, sin dejar de decirle que le falta otra friega.
Entre su prima y el novio la pararon, agarrándola uno de cada brazo, comenzó a dar los primeros pasitos, parecía que había parido cuates.
Estaba muy golpeada, la llevaron a la policía. Dijo que a lo mejor la confundieron porque nunca las ha visto ni las conoce, ella no tiene ninguna bronca con nadie, pero ahora está atemorizada porque las mujeres fueron directamente a desmadrarla, a lo mejor tienen algo en contra de su familia, le preguntaron al novio si tenía algo que ver, a lo mejor dejó por ahí a una chica, y se cobraron a lo chino, dijo que no, él se quedó sorprendido al ver que en dos por tres, hayan golpeado al amor de sus amores. Mónica pide a las autoridades que investiguen y agarren a las golpeadoras.
Dice que han de ser aficionadas a la lucha libre, porque al verla sin chistarle palabra, le dieron un faul que vio estrellitas, luego le picaron los ojos y le dieron de patadas por la retaguardia, hasta que el novio se las quitó de encima y se echaron a correr.
LE ROBARON SU MOTO
Antonio Ramírez Ortega no lo podía creer, miraba para todos lados, quería chillar. En menos que canta un gallo, los ladrones le robaron su motocicleta en pleno centro de la ciudad, sólo se alejó 10 minutos y se la volaron, echando pestes, caminó Morelos, Hidalgo, Matamoros, y encontró pura madre. Muy triste, cansado y sin ilusiones, camino a la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito en el Estado, para poner una denuncia en el Ministerio Público.
Le contó al MP, que trabaja como ruletero, cuando descansa anda recorriendo la ciudad en su motocicleta Italika EX150, modelo 2006, la compró en septiembre del año pasado, en 12 mil Chuchos. El lunes, como a las 7 de la noche, fue al centro, sabe que los tránsitos andan de gandallas, pues es el año de Hidalgo, a ver a quién amuelan, como no tiene casco no le arriesgó, dejó su moto estacionada afuera de la casa de su patrón, en la calle de Morelos 600, pero no le avisó, fue a comprar lo que necesitaba, cuando regresó se llevó la sorpresa de su vida: su motocicleta no estaba.
Tocó la puerta de la casa de su patrón, salió su jefa, le preguntó qué deseaba, le contó que había dejado su moto afuera, que si no la habían visto, le dijo la señora que no, pero la hubiera metido a su casa.
La hija de la señora le dijo que tenía 5 minutos que escuchó un ruido, se asomó por la ventana y vio que se llevan una moto, nunca pensó que fuera de él, Antonio salió corriendo, a buscarla por todas las calles, encontró una patrulla, la paró, les contó a los uniformados, que le habían robado su máquina, le dijeron que fuera a poner su denuncia al Ministerio Público, porque ellos andaban buscando un coche que se acababan de robar en la Plaza Independencia.
Por eso fue a pedir a las autoridades que encuentren su motocicleta, que tiene un valor de 10 mil pesos, quedó asentada en el acta, le dijeron que cuando agarren a los ladrones, lo llaman para que vaya a reconocerla. Saliendo de las instalaciones policíacas se quedó en la esquina, parando a sus compañeros taxistas, avisándoles que se comunicaran por radio entre ellos para localizarla y le contestaron “no te preocupes, camarita, entre todos le vamos a echar montón para dar con ella, súbete, te doy un aventón a tu casa”.
DOS COMADRES ARMARON BRONCA EN EL CENTRO
Un escándalo de todos los diablos se escuchaba como a las dos de la mañana, dos viejas se daban tremenda madriza, era de muerte, se azotaban en el suelo, se paraban de los pelos, se acomodaban de topes, rodaban por el piso, se tiraban con lo que encontraban, se quitaron las dos, las zapatillas y se abrieron el coco con el tacón.
Los vecinos de las calles Morelos y Ocampo les aventaron agua para que se desapartaran, pero ni así se dejaban, estaban trabadas como cangrejos, las minifaldas las traían enrolladas en la cintura, enseñando las nalgas, con las pantimedias rotas, habían dejado mole por todos lados, más el que les escurría por las orejas, no dejaban de decirse de maldiciones una a la otra, después de una hora de pelea llegaron los cuicos, que tuvieron que echar su fuerza bruta para desapartar a las mujeres, en un principio se les fueron a rasguños a los uniformados, que tuvieron que jalarlas y les hablaron fuerte, por un momento se quedaron quietas, a pesar de que los Tecolotes las tenían agarradas de los brazos, no dejaban de aventarse de patadas, se las llevaron a la Delegación de la Policía Municipal, y ahí se dieron cuenta que no eran mujeres, sino dos gays.
Le dijeron al MP que se llamaban Luís Alberto Ávila Méndez, de 24 años de edad, con domicilio en la calle de Gómez Farías, de la colonia centro, el otro mono se llama Luís Alfredo Soto Rosales, de 26 años, que vive en la calle Pedro Escobedo 402, en el barrio de Las Lajas.
Declararon por separado, dijo Luís Alberto que son comadres, se estimaban mucho pero cuando se fueron a hacer la meme porque no había clientes, llegó su padrote de nombre Armando Sánchez, lo recibió con apasionado beso porque son novios, eso molestó a su comadrita, que se dio la vuelta y la esperó en el centro para rajarle la madre, porque la descontó a la mala. Luís Alfredo Soto dijo a las autoridades que vive un romance a escondidas con Armando, él le había dicho que tenía una vieja que le soltaba la lana, pero nunca se imaginó que era su comadre, eso la hizo bufar, le reclamó y se pelearon.
Cuando estaban en su declaración llegó el famoso Armando, quien pagó la multa de los dos, se los llevó en un coche negro, sabrá Dios si se volvieron a pelear o se reconciliaron haciendo un trío.