#ENTRE EL CALLEJÓN Y EL TENDIDO
• Concluye un año particularmente difícil para la Fiesta Brava en México
Estimados Amigos, con el gusto de siempre saludándolos a través de Plaza Juárez. Deseamos que la paz, el amor y la felicidad aniden en el corazón de todos nosotros y prevalezcan a lo largo del próximo año. Finaliza un año particularmente complicado para la Fiesta Brava en general y particularmente la mexicana; se multiplican sus detractores, cada vez es menor el número de festejos que se organizan a nivel nacional, principalmente novilladas, se hacen intentos por activar un mecanismo generador de nuevos toreros, pero que lejos de ser efectivo ha ido abriendo una brecha entre jóvenes novilleros con “posibilidades” (sobre todo económicas) y otros que aun cuando han mostrado aptitudes y actitud, tristemente ven pasar los días, semanas y meses sin conseguir una oportunidad relevante.
A principios de año se reorganizó, con grandes ilusiones para los aspirantes a toreros, y la misma afición, el certamen que ya la Asociación de Criadores de Toros de Lidia había llevado a cabo en años anteriores, esta edición -impulsada y organizada por la empresa que administra la Monumental Plaza de Toros México- fue denominado “Soñadores de Gloria”, se convocó a todo joven y no tan joven aspirante a novillero, novilleros sin caballos, novilleros con caballos que han tenido pocas oportunidades y novilleros con caballos que ya tuvieron todas las oportunidades de torear a través de no pocos años, respondieron por ahí de 117 jóvenes, de las más diversas edades y procedencias, desde Quintana Roo, hasta la frontera norte y fueron calados, lidiando vacas viejas, en el ruedo la Monumental capitalina ante el escrutinio de varios matadores de toros en el retiro, se suponía que un regular número de participantes sería considerados en la confección de carteles en los escenarios designados para organizar novilladas e impulsarlos, sin embargo sólo un reducidísimo grupo de no más de ocho o diez novilleros tuvieron la fortuna de alternar en todas las novilladas organizadas en el circuito diseñado por los señores de los dineros y sus asesores taurinos, en tanto la inmensa mayoría se quedaron en “Soñadores de Gloria”, y no fue metáfora.
La evidencia de lo que comentamos ahí está, basta checar los carteles de las novilladas del certamen y podemos corroborar que hubo semanas en que tres días fueron ofrecidos los mismos carteles, eso sí en diversos escenarios y con astados de diferentes ganaderías.
Debemos, es nuestra obligación, reconocer el esfuerzo que hacen las empresas por organizar festejos de los llamados menores, con todas las circunstancias en contra, novillos caros, plantillas de subalternos sin concesiones y, sobre todo, pésimas entradas en los tendidos de las plazas de toros, sin embargo en lo que no podemos estar de acuerdo es en que no se den oportunidades a un mayor número de novilleros, que si por alguna razón de simpatía, compromisos políticos o comerciales, las empresas deben anunciar a tales o cuales jovencitos, intercalen en sus carteles a novilleros que han demostrado posibilidades y pueden gustar e interesar a los aficionados, ¿sería que realmente poco más de cien de los examinados no llenaron las expectativas a quienes les fue encomendada la organización de “Soñadores de Gloria”?
Según las estadísticas, números más números menos, en el año que concluye se celebraron 351 novilladas a nivel nacional, fueron anunciados 109 novilleros, entre ellos 13 extranjeros (de España, Ecuador, Colombia y Francia), de esto lo interesante es que el selecto primer grupo que actuaron en más de 10 novilladas, integrado por ocho jóvenes novilleros con mayores “posibilidades” torearon 128 festejos; en el siguiente grupo 49 jóvenes coletas torearon más de una y menos de 10 y después de estos un grupo de 52 actuaron en una sola ocasión en todo el año.
Triste el panorama de nuestra Fiesta Brava, porque además, el hecho de que novilleros encabecen el escalafón con más 20 actuaciones, como es el caso de Francisco Martínez y Héctor Gutiérrez, no les garantiza que una vez alcanzada la Alternativa tengan mayores oportunidades en las filas de los Matadores de Toros, si no, ahí están Antonio Mendoza, Diego Sánchez y un larguísimo etcétera.
Por cuanto hace a los Matadores de Toros el panorama no es muy diferente, con la salvedad, para desgracia de la renovación de nuestra baraja taurina, que a lo largo del año que termina, hasta el día de ayer, se habrían celebrado más de 732 corridas de Toros, desde la Monumental Plaza de Toros México, hasta los más modestos cosos de la geografía taurina de la República Mexicana, habiendo sido acartelados 129 diestros, de los cuales 27 torearon más de diez tardes, 47 de dos a diez y 54 solamente una vez se calzaron el terno de luces.
Así las cosas, cuál será el futuro de la Fiesta Brava en México, sin fatalismos ni augurios catastróficos, el panorama que se vislumbra no es nada halagüeño, esperemos, como cada fin de año, que el Niño Dios, nos haga un milagro. Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo.
Por ahí nos vemos ENTRE EL CALLEJÓN Y EL TENDIDO si Dios lo permite.