CINE DE MAÑANA
Pese a la prohibición del gobierno iraní, el apreciable realizador Jafar Panahi se las ha ingeniado para seguir filmando. En su más reciente cinta 3 rostros, que forma parte en la LXV Muestra Internacional de Cine que se exhibirá en el teatro Guillermo Romo del Vivar, abandona los espacios cerrados de Esto no es una película o la capital en Taxi Teherán.
Mientras filma en la clandestinidad, su actriz principal Benhaz Safari recibe un impactante video del interior del país.
La jovencita Marziyeh Rezaei le explica que su familia se opone a que estudie actuación y que desesperada por la falta de apoyo, ha decidido quitarse la vida.
Benhaz muy alterada suspende la filmación y le exige al director que la lleve al pueblo para averiguar la verdad.
Conocen a la familia de la chica, que lleva tres días desaparecida, y se enteran que es despreciada por el pueblo “por considerarla una rebelde que quiere ser teatrera”, como una anciana que es repudiada por todos “por haber actuado en varias películas”.
El guión del propio realizador, que fue mezclado en el Festival de Cannes mezcla acertadamente la ficción con la realidad.
A su llegada al pueblo son aclamados como políticos en campaña, porque piensan que resolverán todos los problemas que tienen, como el que la carretera tiene una sola vía, que solo permite el tránsito de un vehículo, pero son menospreciados al enterarse que solamente han ido por la joven Marziyeh.
Se Rokh resulta pues una sencilla e interesante visión del Irán rural, retrógrado y lleno de tradiciones y prejuicios contra el avance tecnológico y la modernización, a través de los tres rostros del título.
