Con sátira, crítica social y música en vivo se da forma a Finísimas personas, obra que Tiaré Scanda escribe, dirige, actúa y que estrenó el 23 de mayo en el Foro Shakespeare.
En entrevista, la actriz destacó que la gama de personajes que se maneja sobre la tarima es resultado de la variedad de gente de diferentes estratos sociales que quería ver. “No se trata de señalar a alguien irresponsable. En cualquier nivel social hay gente que se relaciona de manera violenta con su entorno. Es una invitación a vernos en el espejo”.
Sobre la temática que aborda con esta puesta, Scanda destacó que su objetivo principal es entretener. “Cuando vas al teatro, buscas pasar un buen rato. Es decisión del espectador si quiere buscar más profundidad o sólo divertirse. El teatro siempre deja que el espectador lo viva de distinta manera”.
Uno de los tópicos sobre los que la obra satiriza es el mundo del espectáculo, un aspecto que ha cambiado drásticamente para quien fuese Elena Olivares en el melodrama de los 90, Muchachitas. “De unos años para acá se generó este término de ‘los famosos’, que me parece patético. Antes eran ‘’los artistas’, luego ‘los famosos’ porque no importa que no sepan hacer nada”.
“Hay una necesidad de mucha gente por ser vista. Hacen cualquier ridiculez para subir un video a la red y existir por las razones equivocadas”.
Tiaré destacó que incluso antes de la aparición del Internet, el oficio artístico ya se veía afectado. “Desde la aparición de los programas de chismes, ya no importaba que el que conducía el programa fuera un reportero estudiado o que el invitado fuera o no un artista”.