Están ubicados en la vía pública, estorban y algunos son refugio de personas en situación de calle

Decenas de estanquillos de comida ubicados en la vía pública de Tulancingo, en calidad de abandonados, comenzarán a ser retirados por las autoridades locales para evitar riesgos de infección.

Dichas estructuras, que eran utilizadas para negocios de comida rápida, se encuentran en abandono, invaden la vía pública, y son un punto de refugio para personas dedicadas a la delincuencia y hasta son usados como baños públicos.

Jorge Rivera, director de reglamentos del municipio de Tulancingo, manifestó que estos estanquillos serán retirados en tres etapas, luego de atender varios reportes ciudadanos, dónde han exhibido con pruebas el abandono, y el mal uso que se les da.

Dijo que la primera etapa consistirá en quitar los estanquillos abandonados, un aproximado de 30, que son usados para actos ilícitos; estos serán decomisados y entregados a resguardo al municipio, con la oportunidad de que lo dueños acudan a reclamar su propiedad, adquiriendo una multa y explicando la razón del abandono. 

La segunda etapa consistirá en quitar y regular los que están en uso pero impiden el libre tránsito de la población y de los autos, situación que puede incluso terminar en un accidente vial. 

El tercero, y considerado por el director como el más complicado, consistirá en invitar a los estanquillos de renombre, es decir, los que suelen ser ocupados de taquerías principalmente, “en este tercer paso, los invitaremos a que se muevan de lugar, que renten un espacio fijo y se libere la vía pública, principalmente las calles”, expuso.

Finalmente, dijo que respecto a la primera etapa en la que se retirarán los abandonados, la ciudadanía ha mandado las pruebas suficientes para comprobar que estos son ocupados para actos de delincuencia, así como de baño público.