¿Torturadora chilena?

CINE DE HOY

Uno de los platos fuertes de la XIII Muestra Internacional de Mujeres en el Cine y la TV, que se llevó a cabo en la Cineteca Nacional y otras sedes capitalinas, fue El pacto de Adriana de la chilena  Lissette Orozco,
Esta joven nacida en Santiago hace tres décadas se ha desempeño como investigadora de la serie televisiva, Vidas en riesgo antes de filmar los cortos subsuelo, Vorágine y La vida ideal, premiados en el Festival de Derechos Humanos.
La realizadora confiesa que cuando era niña, admiraba a su tía Adriana, pues era una secretaria exitosa que viajaba frecuentemente al extranjero y regresaba colmada de regalos.
Sin embargo, de buenas a primeras se convierte en blanco de denuncias de quienes buscan castigar a los torturadores de la dictadura de Augusto Pinochet.
Se revela que Adriana fue secretaria de la temible DINA, agencia torturadora.
Ella se defiende diciendo que ingresó a la Secretaría de la Defensa Nacional y que ignoraba que se torturaba en ese lugar.
Pero sus detractores aseguraban que no solamente sabía que se torturaba, sino que ella misma participò en las torturas.
Adriana le propone a su sobrina que filme una película que demuestre su inocencia.
Señalada por varios testigos como torturadora, Adriana huye a Australia desde donde sigue en contacto con su sobrina, exigiéndole que prosiga sus investigaciones.
Lissette pone en duda la inocencia de su tía, quien se muestra decepcionada de que se ponga en duda su palabra.
El pacto de Adriana se transforma pues en una interesante búsqueda de la verdad histórica, que es más importante que los lazos de sangre.     

Related posts