Washington.- Las nuevas regulaciones para otorgar la ciudadanía a los hijos de militares estadounidenses y empleados del gobierno que nacen en el extranjero no afectan el derecho de nacionalización por nacimiento, aclararon funcionarios.
Las regulaciones anunciadas el miércoles causaron confusión entre abogados de inmigración luego que un documento parecía indicar que los hijos de ciudadanos estadounidenses se verían afectados.
Funcionarios del Servicio de Ciudadanía e Inmigración hablaron con reporteros el jueves a fin de aclarar las regulaciones, y dijeron que si el hijo de un estadounidense, militar o empleado público, nace en el extranjero, entonces el niño será ciudadano estadounidense.
Existe un cambio de política y afectará a entre 20 y 25 personas al año, dijeron. Se trata de un cambio de requisito de residencia y afecta a militares y empleados públicos que son residentes permanentes y traen al mundo a un niño durante tiempo de servicio en el extranjero o adoptan a un niño que no es ciudadano estadounidense o son padrastros de un niño nacido en el extranjero.
Anteriormente, la agencia obvió los requisitos de residencia en EU para estas personas al momento de solicitar un pasaporte para sus hijos, pero los funcionarios dijeron que el Departamento de Estado rechazaba las solicitudes por no cumplir con los requisitos.